«A Darío lo extraño por él mismo, por mi viejo y también por mi»

Hoy el militante Darío Santillán, que fue asesinado por la policía el 26 de junio de 2002 en el marco de una represión, hubiera cumplido 35 años. Compartimos las palabras de su hermano, Leo Santillán: «Recuerdo las palabras textuales, después de todo el análisis expuesto, en donde nos dice: ‘Hay que empezar a cuidarse, mañana van a empezar a matar compañeros’. Nadie de los presentes tomamos con seriedad esas palabras… Esa actitud que tuvo Darío para con Maxi fue la mas elevada de su corta pero intensa vida, pero no fue la única. Era como lo que transcribía en su cuaderno de apuntes: ‘Sentir en lo más hondo cualquier injusticia’.»

Una de las cosas que tomo relevancia, después del asesinato de Darío, fue cuando vine al barrio a vivir con él, allá por abril o mayo del 2002.

Me había alertado sobre un cumpa (justo en esos días estaban pagando el plan) que seguro me iba pedir prestado plata, con algún chamuyo, pero que no le pase porque era para delirársela. Dicho y hecho: esa misma tarde volvía del banco y me cruzo al compañero, y me pide prestado plata para los «pañales». Le terminé dando.

Cuando a la noche nos vemos con Dario, estaba buscando la manera de comentarle lo del préstamo, lo cual no era nada fácil, ya que una de las cosas que generaba, era un respeto mas allá del normal. Pero como juntábamos lo que cada uno cobraba para los gastos tenía que decirle. Cuando por fin encuentro el hueco, entre una birra y mirando los Simpsons, le cuento. Tuvo la reacción esperada, se encabrono, me «cago a pedos»: que era un boludo, que ¿para qué se la preste? que se la iba a escabiar…

A los 3 días saliendo de la bloquera, Darío me dice para ir a lo de este compañero, que andaba enfermo. Pasamos por la casa, y se queda charlando para ver cómo estaba y si necesitaba algo. Recuerdo no entender en ese momento esa actitud solidaria, despues de la situación del chamuyo. Me quede con esa duda por esos meses…

Solo después del 26 de junio pude entender en la totalidad esa actitud y tantas otra que tenia él, y que tenía que ver con saber de las miserias que tenemos, pero también de los valores que poseemos como personas.

Creo que en el mismo plano me pasó con la actitud que tuvo para con Maxi, la de no conocerlo y quedarse en una situación de tanto riesgo, de exponer su vida, pero la cual no desconocía, ya que la noche del 25 de junio una de las preocupaciones de Darío era mejorar la seguridad.

En esa reunión él plantea y hace un análisis de la escalada de violencia que veniamos sufriendo desde la asuncion de Duhalde,y que aparte del asesinato de Javier Barrionuevo, en febrero, y de una balacera en otra movilizacion enfrente del municipio de Lanús, en la cual hieren de un balazo en un pulmón al compañero Juan Arredondo, veníamos padeciendo otros aprietes en los diferentes piquetes que tuvimos después de las jornadas del 19 y 20 de Diciembre… Recuerdo las palabras textuales, después de todo el análisis expuesto, en donde nos dice: HAY QUE EMPEZAR A CUIDARSE, MAÑANA VAN A EMPEZAR A MATAR COMPAÑEROS. Nadie de los presentes tomamos con seriedad esas palabras…

Creo que esa actitud que tuvo Darío para con Maxi fue la mas elevada de su corta pero intensa vida, pero no fue la única. Era como lo que transcribía en su cuaderno de apuntes: «SENTIR EN LO MAS HONDO CUALQUIER INJUSTICIA…»

Sólo después del 26 de junio uno puede armar la figura de Darío y todas esas enseñanzas que nos dejó, esa humanidad, esa creencia en que el ser humano puede ser diferente, esa fe en el «HOMBRE NUEVO»…

21 AÑOS TENIA DARIO CUANDO LO FUSILARON POR LA ESPALDA INTENTANDO SOCORRER A MAXI, después que nos alertó para que nos vayamos todos, que él se iba a quedar a cuidarlo, aun sin conocerlo. TAN SOLO 21 AÑOS TENIA DARíO…

Me acuerdo lo bien que me hacía cuando me cuidaba, qué bien que uno se sentía amado por una persona así.

Me acuerdo, COMO YO CREIA EN MI MISMO, CUANDO EL HABLABA DE MI, cuando hablaba de la REVOLUCIÓN, DEL FUTURO, DE LOS CHICOS QUE JUGABAN A SER PIQUETEROS…

A DARIO LO EXTRAÑO POR EL MISMO,
POR MI VIEJO,
PERO TAMBIEN POR MI…

FELIZ CUMPLEAÑOS HERMANO…

Por Leo Santillán