16/12/2020

Seis décadas insistiendo

El 17 de diciembre de 1960, la revista semanal de música Cash Box publicó los lanzamientos de ese mes de cada sello discográfico. Entre los del sello “Candid Records” figuraba “We Insist!”, un álbum grabado entre agosto y septiembre de ese año en cuya portada había tres hombres, negros, sentados en un bar, en posición de ser atendidos, observando mientras que detrás de ellos en la barra, se ve un hombre blanco que es el camarero que los atiende. En aquel tiempo de segregación, esa portada, al igual que los contenidos de esa obra, representaban un fuerte grito de lucha contra el sistema. Por Ramiro Giganti (ANRed).


Entre finales de agosto y principios de septiembre de 1960 se desarrollaron los Juegos Olímpicos en la ciudad de Roma. Mientras eso sucedía, en un estudio de grabaciones en Nueva York, un grupo de notables músicos de jazz afrodescendientes grababa la Suite “Freedom Now” (libertad ahora). Otro afrodescendiente haría historia en Roma al ganar una medalla de oro en boxeo representando a Estados Unidos, quien años después comentará a la prensa que al regresar a su país, con la medalla de oro colada, no pudo tomar un café en un bar de su ciudad natal, Kentucky por el simple hecho de “ser negro”. El boxeador en cuestión era Muhammad Alí. El episodio redactado por el campeón de boxeo, quien también fuera sancionado por negarte a participar de la guerra de Vietnam, era más que frecuente en aquellos tiempos, donde emergía el movimiento de lucha por los derechos civiles. Por eso la portada de “We Insist!” con ese nombre provocador en un álbum cuyo contenido era la suite “Freedom Now”, una obra conceptual contra el racismo, tenía un contenido particular.

La suite,  compuesta por el baterista Max Roach y el letrista Oscar Brown, se empezó a crear en 1959 con la idea de poder interpretarla para el centenario de la Proclamación de Emancipación de 1863, en la que se había declarado la libertad para todos los esclavos de los Estados Confederados de América.

Sus miembros

“Los músicos de jazz estadounidenses de ascendencia africana hemos demostrado, sin lugar a dudas, que somos músicos maestros de nuestros instrumentos. Ahora, lo que tenemos que hacer es emplear nuestra habilidad para contar la dramática historia de nuestra gente y lo que hemos pasado” Max Roach

Max Roach fue el creador ideólogo y principal referente de la obra. Reconocido baterista por su participación en los años del Beebop sobre todo con sus actuaciones en los bares de la calle 52 en el corazón de Harlem,  principalmente junto a Charlie Parker. A principios de esa década, los 40, había sido parte de la orquesta de Duke Ellington. A principios de la década del 50, Roach siguió haciendo historia: por un lado participó del histórico recital en el Massey Hall de Toronto en 1953 junto a Dizzy Gillespie, Charlie Parker, Charles Mingus y Bud Powell, que es considerado una de las grandes grabaciones del género. Pero también fue parte del clásico “Birth of the Cool” de Miles Davis, grabado entre 1949 y principios de la década del 50, publicado en 1954, considerado como uno de los momentos en los que Miles Davis cambió la historia del Jazz. Luego, Roach decidió que toda la música que él iba a crear desde ese entonces, debería tener un contenido social. En ese contexto ideó «We Insist!».

Max Roach. Foto: William Gottlieb / Redferns

La vocalista Abbey Lincoln es otra gran figura destacada en la obra. Junto con Max Roach son las únicas dos personas que aparecen en toda la obra. También actriz, tuvo sus primeras apariciones en musicales antes de sumarse a este desafío junto a Max Roach, con quien luego tuvo una relación entre 1962 y 1970. Lincoln tuvo un importante compromiso con el movimiento por los derechos civiles durante casi toda su carrera, habiendo, luego, escrito canciones con contenido crítico en sus letras. Luego de un viaje por África en 1970, adoptó el nombre de Aminata Moseka. Su principal inspiración fue Billie Holliday.

Abbey Lincoln. Fuente: The Guardian

Coleman Hawkins es una figura desatacada en el Jazz. Uno de los primeros saxofonistas de renombre en el género, que formó parte tanto de la era de Swing como de su transición hacia el Beebop. Si bien su participación se limita al principio de la obra, su renombre, además del aporte concreto desde su saxofón a la obra, resulta más que trascendente.

Booker Little en trompeta es otra de las figuras destacadas en la obra, tanto desde sus improvisaciones como sus participaciones en armonías particulares, teniendo en cuenta que, como parte del movimiento “Avant Garde” hacia donde iba el jazz moderno en aquellos años, la obra no tiene piano ni ningún otro instrumento armónico, buscando una mayor libertad e improvisaciones de sus ejecutores.

