Voces del «Ni Una Menos»
Compartimos testimonios recogidos en el marco de la multitudinaria movilización de 50 mil personas del pasado viernes 3 desde el Congreso Nacional hasta Plaza de Mayo con diversos reclamos y exigencias sintetizados bajo la consigna «Ni Una Menos». La exigencia al estado de la declaración de emergencia nacional en materia de femicidios bajo las frases «Vivas Nos Queremos» y «Basta de violencia machista»; el reclamo por el establecimiento del aborto seguro, legal y gratuito y la aplicación efectiva del protocolo de aborto no punible; el repudio a los travesticidios, basta de lesbo-transfobia y el cumplimiento del cupo laboral trans en cargos en el estado; el desmantelamiento de las redes de trata con fines de prostitución; fueron sólo algunos de los reclamos y exigencias de un grito colectivo que, a un año del primer «Ni Una Menos», vino para quedarse. Imágenes: ANRed / Testimonios: Nicolás Richman, para ANRed.
«Ningún derecho nos lo regalaron»
Cecilia (Pan y Rosas, Consejera Directiva de la Facultad de Ciencias Sociales UBA)
«Esta movilización es importante sobre todo después del gran grito que dimos las mujeres el año pasado. Lo de hoy volvió a sorprender. Es importante que las mujeres volvamos a salir a las calles, porque ningún derecho nos lo regalaron y entonces que quede en la consciencia de las mujeres que sólo saliendo a las calles se puede conseguir nuestros reclamos, eso ya me parece un mensaje importante.
Desde el año pasado se instaló en la consciencia de las mujeres que para conseguir cualquier derecho hay que salir a las calles, es un cambio bastante importante para la construcción de un movimiento de mujeres. Las cifras y lo que expresa el cambio de gobierno desde el año pasado a este, son una muestra absolutamente tangible de que estamos en situaciones terribles, que los femicidios aumentan, que a las mujeres que llegan a los hospitales con un aborto espontáneo ni siquiera se molestan en comprobarlo, como hicieron con la joven tucumana Belén y prefieren encarcelarla antes que pensar en avanzar en los derechos de las mujeres como el del aborto. Que todos esos reclamos como ese hoy sean parte del documento de las convocantes me parece importante: ni una menos por abortos clandestinos, por violencia machista, en el medio de tanta crisis por los despidos también. El mensaje es estar en las calles para conseguir nuestros derechos.
El documento de las convocantes incluye la libertad para Belén, la libertad de todas las presas políticas, de las procesadas por luchar, reclama por el derecho al aborto y exija la aplicación de la ley de protección integral contra la violencia hacia las mujeres, lo que por lo menos sería un cúmulo de medidas paliativas que no resuelven el problema de la violencia pero que sin duda sería un paliativo para cientos de miles de mujeres que están situación de violencia.
Pan y Rosas es la organización de mujeres que impulsamos militantes del PTS con compañeras que no son del partido, pero con las que tenemos el acuerdo de llevar adelante esta organización y pelear en Argentina por la construcción de un movimiento de mujeres. Y no sólo acá: hoy tengo el orgullo de estar marchando con la remera de las compañeras de Pan y Rosas de México. Así que en toda Latinoamérica hay una lucha internacionalista de las mujeres por conseguir sus derechos».
«Nos parece fundamental esta movilización y ligar el grito del #NiUnaMenos con la responsabilidad del Estado en todos los aspectos»
Juliana (Polo Obrero de Capital)
«Nosotras hoy venimos a movilizarnos junto al plenario de trabajadoras, después de un año de que se haya realizado la movilización tan importante del #NiUnaMenos, donde vemos que el gobierno hoy no ha dado respuestas frente a los reclamos de la mujer trabajadora. Sigue habiendo precarización laboral, sigue habiendo femicidios, sigue habiendo violaciones, sigue habiendo muertas y detenidas por abortos clandestinos, por lo cual nos parece fundamental esta movilización y ligar el grito del #NiUnaMenos con la responsabilidad del Estado en todos los aspectos.
