Multitudinarias marchas se realizaron en repudio a la detención de los 11 comuneros de Vilcún y la criminalización del pueblo mapuche
Este miércoles 6 de abril un centenar de personas mapuches y no mapuches se juntaron esta mañana en el frontis de la intendencia de Temuco para solidarizar con las comunidades de vilcún y sus 11 comuneros Recluidos en la Cárcel de Temuco acusados del incendio de la casa de la Familia Luchinger Mackay ocurrido el 4 de Enero de 2013. Por País Mapuche
Posteriormente realizaron una marcha por el centro de la cuidad con dirección a las diferentes cárceles donde se encuentran los comuneros.
La vocera de la presos políticos mapuche comunico que la Machi Francisca Linconao se encuentra en mal estado de salud por no encontrarse en su espacio espiritual. También manifestó que al interior de las cárceles existe gran cantidad de negligencia por parte de gendarmería a la hora de las visitas, entre otras cosas.
Además que los comuneros se encuentran en módulos con los presos comunes vulnerando su calidad de presos políticos.
La tarde de este miércoles, organizaciones solidarias con comunidades mapuche en procesos de recuperación territorial y estudiantes mapuche de los distintos hogares de Concepción, realizaron una protesta en el centro penquista rechazando los continuos montajes creados por la Fiscalía de Chile en contra de comuneros y chilenos solidarios con su lucha.
Las comunidades denuncian que la criminalización es la herramienta con la cual el Estado busca negar las razones de sus acciones, obedeciendo a los intereses de empresarios que explotan y usufructúan el territorio reclamado como propio e imprescindible para su vida.
Recientemente, fueron detenidos once mapuches, entre los cuales hay una Machi. A todos se les atribuye la quema de la casa donde pereció el matrimonio de latifundistas Luchsinger-Mackay. El único antecedente que hasta ahora ha dicho tener la Fiscalía es una declaración de otro comunero, quien la ha negado.
La insuficiencia de las pruebas o, claramente, las mentiras utilizadas como tales no sólo son propias de este caso, sino que ha sido lo habitual. Reiteradamente, luego de largos años de prisión y gravosas huelgas de hambre, los tribunales han absuelto a quienes fueron acusados, reconociendo la inexistencia de pruebas que respalden condena alguna.
En Concepción, en tanto los manifestantes pisaron la calle O»™higgins, fueron reprimidos por carabineros de fuerzas especiales, no obstante éstos defendieron su derecho a protestar, manifestando en diversos puntos de la ciudad su repudio a la injusticia y al Estado servil a quienes explotan y, con ello, destruyen un territorio donde un pueblo pretende vivir. Los transeúntes también se pronunciaron en contra del accionar policial, reclamando por la toxicidad de los gases lacrimógenos lanzados.