La Bestia Invisible, una entrada a la introspección
En tiempos de políticas frívolas, de música sintética y de aplicaciones informáticas que nos simplifican la vida y el pensamiento, la introspección se hace necesaria. La Bestia Invisible nos viene a recordar este sano hábito. La infancia, una carta del abuelo, una lagartija, una pianola, entre otras cosas, son parte de las subjetividades que se desnudan con el objetivo de vencer a la bestia: nuestros propios miedos. Se presenta todos los sábados a las 22hs en El Brío-Espacio de Investigación Teatral, Av Alvarez Thomas 1582, CABA. Por Leandro Ramos, para ANRed.
Como escenario una sencilla mesa y algunas sillas. En el vacío, las luces y los cuerpos cobran importancia. La luz que irradia de los smartphones utilizados como antorchas de luz ilumina la memoria y la expresión. La mirada del espectador se va alternando en quien toma la palabra, pero todos están presentes, porque no hay escena, no hay representación, sino personas diciendo verdades, contándonos de ellas mismas y derramando lágrimas sinceras.
La Bestia Invisible ofrece un anecdotario que se despliega en la voz conmovedora de sus protagonistas. Está quien lee la carta de su antepasado francés en la guerra, la que descubre su identidad al afrontar una pequeña lagartija, quien llora al releer el libro donde habita su abuelo, el que nos relata con orgullo sus habilidades para hacer la vuelta de carnero en el colegio, entre otras historias que ejercitan la empatía.
En La Bestia Invisible las personas (nunca podríamos pensar en personajes) son actuales pero el contenido, el hilo conductor que entreteje cada anécdota, es el pasado. Porque únicamente en el pasado podemos encontrarnos, dado que el futuro es incierto y el presente es ilusorio. El pasado es el único tiempo real y genuino. Si queremos vernos a nosotros, si queremos encontrar nuestros miedos para vencerlos, debemos recordar nuestra historia.
Entonces la memoria. La bestia invisible es el miedo en cada uno de nosotros, un miedo que está siempre abrazado al pasado, que se esconde en nuestro silencio y que cuenta con el olvido como cómplice. Para vencer nuestros miedos, para entendernos a nosotros mismos, es necesario sacudirle el polvo a nuestro pasado y leerlo, gritarlo o llorarlo. De lo contrario está el olvido o, lo que es igual, la muerte. La Bestia Invisible nos recuerda que tener memoria, pensar y expresarse nunca dejaron de ser actos reveladores.
La Bestia Invisible se presenta todos los sábados 22 hs. en EL BRÃO – ESPACIO DE INVESTIGACIÓN TEATRAL (Av Alvarez Thomas 1582) Capital Federal – Buenos Aires – Argentina
Reservas: 45516213
Entrada: general $150 | Jubilados y estudiantes: $120.
Actúan: Emmanuelle Cardon, Florencia Halbide, Germán Leza, Paola Lusardi, Federico Manzioni, Loló Muñoz, Julián Ponce Campos, Nahuel Saa, Lucia Szlak, Marian Vieyra
Diseño gráfico: Lucia Szlak
Dirección: Nayla Pose