De un año a otro, la precarización laboral se ha profundizado, la violencia contra las mujeres sigue siendo uno de los factores más importantes de muerte, entonces esto va directamente vinculado con las políticas de ajuste que están desarrollando Macri y los gobernadores con compañeras que tienen que pasar cada vez más hambre, con trabajos que cada vez se realizan en condiciones más adversas, más terribles, más paupérrimas. La lucha que hoy tenemos las trabajadoras sigue siendo la misma que el año pasado y nos obliga en un cuadro de mayor hambre, mayor desocupación, nos obliga a salir a organizarnos para quebrar esta política contra las mujeres.
Lo principal es la organización entre las propias compañeras, tener herramientas en todos los barrios, en todos los lugares del trabajo para organizarnos frente a cualquier hecho de violencia, cualquier adversidad, a la que se nos someta. Y en este sentido hacer denuncias y hacer responsable al Estado del desamparo que tenemos las mujeres, del abandono que tenemos y la complicidad absoluta de los gobiernos, de la policía, de la Justicia, de dejar impunes los casos de maltrato, los casos de abuso que sufren las mujeres día a día en el conjunto del país.
Es muy importante esta movilización, la cantidad de concurrentes implica que el grito de #NiUnaMenos sigue completamente vigente y la única manera en que vamos a poder quebrar toda esta política de violencia contra la mujer s cada vez siendo más organizadas y movilizadas en todo el país».
«El hombre es muy machista y a vos te cuentan que en todas las fábricas son todas manejadas por hombres»
Julia (Comisión de Mujeres de Ecotrans)
Todas las mujeres, con todas las muertes, femicidios y toda la violencia de género que estamos viviendo, me parece importantísimo que salgamos a la calle a pedir lo que nos corresponde y que el Estado se haga cargo de las cosas que no está haciendo, de todas las mujeres que están sufriendo violencia. Tomamos consciencia de eso y nos juntamos para venir.
Desde el año pasado, la mujer se levantó. La mujer hoy se levantó con más fuerza y se hace respetar, se hace escuchar. No todas las mujeres pueden o han tomado consciencia todavía. El hombre es muy machista y a vos te cuentan que en todas las fábricas son todas manejadas por hombres. Si las mujeres nos unimos, vamos a lograrlo.
El Estado tienen que tomar consciencia de los derechos, que la mujer tiene derechos, que no es una cosa. Si el Estado no toma consciencia, entonces nosotros las mujeres tenemos que hacerle ver donde está errado. Estoy contenta por estar acá. Personalmente soy víctima de violencia de género, tenía que estar«.
«No somos una estadística, no somos moda, no nos queremos ni despedidas, ni encarceladas, ni muertas»
Yanina (responsable de Género de ATE Provincia de Buenos Aires
«Es una jornada multitudinaria, hay compañeros y compañeras. Es bueno que todos salgamos como pueblo entendiendo la situación que estamos viviendo las mujeres con respecto a los femicidios y la cuestión de género. Entendíamos desde la organización que teníamos que estar presente, así lo debatimos y lo consideramos, por eso estamos movilizando desde el Congreso hacia Plaza de Mayo.
Creo que la situación de la mujer desde 2015 se agudiza porque hay estadísticas que así lo demuestran, se han multiplicado las denuncias. Lo que también vemos y sabemos es que no se han tomado cartas en el asunto desde el estado provincial y nacional desde el punto de hacerse cargo e intentar aunque sea tener un gesto de llevar adelante la ley 26.485, dado que no está presupuestada y lógicamente no está aplicada y no se han dado una política concreta, clara y precisa para poder erradicar estas situaciones que vivimos las mujeres.
Nosotras venimos llevando adelante talleres de concientización, de prevención, para que cada una de las mujeres entienda y comprenda que las situaciones de violencia que una vive no es que se las merece, no es que por ser mujer debemos callar, morir o estar encarceladas o despedidas. Tratamos de conversar con los compañeras, las empoderamos, les damos herramientas no sólo jurídicas, sino también emocionales, personales, donde podemos tener reuniones de mujeres, podemos trasmitirnos las vivencias y a partir de eso podemos experimentar con otras compañeras el real empoderamiento que debemos tener las mujeres para poder salir y creernos capaces y con la fuerza suficiente para poder salir de estas situaciones. Lógicamente trasmitiéndole a la compañera la responsabilidad que tenemos nosotras como mujeres pero también responsabilizando al Estado por no aplicar políticas públicas concretas y claras y presupuestadas para poder erradicar la violencia.
