Telefónicos tomaron Movistar y continuarán con las medidas de fuerza en el conflicto con Telefónica
Tras el Plenario de Delegados que se realizó el martes 24 de julio, los trabajadores que prestan servicio para Telefónica decidieron continuar con el paro de 72 horas hasta el día viernes 27 de julio y profundizar las medidas de fuerza contra la empresa. En este marco, dos mil trabajadores ocuparon durante cuatro horas el edificio de Movistar, ubicada en Corrientes y Maipú. Por otra parte, los trabajadores que prestan servicios para Telecom levantaron las medidas de fuerza tras haber conseguido la reducción de la jornada laboral a siete horas y un aumento del 16.5% a partir de julio.
Más de 2000 trabajadores ocuparon a las 12 horas la sede de la empresa Movistar, ubicada en Corrientes y Maipú y a las 16 decidieron desalojarlo de forma pacífica.
Claudio Marín, secretario adjunto de la Federación de Obreros y Empleados Telefónicos (FOETRA Buenos Aires) habló en la calle ante la multitud y sostuvo que «los trabajadores continuarán ocupando de manera sorpresiva distintas oficinas comerciales de Telefónica«, a la vez que ratificó la continuidad de la huelga de 72 horas.
Los trabajadores reclaman un aumento salarial similar al obtenido en Telecom, de 16, 5 por ciento. La empresa Telefónica mantiene el diálogo cortado sin hacer ofrecimiento alguno a los trabajadores. Por lo cual los telefónicos decidieron como forma de profundizar la lucha, que en cada edificio donde funcione un cuerpo de Delegados, se impidiera el ingreso de los contratistas, que realizan el 60% del trabajo para la empresa.
Los contratistas son los encargados de: la instalación de ADSL, las altas de abonados (teléfonos de línea), reparaciones, tendidos de la red y en los Call Center de los servicios 110 y 112.
Facundo es trabajador telefónico, tiene 28 años y desde que empezó a trabajar en la empresa es la primera vez que protagoniza un conflicto sindical tan prolongado y de tal magnitud política.
«Frente a esta situación, de una huelga que se extiende en el tiempo -ya que las medidas de fuerza empezaron el 1º de abril- debemos evaluar cómo seguir, porque al acercarse fin de año tendremos encima otros reclamos por los cuales luchar que están vinculados con los trabajadores tercerizados», decía.
En octubre del 2006 «se había llegado a un acuerdo para que los tercerizados pasen al convenio colectivo de trabajo de los telefónicos – continúa Facundo- y los trabajadores puedan afiliarse a FOETRA. Esta lucha es muy importante porque involucra a 6 mil trabajadores tercerizados que pasarían a trabajar bajo el convenio de los telefónicos. Entonces ganamos por dos motivos, uno, que se haría más fuerte al gremio ya que se sumarían 6 mil afiliados y dos que estaríamos rompiendo la lógica empresaria del trabajo precarizado. Los trabajadores pasarían a tener un trabajo estable».
Los trabajadores que prestan servicios para Telecom levantaron el paro tras haber conseguido a partir de julio la reducción de la jornada laboral a siete horas (que debió empezar a aplicarse en marzo según el acuerdo homologado en 2005) y un aumento del 16.5% a partir de julio. El aumento se llevaría a cabo con un 11% remunerativo desde el mes de julio y un 5,5% más que pasa a ser remunerativo en el mes de marzo.
La estrategia de las empresas frente a la huelga no fue novedosa, se dedicaron a partir la lucha, -ya que los trabajadores venían con un marco de unidad superior al de 1990 frente a las privatizaciones- es decir, a quebrar la unidad y divorciar a las bases del sindicato. Se dedicaron a partir la Asamblea General de Afiliados del viernes pasado y a separar las bases de la conducción del gremio. Por otro lado, Telecom hizo un ofrecimiento que superó el 8% que había ofrecido inicialmente.
Por corresponsal
Foto: Gentileza PO
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