Homenajearon a los caídos en la acción de Monte Chingolo
A 31 años del fallido intento de copamiento del batallón de Monte Chingolo, diferentes agrupaciones recordaron a los combatientes del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) que murieron en esa acción.
La cita era a las 15.30 en el frente de lo que había sido el Depósito de Arsenales domingo Viejobueno en Monte Chingolo. Poco a poco, el frente de lo que hoy es el Parque Industrial Tecnológico de Quilmes se fue poblando de banderas.
Así fueron llegando las distintas agrupaciones que adherían a la convocatoria del Partido Revolucionario de los Trabajares (PRT) Santucho. Entre las organizaciones que se hicieron presentes en la conmemoración estuvieron el FTC M-29, Quebracho, el Movimiento de los Trabajadores Santucho, las Organizaciones Libres del Pueblo (OLP), el Movimiento Independiente de Desocupados organizados (MIDO), la agrupación Martín Fierro y la CTD Aníbal Verón.
Las personas que llegaron hasta la intersección de Camino General Belgrano y Los Andes tuvieron como objetivo recordar a los militantes del ERP que cayeron hace 31 años en aquel lugar cuando intentaron asaltar el batallón para extraer armamentos, con los que podrían llevar a cabo diferentes acciones guerrilleras. Con ese aprovisionamiento, se pretendía armar a las compañías y conformar un batallón de monte en Tucumán. «Esto habría significado multiplicar por quince el poder de fuego de las fuerzas revolucionarias», aseguró Daniel De Santis.
De Santis, quien era militante del PRT y participó en una de las contenciones realizadas ese 23 de diciembre, sostuvo que con las críticas que se le efectúan al intento de asalto del Depósito de Arsenales 601 se entierra la «acción más heroica, más audaz, más decidida y más importante que llevaron adelante las fuerzas revolucionarias en los años 70».
«Por primera vez se planteaba en nuestra patria la posibilidad de una revolución hecha por los trabajadores y para los trabajadores», explicó De Santis el contexto en que se dio el intento de toma. «De haber resultado exitoso el copamiento de Monte Chingolo, eso habría repercutido directamente en el fortalecimiento de la conciencia del pueblo y reforzado la decisión de lucha que venía demostrando durante los años anteriores», afirmó. «Nosotros intentamos con el copamiento del cuartel – prosiguió- para retrasar la realización del golpe que finalmente se produjo el 24 de marzo de 1976».
Durante el acto no faltaron elogios para el heroísmo y la entrega de los hombres y mujeres que entraron al cuartel y que participaron en los operativos periféricos: «Doscientos hombres mal armados sólo pudieron ser vencidos por más de cuatro mil efectivos del ejército y de la policía muchas veces superior».
De Santis no dudó: «Solamente se puede entablar un combate de esta dimensión con la moral y el objetivo que se planteaba el Ejército Revolucionario del Pueblo: Transformar este país dominado por el capitalismo, por el imperialismo, en un país donde gobiernen los trabajadores, en una Argentina con una revolución socialista. Por eso lucharon los héroes y los mártires de Monte Chingolo».
En el discurso no faltó la referencia a la situación política actual: «Los trabajadores no podemos diluir nuestras fuerzas políticas en ningún movimiento o frente con tinte progresista. Los revolucionarios, los trabajadores, los socialistas debemos mantener a toda costa la independencia política y la independencia de clase. Ese será el mejor legado que les hacemos los combatientes de aquel momento a nuestros compañeros que cayeron en Monte Chingolo y es el mejor presente que le hacemos a la clase trabajadora que lucha hoy nuevamente por la liberación nacional y el socialismo».