Otras medidas que pueden ayudar a la mujer hoy en día sería llegar a concretar estos espacios de mujeres con compañeros que puedan participar para poder compartir estas experiencias y que ellos puedan entender porque esta mitificado que las mujeres vamos contra los hombres, o vamos por ellos, y no es así. Así que el desafío, por lo menos de la organización a la que pertenezco, es poder estar reunido, con compañeras y compañeros, para poder debatir, para poder llegar a un consenso y poder marchar juntos al lado uno del otro y no ir delante ni detrás.
En los talleres de algunas seccionales participan hombres y en otros no. Esto obviamente es una deconstrucción cultural la que tenemos que hacer y construir de nuevo, desde otra perspectiva. Pero se está avanzando.
Estoy muy emocionada con ver tanto pueblo en la calle por una sola consigna que es «#NiUnaMenos” y que la sociedad en su conjunto entienda que no somos una estadística, que no somos moda, que no nos queremos ni despedidas, ni encarceladas, ni muertas, así que a seguir luchando para que esta violencia, que nos está atravesando a todos como sociedad, pero principalmente se está llevando la vida de muchas mujeres, se erradique y se termine».
«En Argentina es gratis matar a las mujeres»
Manuela Castañeira, de Las Rojas
«La jornada de hoy es importante. En primer lugar porque ya en 2015 hicimos algo histórico, que es visibilizar este reclamo tan sentido del movimiento de mujeres que es «Basta de Femicidios, #NiUnaMenos». Logramos que la sociedad entera nos rodee de cariño, que entienda nuestro problema, que nos acompañe. Ahora bien, paso un año, hoy salimos a la calle. Ya no es sólo una concentración en Congreso, es una manifestación a Plaza de Mayo porque vemos que se suceden los gobiernos pero a las mujeres nos dan la espalda. Han sucedido 286 femicidios entre el #NiUnaMenos anterior y este #NiUnaMenos. Quiere decir que el Estado nos da la espalda, que no hay presupuesto, que no hay políticas para generar trabajo genuino para las mujeres y por ese motivo vamos a la Plaza.
Creo que en un año lo que mejoró fue la consciencia política y social. Eso es un punto de apoyo, hay mucha legitimidad para el reclamo, hay muchas denuncias más porque las mujeres sienten más fuerza para salir. El problema es que el gobierno anterior y ahora este principalmente, que es un gobierno mucho más reaccionario, nos da la espalda. Desde ese punto de vista, no hay ningún avance, al contrario. En lo que va del gobierno macrista se han cerrado los pocos programas de erradicación de violencia que existían y en ese momento en Argentina el 0,0055% se dedica hacia las mujeres. Son 4,50 pesos por mujer. Ni un paquete de chicles. Con eso no vamos a resolver la situación de femicidios y eso sí es una situación que empeoró.
Para mejorar la situación de las mujeres, en primer lugar, tienen que asignar el presupuesto para la erradicación de violencia, la construcción de refugios, la creación de programas para generar trabajo genuino para las mujeres, planes de subsidios para las mujeres y los niños que se quedan huérfanos por los femicidas, y también para las mujeres que se quedan sin trabajo. Al mismo tiempo creemos que hay que cambiar el sistema judicial porque hay impunidad. En Argentina es gratis matar a las mujeres. Y una medida también muy importante que se incorpora en esta movilización es la legalización del aborto. El aborto libre, legal, seguro y gratuito. Mueren 800 mujeres al año por la clandestinidad del aborto. Eso nos deja como ciudadanas de segunda, porque las mujeres en Argentina no decidimos sobre nuestro cuerpo, nos deja mucho más vulnerables y expuestas a la violencia. Eso se tiene que cambiar, mucho más ahora que hay criminalización. El #NiUnaMenos se ha pronunciado por justicia y pedido de excarcelación y libertad para Belén, que es la joven tucumana presa por tener un aborto espontáneo y le dieron 8 años por homicidio.