Julian Priester en Trombón Walter Benton tocando el saxo tenor completan la formación en vientos y James Schenk toca el contrabajo en casi toda la obra.

El “lado b” que recrea la parte más orientada a lo que acontecía en el continente africano, cuenta con la participación de percusionistas. Se destaca el nigeriano Michael Babatunde Olatunji, quien también tuvo una destacada carrera como activista y docente. Olatunji tocó las congas en todo el lado b y también aportó voces. Los percusionistas Ray Mantilla y Tomas du Vall también formaron parte de la segunda mitad de la obra.

Michael Babatunde Olatunji

La obra

La obra comienza con “Driva’Man”, que con su letra irónica y sarcástica que habla de los tiempos de la esclavitud, cuyo nombre refiere al capataz blanco, explotador y abusador. Ese corte incluye un solo notable de Coleman Hawkins. Se puede escuchar durante toda la canción un golpe regular y fuerte desde su principio candado “a capela” que recrea, de algún modo, el trabajo forzoso. Tiene la clásica cadencia de Blues que deriva las antiguas «work songs», pero que va incorporando armonías mas complejas y disonantes hasta llegar al solo de saxo.

Le sigue “Freedom Day”, con un swing marcado refleja la expectativa por la emancipación y liberación, con tensiones armónicas y un destacado solo de trompeta de Booker Little. Walter Benton en el saxo tenor y luego Julian Priester en Trombón tienen sus solos, para dar lugar a Max Roach con la batería. Luego Lincoln retoma la prédica con el resto de la formación acompañando.

 

En el tercer tema llamado «Triptych: Prayer/Protest/Peace» (Triptico: Plegaria, Protesta, Paz) conformado por tras pertas: la primera parte “Plegaria”, la segunda “Protesta” y la tercera “Paz”, no posee letra, pero allí se luce desde la expresión, la voz de Abbey Lincoln, donde desde la música la letra se vuelve innecesaria. Sus expresiones narran los momentos y expresan esa búsqueda, desde el pedido de plegaria y sufrimientos, hasta el grito rabioso de protesta, y luego un leve y breve susurro de paz, que de ninguna manera resuelve las tensiones, lo que marca ciertas contradicciones con la propuesta pacifista de Martin Luther King, quien a pesar de su pacifismo moriría asesinado en los años siguientes.

El paso para seguir en la lucha es la unidad con los pueblos de África, como es planteado en el lado b de la obra. En “All África” se incorporan percusionistas, y Lincoln comparte las voces con Olatunji, recorriendo territorios y mencionando distintos pueblos del continente. La música se vuelve más étnica dejando atrás el Jazz norteamericano. Allí el pueblo afrodescendiente se encuentra con sus raíces, pero no todo es celebración: ese encuentro también es un encuentro con la opresión que sufre el continente africano.

«Tears for Johannesburg» (Lágrimas para Johanesburgo) es el último tema de la obra, y es un señalamiento a  la masacre de Sharpeville, que tuvo lugar el 21 de marzo de 1960, en Sudáfrica, cuando la policía reprimió disparando balas contra una manifestación pacífica que pedía el fin del Apartheid y cuya consecuencia fue el asesinato de 70 personas.

60 años después y la necesidad de seguir insistiendo

Si bien las luchas de aquellos años tuvieron sus conquistas, el grito de Abbey Lincoln sigue vigente en estos días. Nada fue gratis: en los años siguientes al lanzamiento de este álbum, las luchas continuaron y también la dura represión. Malcolm X y Martin Luther King fueron asesinados, lo mismo sucedió con integrantes del partido de las Panteras Negras, además de la cantidad de manifestantes encarcelados.

En Sudáfrica se abolió el Apartheid en 1992 y luego Nelson Mandela fue presidente, pero el racismo continúa en ese país.

Manifestación por George Floyd en la Avenida Hiawatha, Minneapolis – Foto: Stephen Madden / Getty Images

En Estados Unidos, se lograron algunas conquistas, pero la población afrodescendiente continúa relegada de algunos privilegios: sus salarios son más bajos que el de los blancos (como sucede con otras diversidades étnicas, o con migrantes) y los casos de violencia institucional son frecuentes. Seis décadas después de la grabación de esta obra, Estados Unidos (y el mundo) se vio sacudido por las enormes manifestaciones contra la violencia policial y el racismo, disparadas principalmente por los asesinatos de George Floyd y Breonna Taylor.

El “lado b”, a modo de continuación de las movilizaciones que a principios de Junio se esparcieron por algunas ciudades estadounidenses y luego pro el mundo, son las recientes movilizaciones en Nigeria y otros países de África contra la represión policial. En el mes de octubre, el pueblo de Nigeria  se puso de pie protagonizando masivas movilizaciones contra el SARS: un escuadrón policial antirrobos que acumula numerosos casos de violencia y asesinatos sobre la población. En noviembre también se desarrollaron movilizaciones en Uganda, brutalmente reprimidas.

