Agresión y cárceles a los niños en Palestina
A un año del bombardeo sobre Gaza, y marcando el fin del Ramadan, donde 600 niños han muerto producto de la agresión israelí, nadie ha pedido perdón, nadie ha recibido castigo. Los niños de Gaza siguen viviendo el stress y el trauma de la guerra, y muchos de ellos ya han sobrevivido tres agresiones de la misma intensidad y con armas químicas como fuera comprobado luego de la operación «Plomo Fundido». Muchos han visto morir a familiares. Por Kora Zon para ANRed
Los niños han sido el blanco principal de los crímenes del Estado de Israel, ejemplo de ello fue cuando tres de los niños de la familia Abu Baker, que estaban jugando futbol en la playa de Gaza, fueron asesinados por un vuelo rasante de un avión de guerra a plena luz del día. En los territorios ocupados, a partir de noviembre de 2010, había 264 niños presos palestinos en las cárceles israelíes, entre ellos 32 menores de 16. Alrededor de 700 niños son detenidos anualmente por el ejército y la policía israelí.
La detención de niños palestinos conduce a la interrupción de su educación y, en consecuencia, a los problemas sustanciales de reintegración, un ejemplo es que muchos niños abandonen la escuela después de la cárcel.
La Corte, luego de un pedido iniciado en 1997 para obtener educación en las cárceles determinó que toda educación debe proporcionarse sujetos a los requisitos de seguridad. Sobre la base de esta cláusula, temas como la religión, la geografía, la historia y la educación cívica han sido prohibidas. Sólo se enseña a los niños menores de 16 años de edad, lo que les permite estudiar las matemáticas y las humanidades. El régimen carcelario no proporciona ninguna forma de educación a los niños entre 16 y 18 años, que constituye el grupo de edad más numeroso entre los niños detenidos. A partir de noviembre de 2010, había 217 niños de entre 16 y 18 años que fueron excluidos de los programas educativos de IPS. El plan de estudios que ofrece el IPS no cumple con el plan de estudios de la escuela Palestina. En algunas ocasiones, el IPS no permite a los niños palestinos completar el examen de matriculación en general conocido como «Tawjihi». El examen «Tawjihi» es actualmente el único examen oficial a disposición de los estudiantes de secundaria palestinos. Las clases se realizan a menudo en entornos que no son propicios para el aprendizaje, como la cocina o el patio de la prisión. Los profesores no suelen estar disponibles para llevar a cabo los programas educativos.
Los aparatos de televisión y radio a menudo se confiscan como parte de las políticas de IPS de «castigo disciplinario». El régimen de Tel Aviv ha detenido desde 1967 a 25.000 niños palestinos. La ley militar israelí se aplica a los palestinos de Cisjordania, bajo ocupación desde 1967. El Ejército israelí detiene, interroga y encarcela a entre 500 y 700 menores cada año, según datos de Naciones Unidas. Las presiones en los interrogatorios, la tortura física, los abusos sexuales y la firma de confesiones en idioma hebreo son una constante. Uno de los motivos por los cuales un niño es detenido, es por arrojar piedras contra las fuerzas militares de ocupación, o para lograr una confesión bajo apremios, acusando a un pariente de pertenecer a la Resistencia Palestina.