Creo que es muy importante mantenerse movilizados en la calle, hay muchísimas propuestas y reclamos para poder intervenir ya en este problema. Sabemos que el patriarcado, que el machismo, tiene que ver con la desigualdad social en general, con este sistema capitalista, pero hay muchas cosas que se pueden hacer ahora para que dejen de morir mujeres. Por eso nos mantenemos en las calles movilizadas porque vemos que el Congreso es un pantano y que el macrismo es realmente un gobierno reaccionario».
«Era muy comprometida con todo, era única. Era una militante»
Siria y María Eugenia (familiares de Emilia Uscamayta)
«Venimos para que la causa avance un poco más y para que acá en Capital se conozca un poco más el caso de mi hermana Emilia. Ella estaba estudiando en la facultad de Periodismo y Comunicación Social de La Plata. Se recibía este año. Le faltaban cuatro materias solamente para recibirse y el 1 de enero de ese año. Ella fallece en una fiesta supuestamente clandestina. A los empresarios obviamente sólo les interesa la plata, menosprecian la vida humana. La fiesta se realizó en la zona Melchor Romero de La Plata. Mi hermana fallece a las 10 de la mañana por ahogamiento. Ella llega a la fiesta a las 8.30 de la mañana. Hubo un abandono completo de persona, porque la dejan tirada sobre la avenida 520 estando el hospital a 10 cuadras de ahí. No hay nadie detenido. La Justicia fue totalmente inoperante porque declaró hace poquito uno de los delegados de Romero, de apellido Zamudio, el cual implicó al fiscal Garganta, al intendente Garro, a muchos funcionarios políticos vinculados al negocio de la noche. El declara que no pueden hacer nada cuando van a hacer la denuncia porque están todos arreglados, porque habían pagado una coima de 20 mil pesos para que la fiesta siga en marcha.
La respuesta de los medios de comunicación fue muy escasa. Los primeros días salió por todos lados al ser la primera muerte de 2016. Hasta el día de hoy hay muy poco avance en la causa y eso nos indigna mucho. El 1 de junio hubo una marcha en La Plata, donde hubo bastante gente para que el fiscal cambie la carátula, así los pueden condenar. Porque los cuatro imputados no están condenados, no hay nada, pagaron una fianza y están libres.
La página de Facebook es Justicia Por Emilia Uscamayta y el mail es justiciaporemilia@gmail.com, y es para algunos que quieran declarar o algunos testigos que estuvieron en la fiesta, para que den su declaración, que va ser totalmente privada.
La jornada de hoy nos parece buenísima, llena de gente, ojalá que todos tomemos consciencia, que hagamos valer la vida humana. Son personas, no sólo a mi hermana le pasó, pasó con mucha gente, con muchas chicas. Por ser mujer a veces te menosprecian. Lo que pasó en la fiesta no sabemos. Esto que está pasando acá es demasiado fuerte, demasiada gente. Me encanta, ojalá nos puedan escuchar los funcionarios.
Ella militaba con los pueblos originarios, estaba muy comprometida con las causas que encaraba. A ella le hubiera encantado venir para acá, porque a ella le gustaban estas cosas. Muy comprometida con todo, era única. Era una militante».
«Estamos haciendo esta marcha para pedir castigo, que castiguen a los asesinos que matan en los barrios a las chicas»
Agustina, Nilda y Karim (Red de Promotoras Territoriales de Género)
Nilda: «Somos una organización que protege a las mujeres que sufren violencia. Estamos haciendo un curso de promotoras de eso para ayudar a las mujeres que sufren violencia. Está yendo mucha gente. Es en el Galpón de la Villa 31. De vez en cuando salimos a volantear e invitamos a otra víctimas para compartir con nosotros.
Me parece buenísimo la convocatoria y ojalá que sirva para atraer a otras mujeres para poder combatir esta violencia. Los talleres los estamos haciendo con ATAJO y la Defensoría del Pueblo. Ellos están trabajando con nosotras. Trabajamos territorialmente, acompañamos. Hacemos ese trabajo voluntariamente porque como mujeres que sufrimos también violencia de género, entendemos a las mujeres que nos necesitan. Estamos haciendo esto porque nos gusta y porque lo sentimos.