Protesta contra el SARS en Nigeria. Foto: Pius Utomi Ekpei – AFP

En el marco de las movilizaciones en Nigeria, con el hastag #EndSARS como tendencia, Seun Kuti, hijo del legendario músico Fela Kuti, anunció la refundación del MOP (Movement Of The People) creado por su padre, quien fue uno de los principales referentes del Afrobeat: movimiento de música africana influenciado por Michael Babatunde Olatunji quien se sumó a esa corriente en los años 70.



2 comentarios

1000/1000
Los comentarios publicados y las posibles consecuencias derivadas son de exclusiva responsabilidad de sus autores. Está prohibido la publicación de comentarios discriminatorios, difamatorios, calumniosos, injuriosos o amenazantes. Está prohibida la publicación de datos personales o de contacto propios o de terceros, con o sin autorización. Está prohibida la utilización de los comentarios con fines de promoción comercial o la realización de cualquier acto lucrativo a través de los mismos. Sin perjuicio de lo indicado ANRed se reserva el derecho a publicar o remover los comentarios más allá de lo establecido por estas condiciones sin que se pueda considerar un aval de lo publicado o un acto de censura. Enviar un comentario implica la aceptación de estas condiciones.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada.
  1. Agenda Cultural: cuarta semana de septiembre y anticipos – Federación Anarquista · 2023-09-20 21:51:05
    […] Pipi Piazzolla presenta Para Max, single homenaje a Max Roach. El reconocido baterista argentino lanzará el viernes 15/9 un tema inédito de completa improvisación inspirado en Max Roach, uno de los músicos más influyentes del siglo XX. El baterista argentino Pipi Piazzolla (miembro de la agrupación de jazz Escalandrum, del cuarteto Versus, del Pipi Piazzolla Trío, entre otros) presenta el single Para Max, improvisación homenaje a Max Roach, considerado uno de los mejores bateristas de la historia y que en 2024 cumpliría cien años. Dice Pipi Piazzolla: “Mi solo Para Max es un homenaje a  uno de los bateristas más importantes de la historia y una de mis máximas influencias. Max Roach es el que inventó tocar melodías en la batería, mantener un ostinato fijo e improvisar arriba, como por ejemplo mantener un ritmo fijo con los pies, y arriba hacer una improvisación. Entonces, en mi solo, yo mantengo un ostinato de bombo y dos high hats, que está en un 3×4 inspirado en su solo The drum also waltzes y arriba hago una improvisación libre, sin ninguna cosa planeada, en la plena inspiración del momento. Esto fue grabado en el mágico estudio Aguaribay, un lugar hermoso, por Nicolás Kalwill.  Como anticipo al centenario de su nacimiento, va mi homenaje a un maestro inigualable que tocó junto a Charly Parker, Dizzy Gillespi y Miles Davis, un inmenso baterista, compositor y comprometido activista por los derechos civiles”.  Escuchar Para Max en spotify. Leer nota sobre la suite Freedom Now, creada por Max Roach. […]
  2. Agenda Cultural: cuarta semana de septiembre y anticipos » Flipr · 2023-09-20 18:00:31
    […] Pipi Piazzolla presenta Para Max, single homenaje a Max Roach. El reconocido baterista argentino lanzará el viernes 15/9 un tema inédito de completa improvisación inspirado en Max Roach, uno de los músicos más influyentes del siglo XX. El baterista argentino Pipi Piazzolla (miembro de la agrupación de jazz Escalandrum, del cuarteto Versus, del Pipi Piazzolla Trío, entre otros) presenta el single Para Max, improvisación homenaje a Max Roach, considerado uno de los mejores bateristas de la historia y que en 2024 cumpliría cien años. Dice Pipi Piazzolla: “Mi solo Para Max es un homenaje a  uno de los bateristas más importantes de la historia y una de mis máximas influencias. Max Roach es el que inventó tocar melodías en la batería, mantener un ostinato fijo e improvisar arriba, como por ejemplo mantener un ritmo fijo con los pies, y arriba hacer una improvisación. Entonces, en mi solo, yo mantengo un ostinato de bombo y dos high hats, que está en un 3×4 inspirado en su solo The drum also waltzes y arriba hago una improvisación libre, sin ninguna cosa planeada, en la plena inspiración del momento. Esto fue grabado en el mágico estudio Aguaribay, un lugar hermoso, por Nicolás Kalwill.  Como anticipo al centenario de su nacimiento, va mi homenaje a un maestro inigualable que tocó junto a Charly Parker, Dizzy Gillespi y Miles Davis, un inmenso baterista, compositor y comprometido activista por los derechos civiles”.  Escuchar Para Max en spotify. Leer nota sobre la suite Freedom Now, creada por Max Roach. […]

Ir arriba