Recurso de amparo por los inundados de Pilar
El colectivo de abogados populares La Ciega presentó ayer, 28 de agosto, por la mañana una acción de amparo colectivo contra la Provincia de Buenos Aires y la Municipalidad de Pilar para que garanticen el acceso a la vivienda digna de las 365 familias auto evacuadas del Barrio «Las Lomitas”. Por ANRed.
La medida fue presentada en el Juzgado de Garantías N° 6 del Departamento Judicial de San Isidro, a cargo de Nicolás Ceballos. Además del pedido al estado por el acceso a la vivienda digna también el amparo pide que mientras se resuelve el conflicto se «destine de manera urgente el inmueble ubicado en el «Barrio Nuevo”, Municipalidad de Pilar, Provincia de Buenos Aires, para uso y vivienda de las familias afectadas».
Barrio privado. De derechos
Según se pudo indagar en los hechos, a través del amparo presentado por «La Ciega”, las familias afectadas vivían en el barrio «Las Lomitas”. Ubicado en la localidad de Pilar y delimitado por las calles Santa María, Agustoni y Santa Agueda ese barrio se conformó aproximadamente hace diez años cuando el municipio permitió a las familias que no tenían lugar donde vivir asentarse allí. Según el censo practicado por las personas afectadas, se trata de 365 familias, con un total de 1251 integrantes, de los cuales 564 son niños y niñas.
En el amparo se puede leer que desde el año 2007 este terreno comenzó a sufrir inundaciones cada vez que se producían lluvias significativas.
Según los abogados «No fue sino hasta que comenzaron a construirse barrios privados en los terrenos cercanos y lindantes, que las inundaciones comenzaron a empeorar haciéndose más graves y a repetirse de forma cada vez más seguida”. En relación a esto, la medida judicial expone que: «Por ejemplo, el complejo San Sebastián, que consta de 1110 hectáreas y se encuentra a 9 kilómetros de «˜Las Lomitas»™ fue construido sobre los humedales que permitían el escurrimiento del agua sobrante”.
La marginación como Pilar
Los «˜inundados»™, desde que ese mote llegó a sus vidas, se movieron en el camino de reclamar y pedir ante el estado una solución. Desde hace aproximadamente cuatro años que el torrente de agua crece, incluso provocando desbordes del Río Lujan.
Ante cada nueva situación de esta naturaleza, las familias se ven en la obligación de evacuarse transitoriamente a un centro de refugiados. Siendo la única solución por parte del municipio, según los abogados. En palabras de los integrantes de La Ciega, luego de cada inundación los vecinos tienen que «volver al barrio a levantar sus hogares en medio del barro, la suciedad y la contaminación”.
Según el amparo «el Municipio no reconoció la situación como una emergencia, considerando que por el simple hecho de contar con un terreno para asentarse, sus derechos y seguridad estaban salvaguardados”.
El frio como abrigo, el agua como tierra
El pasado tres de agosto, y los días posteriores, se dieron fuertes lluvias, con lo cual se desbordó el Río Lujan generando que las familias se debieran evacuar. Esta vez los vecinos, organizados, se movilizaron el diez de agosto hacia «Barrio Nuevo”, delimitado por las calles Houssay, Pirovano, Naón y Penna. En el texto del amparo se especifica que «existe un predio desocupado, de tierras fiscales pertenecientes al Municipio” y «desde hace 18 años que no ha habido una ocupación efectiva, existiendo solo un proyecto para construir viviendas, el cual no ha avanzado más que en su etapa inicial y sobre el que hace tiempo no se están realizando más obras”.
A partir de eso se inició una causa penal a los vecinos, en cuyo marco se dio la orden de desalojo. Este hecho es relatado por los abogados en el amparo: «La policía provincial se constituyó en el terreno y llevó a cabo dicha medida el 18 de agosto, sin que hubiera un aviso previo más que la notificación dos horas antes del desalojo y sin que interviniera la Asesoría de Incapaces para salvaguardar los derechos de niños y niñas que se encontraban allí”.
Ante esta situación los vecinos decidieron instalarse en la ruta 25, en forma de protesta. Posteriormente, regresaron al terreno de «Barrio Nuevo”, siendo nuevamente desplazados por la policía y razón por la cual se mantuvieron frente al municipio para reclamar.
Las palabras del amparo grafican el estado de la situación: «Las familias en este momento no tienen un lugar para vivir. Algunas personas han encontrado refugio transitorio en la casa de algún familiar y otras han intentado regresar al barrio «Las Lomitas”, pero se han encontrado con un espacio abnegado, contaminado, inhabitable. Una gran cantidad de niños y niñas están en peligro a partir de esta situación, viviendo sin recursos ni elementos, en la más absoluta precariedad, exponiéndose a enfermedades”.