Creo que faltan muchas herramientas para ayudar a esas personas, porque tenemos las herramientas que no da el Estado, como el ATAJO, pero nos haría falta ayudarles también económicamente, tener un lugar donde se les pueda brindar seguridad y donde puedan emprender una confianza y puedan alejarse de la violencia de género. Porque muchas veces conseguimos que se acerque, que hagan la denuncia, pero vuelven con su marido porque dicen que no tiene trabajo, no tienen como alimentar a sus hijos. Esa parte nos está haciendo falta. Nosotros tenemos mucha voluntad, pero ojalá alguien nos escuche y se acerque para que nosotras podamos ayudar de ese lado. Estábamos pensando en organizar una guardería, pero tiene que aparecer alguien que nos quiera ayudar a organizarlo y emprender ese proyecto. Creo que con eso también vamos ayudar mucho a las mamás. Con apoyarla y acompañarla en la mayoría de los casos no sirve, porque vuelven a caer en lo mismo. Hay mucha violencia de menores también. También estamos haciendo un taller de cómo manejar la violencia de menores. Nos estamos capacitando bien, estamos contentas».
Karim: «Desde el año pasado la situación empeoró un poco por la falta de trabajo y un deterioro en la situación económica. Eso no nos va impedir a nosotros que podamos ayudar, que podamos seguir estando con las víctimas, las vecinas, las amigas y los familiares que sufren esta violencia. Nos estamos capacitando y tenemos herramientas para poder contener. Para poder estar en todo momento, porque el Estado está a ciertas horas, trabaja hasta ciertos horarios. Nosotras como vecinas estamos todo el tiempo y hacemos un seguimiento de todas las víctimas, no es que sólo las ayudamos. Siempre cuidando tanto la integridad física de las promotoras como de las víctimas. El taller nos capacita a nosotras para enfrentar cada situación en particular. Hay algunos casos muy complejos».
Agustina: «Yo también estoy con La Garganta Poderosa. Ellos son militantes de la Villa 31, también ayudan a los chicos, tienen un local donde enseñan computación. Tenemos una cooperativa. Ellos tienen muchos proyectos de contener a los chicos, en vez de dejar que estén en la calle para que no anden en la droga o el alcohol. Tienen grupo de chicos que juegan a la pelota y otros que hacen otros deportes. Es un grupo grande.
Esta es una exposición de fotos, hay diferentes casos de violencia de género. Ella es (señala un cartel) Judith Giménez, una chica que mató el gendarme Federico Sandoval, que estaba de centinela en la Villa 31. Ahora el 24 de junio va a ser 8 años y al asesino le dieron una condena de 8 años nada más y nosotros pedíamos perpetua. El asesino ya está libre otra vez. Judith estaba en mi casa como una hija, le apreciaba y le cuidaba a la hija. Y cuando pasó esto no sabía cómo reaccionar. Muy triste, muy doloroso, siempre tengo en el corazón a la gorda.
Ahora estamos haciendo esta marcha para pedir castigo, que castiguen a los asesinos que matan en los barrios a las chicas. Ellos tienen que pensar en su mama. La chica a veces no tiene la misma fuerza que un varón, no va a poder enfrentar a los hombres. Por eso vine para pedir justicia y más seguridad».
«Casi un 20% del total de femicidios son cometidos por policías, gendarmes, prefectos o servicios penitenciarios»
María del Carmen Verdú, de la Coordinadora Contra la Represión Policial e Institucional (CORREPI)
«Hoy CORREPI macha para decir «#NiUnaMenos, ni un policía más”. Cuando vos cruzás los datos duros de la represión policial con los de la violencia sexista y patriarcal, te encontrás con que el porcentaje más elevado de femicidios en relación a la ocupación u oficio del autor, es la de las fuerzas de seguridad, casi un 20% del total de femicidios son cometidos por policías, gendarmes, prefectos, servicios penitenciarios, etc.
Por otro lado, si analizás los datos contenidos en los archivos de casos CORREPI respecto de mujeres asesinadas por las fuerzas de seguridad del aparato represivo estatal, excluyendo los casos de muertes en lugares de detención que responden a otra lógica, tenemos que más de la mitad corresponden a casos de femicidio, de violencia intrafamiliar. Lo mismo sucede en el caso de los niños y niñas de menos de 12 años, que casi en su totalidad son víctimas de femicidios relacionados.
