#8M En La Paz: «La desigualdad y el machismo nos llega a todas»
La Paz se sumó a la movilización en el marco del paro internacional de mujeres. Una mujer murió cada tres días en lo que va del año en Bolivia, víctimas de femicidios no tipificados como tales. «Mujeres en las calles, el gobierno es responsible”. Miguel Tognini para ANRed
Cientos de mujeres se plegaron la tarde del 8 de marzo en la plaza San Francisco de La Paz para hacer sentir su voz en el día internacional de la mujer trabajadora.
La marcha convocada por organizaciones feministas y políticas se planteó ser «independiente del estado y la oposición, partidos patronales, gobierno, iglesias y ongs».
Hasta esta fecha de 2017, veinte mujeres fueron víctimas de femicidio en Bolivia, país que no tiene tipificado delito como tal, por lo que las penas e investigaciones en estos casos no tienen un tratamiento especial.
Daniela de la agrupación Pan y Rosas (PyR) remarcó que «las mujeres ganan en promedio un 27% menos que los hombres, su situación es muy precaria porque se multiplican los casos de acoso y maltrato laboral».
Se hicieron presentes trabajadoras despedidas de «La Paz Limpia» (LPL), una empresa a tercerizada de mantenimiento y limpieza espacios públicos que en el último tiempo despidió a 80 trabajadoras y trabajadores. Esta empresa ligada a la alcaldía de esa ciudad, mantiene según denunciaron la falta de elementos básicos como duchas y elementos de trabajo, no pago de horas extras. «La empresa y la alcaldía no se preocupan por la salud de sus trabajadoras».
«Mujeres a las calles, el gobierno es responsable» fue una de las consignas cantadas por las decenas de mujeres que se encolumnaron desde la plaza San Francisco hasta llegar a la Universidad, encabezadas por las trabajadoras de LPL y ASOMUC (Asociación de Mujeres de la Construcción).
Esta Asociación surge en 2010 a través de Habitar una Ong que colaboró para nuclearlas. «No hay muchos países donde las mujeres se dediquen a la construcción como en Bolivia» nos relata Maria del Carmen de ASOMUC.
Aclara que no se sindicalizaron porque tienen críticas a las centrales obreras que muchas veces defienden más al empleador. «Hay avances aunque es un oficio muy machista. Queremos que se capaciten y vayan creciendo en el oficio. Somos mujeres constructoras pero somos iguales a todas. La desigualdad y el machismo nos llega a todas», finalizó.
Las mujeres en Bolivia son el 46% de la masa laboral pero perciben apenas el 32% de la masa total de ingresos de los asalariados (datos del CEDLA). A esto se suma que 88 de cada 100 mujeres tienen empleos precarios. Perciben -aunque hay diferencias entre las ramas de empleo- entre el 27 y 50% menos de salario que el hombre por igual labor.
«Es fundamental plantear un movimiento de mujeres masivo como en otros países como Argentina o Chile. Bolivia es uno de los países con mayor violencia de género de América Latina después de Haití» sintetizó Violeta de PyR.
Trabajadoras, estudiantes, profesionales y campesinas marcharon otro 8 de marzo y reafirmaron la consigna Ni Una Menos.
