03/06/2008

Reprimen a testigos detenidos en la Unidad 11 de Neuquén

Organismos de Derechos Humanos denuncian las nuevas amenazas y
represiones – que incluyen un intento de homicidio- que están recibiendo los testigos detenidos en la Unidad 11,
desde el comienzo del juicio a los 28 policías imputados por haber torturado en abril de 2004 a personas detenidas en esa misma unidad. Durante tres días las fuerzas policiales habían sometido a los presos arrojándoles granadas de gas lacrimógeno, disparos con armas de fuego y severas golpizas.


En la noche del jueves 29 de mayo se conoció que policías de la Unidad 11
de Neuquén tomaron por el cuello a uno de los testigos detenidos hasta
casi asfixiarlo, en un intento de hacerlo pasar por «suicidio». Esta fue
la más extrema de las represalias que están tomando los guardiacárceles
para con los testigos, que vienen ocurriendo, incluso, previamente al
comienzo del juicio el 19 de mayo.

A partir de las reiteradas visitas que la Comisión, creada con el objetivo
de garantizar la seguridad psicofísica de los detenidos -constituida por
miembros del Poder Judicial, el Ejecutivo, la Asociación por los Derechos
Humanos y el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos y Asociación
Zainuco-, se pudo dar cuenta de las denuncias que realizaron los presos
por amenazas y represión dentro de la cárcel.

«Ramón Mansilla llegó con el cuello marcado y nos contó que, a las 7.15 de
la tarde del miércoles, estaba en la celda llamada ‘buzón’ cuando llegaron
los policía por el sector de teléfonos – ya que no los pueden registrar
las cámaras- entraron con linternas y, con el recinto a oscuras,
intentaron ahorcarlo. Supo que quedó inconsciente unos 15 minutos por
otros presos que lo reanimaron»
, según denunciaron los integrantes de la
Comisión.

Revelaron también que los recursos de intimidación que utiliza la policía,
dueña del poder absoluto dentro de la prisión, son hostigar a las visitas,
decir que no hay traslado por falta de vehículo, parase en los pabellones
y golpear la planta de los botines con un bastón aludiendo a las golpizas
que recibieron en abril del 2004.

La lista de reclamos por parte de los testigos es extensa: «a Jeremías
Marín le rompieron todas las pertenencias, los números de teléfono que les
habíamos dado y la copia del testimonio que tenía. Cristian Ibazeta
denunció que, luego de ser golpeado en la Unidad 11, lo llevaron a la Comisaría
1ª y, la noche del jueves 22, lo dejaron esposado en el patio toda la
noche con el frío que hacía»
.

Gladys Rodríguez, de la Asociación Zainuco, informó que desde el
conocimiento de los agravios, hicieron como organismo de Derechos Humanos
una carta al Superior Tribunal de Justicia y al gobernador pidiendo que se
garantice, en forma real y efectiva, la seguridad de los testigos y sus
familiares; el retiro de la Unidad 11 de todos los policías que
intervinieron en los hechos de tortura; que permitan el libre ingreso a
todos los pabellones de los organismos de Derechos Humanos y que sean reemplazados
los psiquiatras y médicos policiales por otros de confianza.

Por último, Rodríguez manifestó: «Esta situación se debe a una inacción
de parte del Poder Ejecutivo y del Poder Judicial, siendo por lo tanto
responsables legal y políticamente de los hechos que se produzcan como
consecuencia de ello»
.

Contactos:

 Gladys Rodríguez: 011 – 1530683284

 Federico Egea: 0299 – 154088055



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