Entonces, evidentemente CORREPI tiene algo que decir en materia de violencia sexista y patriarcal, y por eso estamos acá. Además, hay muchas otras situaciones que es difícil clasificar, son femicidios relacionados de varones, caso como el de Hernán Ibiris o como el de un caso reciente en el que condenamos a un prefecto a prisión perpetua por matar a un muchacho y herir a su hermano porque defendían a un mujer a la que el prefecto estaba maltratando a golpe limpio en la puerta del Bingo de Avellaneda. Ante su intervención, diciéndole «para, loco, no le pegues, es una mujer”, el hombre sacó el arma, mató a uno e hirió a otro. Éstas situaciones nos atraviesan cotidianamente, porque tanto la violencia patriarcal como la represión policial son transversales en toda la clase trabajadora.
La situación en la mujer sigue siendo exactamente la misma y en el caso de la mujer trabajadora peor, porque tiene un tarifazo encima, porque quizás la despidieron, porque hay mucha más represión policial en los barrios, porque vivimos en una etapa en la cual el ajuste y la represión nos está indudablemente golpeando a todos. Lo que sí es sumamente positivo, entre el año pasado y este, es que en lugar de ser un simple hecho mediático, la promoción de la movilización ha sido trabajada a consciencia por un conjunto de organizaciones no solamente feministas. Hay una presencia muy grande en esta marcha de organizaciones que representan el feminismo revolucionario, que no es lo mismo que el feminismo a secas y también es sumamente importante que se haya tomado la decisión, desde la organización de la marcha, de salir de Congreso y venir a Plaza de Mayo, que es el centro del poder político nacional, del estado nacional.
Hay que distinguir dos niveles de reivindicaciones, de reclamos y de planteos. Por un lado, lo que es realmente el nivel reivindicativo básico, donde estamos tan atrasados en la materia que hay infinidad de cuestiones que pueden ser resueltas por cualquier gobierno burgués. Por ejemplo, que cuando una mujer sufre violencia en su casa o de parte de un hombre, no tenga que recurrir a una comisaría donde va a ser nuevamente victimizada, esta vez por el aparato represivo estatal, aunque sean mujeres, porque la lógica interna de las fuerzas de seguridad es la misma, sea cual fuere el género de quien la ejecuta en el momento. Habilitar más fiscalías o más centros donde se provea asistencia técnica, jurídica, psicológica, etc., a las mujeres en situación de violencia es algo que se podría hacer y sin embargo no se hace porque no forma de las agendas de los gobiernos. Por el otro lado, está la cuestión de fondo de la igualdad de todos y todas en una sociedad que se organice bajo criterios diferentes. Eso no lo vamos a poder lograr mientras vivamos en una sociedad con ricos y pobres, con opresores y oprimidos, con explotadores y explotados. Pero justamente, la organización para poder llegar a avanzar en ese camino también tiene que tomar las reivindicaciones concretas. Semejante a lo que sucede con la represión policial, por ejemplo, cuando nosotros decimos que no vamos a resolver ni a terminar con el gatillo fácil porque logremos llevar a un policía represor y lo condenemos, aunque sin embargo ese pequeño triunfo es un paso más hacia la sociedad sin clases.
CORREPI es profundamente feminista, aunque no forme parte del universo de organizaciones feministas, ni nos definamos como una organización de género. De hecho, la CORREPI es femenina desde su propia denominación. La enorme mayoría de nuestro militantes son compañeras mujeres, por nacimiento o por elección posterior. Y sobre todo hay un ámbito en el cuál hay una preeminencia absoluta de o femenino, que es el universo de los familiares.
En general, como sucedió en su momento con las madres, con las abuelas, quienes toman la posta para dedicar una parte importante de sus vidas a organizare antes, durante y después del juicio al policía que asesinó a sus hijos, es la madre, la hermana, la tía, la abuela. Si bien hay muchos compañeros varones también militando con nosotros que son padres y hermanos, en cada reunión de familiares uno ve que las compañeras son la enorme la mayoría y además son las que llevan la voz cantante».