03/03/2005

SIMECA avanza en la legalización del sindicato.

simeca.jpg Los mensajeros y cadetes movilizaron al Ministerio de Trabajo. El 95 % está en negro. Esta semana despidieron a un integrante en un acto de discriminación gremial. Con la legalización del sindicato podrían avanzar en el reclamo de sus derechos.


simeca0042.jpg Entre el rugir de 100 motos, los mensajeros y cadetes se concentraron ayer en el obelisco a las 18.30 horas. La policía Federal (entre ellos un auto con policías de civil) les dijo que no podían quedarse allí, que debían circular por las nuevas normas del Código Contravencional. Entonces comenzaron a movilizar hacia el Ministerio de Trabajo en su cede de Callao 114.

Los funcionarios los recibieron con todas las puertas cerradas y se acercaron las fuerzas policiales de la Comisaría 5ª para custodiar el edificio. Los «motoqueros» colgaron sus banderas en la pared de la sede del Ministerio y se comunicaron con los funcionarios de Trabajo de Alem 650. No se irían hasta que los atendieran.

Uno de los mensajeros comentaba a ANRed: «Vinimos a reclamar por la legalización gremial del sindicato. Es lo que necesitamos para poder avanzar con un convenio colectivo de trabajo y entablar relaciones legales con las cámaras empresarias para hablar sobre el blanqueo de las agencias y el aumento del porcentaje de cada mensajero. Hace meses que tenemos presentado el trámite y no tenemos respuestas. El Ministerio no nos terminan de legalizar por trámites burocráticos, esa es la excusa política de ellos. La última vez que nos movilizamos al Ministerio de Trabajo en lo único que llegamos a avanzar es en la mesa en relación al blanqueo, que habilitaron inspectores. Los inspectores sirvieron para comprobar la relación de dependencia de las agencias pero no sirvieron para blanquear a los trabajadores.»

En la última movilización a Trabajo (del 22 de septiembre de 2004), se había resuelto la formación de una comisión inspectora conjunta de la policía del trabajo con integrantes del sindicato. La serie de visitas a las agencias derivó en amenazas empresariales y en aprietes policiales. El 8 de noviembre, 15 efectivos de la Policía Federal trataron de ingresar a los empujones a la sede sindical ubicada en Venezuela 1225. Incluso se les inició a integrantes del sindicato una causa penal por «amenaza coactiva y violación de domicilio» por ingresar a una agencia con la comisión inspectora. (Sobre la historia del SIMECA ver «Resumen de Noticias Nº 2», del 16/11/04) Hasta hoy las amenazas no ceden. Este lunes 28 de febrero un mensajero fue despedido por pertenecer al sindicato.

Tras la comunicación con los funcionarios, movilizaron desde Callao hasta el Ministerio de Alem, con la confirmación de que los recibirían. Luego de la reunión que tuvieron con el Jefe de Gabinete del Ministro, Norberto Ciaravino (el siguiente en importancia después de Tomada), los integrantes de SIMECA comentaron a ANRed que concretaron otra cita para hoy a la tarde con el fin de confirmar si los trámites necesarios para la legalización gremial están en orden.

En relación al encuentro, Juan comentó: «Nos atendieron en cuestiones técnicas, pero no han dado ningún tipo de respuesta. Nos han derivado al Gobierno de la Ciudad, por jurisdicción, han evitado la discusión y nos dejan abierta la puerta para que nosotros volvamos al plan de lucha y a la forma organizativa que nos demos de acá en adelante para seguir luchando y consigamos lo que realmente es nuestro. Mañana venimos una comisión para resolver las cuestiones legales y ver si conseguimos la inscripción legal.»

Simeca lleva 4 años desde su creación. En la rebelión popular del 19 y 20 diciembre de 2001, uno de los integrantes del sindicato, Gastón Riva de 30 años, fue asesinado en la esquina de Avenida de Mayo y Tacuarí, a 5 cuadras de la Casa Rosada. El SIMECA lleva adelante una campaña para conseguir testigos que hayan visto cómo Gastón fue asesinado y poder reconstruir la escena del crimen.

Aún hoy el gobierno no da el paso decisivo para legalizar el sindicato. Según el relato de uno de sus integrantes, el 95% de los mensajeros están trabajando en negro, sin ningún tipo de horario que rija la labor y sin ninguna cobertura: ni ART, ni obra social, ni jubilaciones, totalmente desprotegidos, sin representación gremial. Como no existe la regularización de la actividad, cuando se blanquea se lo inscribe en el convenio más bajo, que es el convenio de empleados de comercio. Pero allí no se especifica las condiciones del trabajo del mensajero.

El mensajero despedido:

Carlos trabajaba en la empresa MG, lo tomaron en negro para un supuesto período de prueba. Fue despedido este lunes sin ninguna justificación, al descubrir, según explica, que estaba participando en el sindicato. Como la empresa no cumple las normas laborales, no corre la indemnización correspondiente (actualmente del 80%, mal llamada «doble indemnización por despido sin causa»).

Explica Carlos a ANRed: «Nosotros abrimos este interrogante, que supone la discriminación que nosotros vamos teniendo. Ellos no quieren que nos organicemos y por tal motivo arman toda esta discriminación y la oportunidad de poder desplazarnos. Ahora con la lucha, tenemos que volver a pedir la reincorporación porque sabemos que esto puede ser un punto muy vital para nosotros y de repente puede jugarnos en contra. Sin la personería jurídica no podemos encarar ningún tipo de proyecto, tampoco podemos defendernos. La visión es positiva porque estuvimos hablando con un cargo bastante alto de lo que es el Ministerio y mañana [por ayer] habrá que ver si esto es efectivo o vamos a tener que volver e insistir un poco más y de una manera mas contundente. (ANRed)

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