Por denunciar prostíbulos, investigan a La Alameda
Al otro día de denunciar una red de prostíbulos donde trabajan menores y venden drogas, el centro comunitario La Alameda recibió una inspección en su sede. La medida fue ordenada por la directora General de Fiscalización y Control, Vanesa Berkowski. La funcionaria se justificó con NOTICIAS URBANAS. Gentileza Lucas Schaerer.
«Por haber presentado descargo el día 22/10/08 al señor ministro (refiriéndose a Federico Young, titular de la Agencia Gubernamental de Control) un listado de 27 lugares de prostitución y narcotráfico que está dependencia no inspecciona. Adjunto copias», firmó Néstor Escudero, representante de La Alameda, en disconformidad al «Acta de Intimación» ordenada por la Dirección General de Fiscalización y Control, que dirige Vanesa Berkowski, el día 23 de octubre.
El día anterior, la funcionaria había recibido junto a su jefe inmediato, Federico Young, un listado de 27 locales donde se explota sexualmente a mujeres, trabajan menores y se venden drogas, que están habilitados como «wiskerias» o «bares».
El miércoles 22, en la sede de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), estaban los funcionarios macristas Young y Berkowski, quienes recibieron a tres diputados nacionales y al referente de La Alameda, Gustavo Vera. Ellos fueron a presentar la documentación de sus denuncias, recavadas junto a vecinos y, además, a mostrar disposición para enfrentar la problemática que se propaga en Constitución y llegó al barrio de Monserrat a cuadras del Congreso Nacional y el Obelisco (como fuera denunciado ante la justicia federal y en la calle a fines de junio).
El titular de la AGC, se comprometió «en diez días tener novedades» frente a los diputados nacionales Fernanda Gil Lozano (CC), Silvina Storni (UCR) y Cynthia Hotton (PRO).
«A un día de vencer el plazo dado por el propio funcionario los locales de los barrios de Monserrat y Constitución, supuestamente habilitados como bares, donde en realidad funcionan prostíbulos encubiertos y centros de distribución minorista y en algunos casos mayoristas de estupefacientes, siguen abiertos», señaló Gustavo Vera quien hoy estará en una asamblea de vecinos de Constitución hablando de estos temas y preparando un tercer escrache a los prostíbulos en pleno centro de la Ciudad de Buenos Aires.
NOTICIAS URBANAS consultó a la diputada nacional Gil Lozano, quien participó del primer escrache a un prostíbulo, New Lisa de Flores, denunciado por la Defensoría del Pueblo de la Ciudad en abril y nuevamente reabierto.
«Nosotros junto con La Alameda teníamos intención de juntar voluntad política para investigar, pero al otro día la funcionaria Berkowski manda inspectores a la ONG que más compromiso ha tenido para erradicar la esclavitud en los talleres textiles como por la explotación sexual. Acá no hay inocencia. Esto es una caja negra y aparecen pseudo-bares donde se vende drogas, hay víctimas de trata y explotación sexual», dijo Gil Lozano.
La diputada por la Coalición Cívica agregó: «Young me dejó una buena impresión y reconoció que estaban en deuda. La que estuvo a la defensiva y que decía que no se podía hacer nada es Berkowski. De los 100 prostíbulos que inspeccionó es increíble porque no encontró ni una cucaracha. Puedo pensar en una complicidad política nuevamente. Porque fuimos a preguntar acerca de las habilitaciones y nos respondió la abogada que inspeccionaba ‘los matafuegos’ y no mucho más».
Fernanda Gil Lozano que estará presente en la asamblea de vecinos de este viernes, a partir de las 19, en Carlos Calvo 1409.
LA PALABRA DE BERKOWSKI
El llamado de NU sorprendió a la directora general de Fiscalización y Control, Vanesa Berkowski, quien ante la consulta sobre porqué inspeccionó a quienes denuncian y no a los denunciados.
«¿Qué tiene que ver una cosa con la otra?», atinó a responder y se justificó diciendo que los operativos están planificados de ante mano «bajo un sistema de programación computarizado». «Ningún director llama y dice inspecciones. Acá pudo justo haberse dado».
Sobre la cuestión inspectiva, la funcionaria explicó que «la tarea del inspector es verificar si el lugar está habilitado conforme la Dirección Habilitaciones y Servicios, y en las cuestiones de seguridad constructiva: matafuegos, exceso de capacidad, e higiene general».
«Los inspectores no tienen capacidades para identificar si es una casa de prostitución. Eso es una cuestión de la justicia», aseguró. Sin embargo, en otro tramo de la charla, la funcionaria relató que «sólo una vez y por la descripción de los inspectores» radicó una denuncia en la justicia correccional por un presunto local de explotación sexual en el barrio de Flores.
Respecto a la caducidad de la habilitación sostuvo que su función llega «hasta la clausura». «La Dirección General de Habilitaciones y Servicios, a cargo de Martín Farell, es responsable».
La historia pública de Berkowski
La primera resolución de Federico Young cuando asumió la Agencia Gubernamental de Control en enero de este año fue para designar a Vanesa Berkowski (figura en el boletín oficial 2848) en la DGFyC. Igualmente ella ya era parte del Gobierno de la Ciudad y lo demuestra el juicio por Cromañón.
Berkowski declaró en su momento ante la justicia en calidad de testigo que la ex funcionaria Ana María Fernández, directora general adjunta de Fiscalización y Control, intentó obtener documentación referente al funcionamiento de los boliches porteños cuatro días después de la tragedia. Ello ocurrió a fines del 2004 y principios de 2005.
Pese a integrar gestiones llamadas «progresista» ella no cuenta con militancia en esos andariveles. Todo lo contrario estuvo en elecciones internas del partido Recrear, en el 2006, junto al actual legislador PRO Enzo Pagani, y el año pasado había sido suplente del candidato al senado, el economista Carlos Melconián, a través de Alianza Propuesta Republicana.