Comenzó el juicio por Mariana Condori
Mariana era una joven de 20 años que vivía en el barrio de los Hornos en la ciudad de La Plata, tenía tres hijos, uno de ellos un bebe de tres meses, producto de su relación con Gabriel Maldonado, con el que convivió durante tres años. Durante esta relación sufrió todo tipo de violencias que ella misma denunció, pero que la omisión y la desprotección por parte del Estado hicieron que no se llegara a tiempo para salvar su vida. La semana pasada comenzó el proceso judicial, que culminó ayer con los alegatos de la abogada de la familia y de la defensa. Se prevé que el juez Tartarsky haga lectura de la sentencia el jueves o viernes. Por ANRed
El 14 de Marzo de 2012, Mariana Condori fue encontrada sin vida, en la casa en la que vivía junto a Gabriel Maldonado; según testigos, el lugar se encontraba todo desordenado, revuelto, la vivienda estaba destrozada. A partir de allí la familia empieza un camino largo y difícil en reclamo de justicia, con el acompañamiento de organizaciones feministas y antipatriarcales, que cada 14 de marzo se manifestaban en la fiscalía.
Luego de cuatro años de trabajo, los familiares junto al Ciaj (Colectivo de Investigación y Acción Jurídica), llegan al juicio con la intención de que Maldonado sea condenado. A esta instancia se llega solo por cuatro delitos que denunció Mariana, previos a su muerte.
El círculo de violencia
Maldonado durante los tres años que estuvo con Mariana ejerció todo tipo de violencias contra ella: física, psicológica, verbal y emocional. Pero ella logró salir de este círculo violento y el 6 de Marzo de 2012 se animó y logró denunciarlo. Sin embargo, los hechos de violencia siguieron y la respuesta del Estado no apareció.
Para peor, después de la muerte de Mariana llega una notificación del fiscal Marcelo Romero -quién había tomado la denuncia inicialmente- a la familia, en la que se ofrece una instancia de mediación con Maldonado. Algo que además está totalmente prohibido en los casos de violencia de género.
Es el mismo fiscal quien recibe la causa luego de la muerte de la joven e imputa a Maldonado por instigación al suicidio, separándolo de todas las violencias anteriores a las que sometió a Mariana. Omisión que sería subsanada por la jueza de garantías Marcela Garmendia quien siguió la causa en la etapa de investigación, y ordenó que se continuara investigando otros cuatro delitos, «calificados como lesiones leves y privación ilegítima de la libertad agravada por el uso de violencia y amenazas, lesiones graves, daño y amenazas calificadas por el uso de por el uso de arma de fuego”, cometidos dentro de un contexto de violencia.
El inicio del juicio
Tras cuatro años de pelea judicial la familia de Mariana Condori junto con el Ciaj ha logrado llevar a juicio algunos de los delitos denunciados por ella antes de su muerte. Entorno a esto no se deja de lado las responsabilidades de un Estado y de un Poder Judicial que omitieron y estuvieron ausentes frente a los delitos que denunció la joven.
En ese marco, el primer día de la audiencia se hizo una lectura del acta del relato que Mariana hiciera aquel 6 de Marzo en la comisaria; en el que hablaba de golpes, amenazas con arma de fuego, gritos, en un viaje infernal en moto desde su casa hacia la casa de su madre.
Luego prosiguió la exposición de los primeros testigos, los familiares de la joven. Primero hablo su madre, quien relató que entre febrero y marzo, tiempo en que la hija de Mariana estuvo internada, la joven llegó a su casa llorando y gritando con la mandíbula corrida, diciendo que regresaba del hospital y en su mano traía una placa. Otro hecho comentado, fue que por celos Maldonado, le quemó la ropa de Mariana y el cochecito de la hija, también le rompía todo el tiempo los celulares, por lo cual la joven cambiaba el número y en forma recurrente y a veces se quedaba incomunicada. Agregó también el último hecho antes de la muerte de Mariana, en el que ella conducía la moto y Maldonado venia de acompañante propinándole golpes, y al llegar a la puerta de la casa de su madre, la joven se tira de la moto, llorando y pidiendo ayuda.
Por su parte, el Ciaj, la familia y las organizaciones feministas y antipatriarcales seguirán insistiendo en que la muerte de Mariana no sucedió de manera desvinculada a los hechos anteriores por ella denunciados, sino que estos son parte de un contexto de violencia de género ejercido por Maldonado, y también por el Estado que estuvo ausente.