El HSBC ya no es una traba para la Cooperativa Gráfica Vulcano
El jueves 24 de septiembre los cooperativistas de la gráfica del barrio porteño de Boedo, firmaron con el HSBC la compra de una máquina fundamental para la continuidad laboral que vienen defendiendo sus trabajadores luego de la quiebra presentada por Vulcano S.A. en los últimos días del año pasado. Por Florencia Vissani para ANRed / fotos: Ariel Martinez Kunrath Ph
La negativa a la negociación sostenida a principios de año por el banco HSBC puso en peligro la continuidad de la fuente laboral sustento de 16 familias. Luego de la movilización realizada el 24 de junio a la sede bancaria de la calle Florida de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, los asociados de la Cooperativa Vulcano fueron recibidos por los directivos de la entidad. Allí se logró mediante la intervención del síndico la autorización al juzgado para entrar al edificio de Virrey Liniers al 1400 y hacer una evaluación de la máquina que consideraban indispensable para seguir trabajando. Fue tasada y el HSBC se comprometió a darles prioridad en la compra tras la oferta económica hecha por los trabajadores.
Para preservar las fuentes laborales, los trabajadores están negociando con Garantizar SGR la hipoteca que cae sobre el galpón y así mantener el inmueble. Su principal problema era que el HSBC se negaba a venderles una impresora alemana que los empresarios Fernando Blanco y Lorenzo Berriex adquirieron a través de un contrato leasing con la entidad financiera, pero desde el año 2012 no pagaron más la cuota. La negativa de la entidad bancaria daba a sospechar que los ex dueños estuvieron operando para que ello sucediera. Finalmente, depusieron su actitud y se sentaron a negociar por intermedio del abogado Gustavo Torassa (socio del estudio Bulló-Tassi-Estebenet-Lipera-Torassa), quien buscó llegar a un acuerdo con los trabajadores y su defensor, el Dr. Pablo Godoy.
La lucha de los trabajadores de la gráfica de Boedo comenzó en 2011, cuando de 60 empleados pasaron a ser 20 y los pagos de los salarios comenzaron a retrasarse. El 24 de diciembre del 2014 los dueños, Blanco y Berriex, realizan un lockout patronal y ejecutan el vaciamiento de la firma llevándose maquinarias e insumos. El 6 de marzo de 2015 se produce la quiebra de Vulcano S.A., a lo que los trabajadores responden con guardias permanentes en la puerta del establecimiento para evitar que se lleven los pocos activos valiosos que quedaban en el local.
Hoy el HSBC ya no es un escollo para seguir produciendo, mediante un subsidio y un crédito brindado por el Ministerio de Trabajo y el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), los trabajadores organizados bajo la Cooperativa de Trabajo Gráfica Vulcano -presidida por Daniel López- han comprado al HSBC «el corazón» de la planta. Tras cumplir con todos los requisitos legales que establece el Artículo 190 de la ley de Concursos y Quiebras, esperan el último paso. Sera el juzgado civil y comercial N° 19, a cargo del juez Gerardo Santicchia, quien resuelva si da o no la continuidad productiva a favor de los trabajadores que recuperaron la gráfica y de esta manera sostener el ingreso que afecta a 16 familias.