León Gieco por el No Desalojo: «Vamos BAUEN, no se rindan»
Cantó más de una hora y media unido a 3000 personas que se reunieron, el martes pasado en callao y corrientes, para apoyar a los trabajadores del BAUEN en el marco del festival solidario por el No desalojo. Con el mismo fervor tocaron Árbol, El portón, Patio Rojo y Bota Fogo. Estuvieron presentes, para apoyar, dos músicos de Attaque 77 en representación a la banda. El lunes 27 movilizarán, a las 17 hs, a Casa Rosada para pedir una audiencia y exigir el tratamiento de una ley nacional de expropiación para todas las empresas recuperadas. Fotos: gentileza Grupo Alavío.
Desde las cinco de la tarde, la intersección de las avenidas Corrientes y Callao fue un verdadero grito de protesta contra el fallo de la jueza, Paula Hualde, que inquiere a los trabajadores de la Cooperativa BAUEN a desalojar el hotel en 30 días para entregárselo a la firma Mercoteles S.A. La fuerza de la negativa a abandonarlo se sintió con toda su potencia cuando comenzaron el festival musical, el martes pasado, en el marco de un plan de lucha para evitar que se efectivice la orden de desalojo.
No estaban solos, las Madres de Plaza de Mayo, León Gieco, Attaque 77, Claudio Morgado, bandas musicales, un grupo de teatro, diputados de partido de izquierda, estudiantes universitarios, organizaciones políticas, sociales, de derechos humanos, sindicales y cientos de particulares se sumaron a participar del festival como una muestra de apoyo a la labor autogestiva que desde el 2003 vienen llevando adelante los cooperativistas.
»Podrán pasar mil años, verás muchos caer pero si nos juntamos no nos va a detener», la frase de Attaque 77, parece escrita para la ocasión.
La solidaridad fue grande. Muchas organizaciones pusieron el cuerpo para organizar el recital. Mientras algunas colaboraron desde temprano en el armado y diseño del escenario, otras participaron en la seguridad del festival. Foetra donó 4000 pesos para pagar el escenario, la Cooperativa Textiles Pigué (ex Gatic) pagó tres baños químicos y la asamblea de San Telmo solventó dos.
El show comenzó puntual, con una representación teatral del grupo Brazo Largo. A medida que pasaban las horas, las personas se iban atrincherando al escenario para sentir de cerca el calor que empezaban a emanar las bandas musicales. Entre acto y acto, se hacían cada vez más firmes las palabras que los oradores y los propios músicos elegían para relatar a los presentes la situación conflictiva y de amenaza que pesa sobre el BAUEN. Las adhesiones y cartas de todas partes del mundo apoyando la iniciativa no pararon de sucederse.
En el mitin, estuvieron presentes las Madres de Plaza de Mayo. Hebe Bonafini, quien ya había participado en la conferencia de prensa del jueves 10 de agosto, habría expresado ese día: «Esta no es una situación nueva, pero quieren sentar un precedente. Y no podemos permitirlo, porque van a caer todas las empresas. Las Madres vamos a hacer todo lo que haga falta. Queremos defender esto no por el edificio, las camas y los muebles, sino como un proyecto político nuevo y fuerte, de una cantidad de trabajadores que lo han tomado como propio. Me parece que hay que defenderlo a sangre».
Además subieron al escenario Luciano Scaglione (bajista) y Leonardo De Cecco (baterista) músicos de Attaque 77 para manifestar su apoyo en representación a la banda. «Apoyamos a la empresa recuperada y estamos en contra de los empresarios que quieren todo el dinero para ellos», alentaron
Antes del cierre del recital con León Gieco, Fabio Resino, trabajador de la Cooperativa del BAUEN anunció que lunes 27 a las 17 hs marcharán a Casa Rosada para exigir una audiencia con el gobierno nacional y exigir el tratamiento de un proyecto nacional de expropiación para empresas recuperadas que ampare la gestión obrera.
Además expresó: «les decimos a los funcionarios, a los legisladores que vamos a resistir el desalojo. Lo vamos a defender hasta el final, hasta lograr la expropiación definitiva, para que el hotel sea gestionado por los trabajadores. (…) vamos a pelear por la expropiación, aunque Iurcovich (propietario originario que actualmente demanda el Hotel mediante su testaferro Samuel Kaliman a través de la firma Mercoteles S.A, creada en 2005) no quiera oír hablar de expropiación. Él, que tomó fondos públicos del estado, que pidió un préstamo al BANADE en sociedad con la dictadura militar. Y nunca pagó.
Él, que no quiere ir hablar de expropiación, que expropió durante años la riqueza colectiva generada por los trabajadores que dejaron todos sus cuerpos en este hotel, él que hizo de la riqueza social, riqueza individual para vivir una vida de lujo y placeres, para hacer el BAUEN Suite y el BAUEN Buzios» y agregó que si: «la clase trabajadora es fuerte ,la clase trabajadora da pelea, si la clase trabajadora está unida, si la clase trabajadora es solidaria como hoy, la clase trabajadora es invencible» (…) Vamos a «expropiar a los expropiadores».
Tras el cierre de la oratoria, León Gieco subió al escenario pasadas las 20.30. «Vengo a tocar para ayudar a mis amigos del Bauen. Hay que defender a los trabajadores», con esa frase abrió su recital.
Luego de su primer tema, Cinco siglos igual, invitó a jóvenes artistas con discapacidades a sumarse a la plataforma. Los jóvenes lo acompañaron con sus voces e instrumentos durante todo el concierto.
Su repertorio estuvo compuesto por temas como: El país de la Libertad, Como la Cigarra, La memoria, Acuérdate de mí y La Colina de la Vida, entre otros. A las 22.40 cerró con Solo le pido a Dios.
Cerca de las 23, la gente comenzaba a esparcirse, no sin antes haber vivido la conflictividad y la esperanza que significa gestionar una empresa bajo gestión de sus trabajadores.
Nadie se fue sin antes responder ¿De quién es el Bauen? Y gritaron: ¡de los trabajadores!
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