Femicidio en San Martín de los Andes: joven muere ahogada en el lago Lácar
Una joven de 23 años se ahogó en el lago Lácar, tras caer a las aguas en el vehículo que conducía su pareja de 25. Se trataba de Laura Vázquez Proboste, quien fue hallada sin vida a la orilla del lago y Alejandro Báez, quien permanece desaparecido. Trabajan en el lugar efectivos de la policía local, prefectura y grupos de buzos. Se espera para las próximas horas, la llegada de una unidad de exploración robótica que permita alcanzar mayor profundidad en la búsqueda del vehículo y el cuerpo del joven. Crece la hipótesis del femicidio, al no encontrarse marcas en la ruta, que indiquen una resistencia a la caída. Por ANRed.
Ocurrió en la medianoche de ayer, en la ciudad cordillerana de San Martín de los Andes, en Neuquén. Una joven de 23 años de edad, identificada como Laura Vázquez Proboste, se ahogó en el lago Lácar, tras caer a las gélidas aguas en el vehículo que manejaba su pareja, Alejandro Báez, de 25.
El cuerpo sin vida de la chica fue hallado a la orilla del lago, mientras que el del joven no aparece. Trabajan todavía en el lugar rescatistas de guardia civil, efectivos de la policía local y prefectura.
También participaron de la búsqueda un equipo de buzos tácticos, pero ante la falta de respuestas satisfactorias, se convocó a la llegada de una unidad de exploración robótica con la que lograran llegar a mayor profundidad y cubrir un mayor rango de búsqueda. Se espera que esta unidad, equipada con una cámara de video, llegue en las próximas horas, enviada desde Buenos Aires.
Crece la idea del femicidio
Según informaron medios locales, la joven habría avisado a sus familiares en pleno rapto, mientras circulaba con Báez a gran velocidad por la Ruta 40, trayecto mejor conocido como camino de los siete lagos, dando noticia de que estaba siendo llevada contra su voluntad.
Inmediatamente la familia advirtió la situación, por la breve comunicación de Laura con una de sus hermanas, notificaron a la policía, sin encontrar respuesta concreta alguna.
«Recibimos un llamado avisando de una situación de discusión entre la pareja. Un familiar también recibió un llamado de la chica avisándole que el muchacho no la dejaba bajar de la camioneta», informó el comisario Luis Torres de la localidad, dando a entender que la policía estaba al tanto de la situación de violencia de género por la que atravesaba la víctima y, al mismo tiempo, confirmando la falta de respuesta por parte de la fuerza.
Por su parte, el fiscal a cargo de la investigación, Maximiliano Bagnat, confirmó a este diario que la hermana de la mujer habría recibido un mensaje en el que refería una disputa con su pareja. También se esperaba la declaración de un ciclista, que podría haber sido circunstancial testigo de la salida de la ruta. Otras versiones que circulaban anoche mencionaban una segunda llamada de Vázquez Proboste pidiendo auxilio, pero la fiscalía no lo confirmó.
Además, según notificaron peritos del caso, no se encontraron señales de intento de maniobra de seguridad por parte del conductor, o marcas de frenadas en la ruta, lo que refuerza la idea de que la trágica caída al lago, haya sido intencional.
Nuevamente la no repuesta estatal, frente a la violencia de género
En lo que va de 2015 cerca de 12 casos fueron relevados de distintos medios de comunicación, que dieron cuenta de una situación de violencia de género, que terminó con la vida de una mujer en manos de su pareja o un hombre cualquiera.
Esta cifra es sólo un dato de muestra de la real situación de vulnerabilidad a la que se enfrentan las mujeres, ya que más allá de las prácticas violentas a las que asisten de manera cotidiana, también existe una negligencia y falta de voluntad por parte del Estado para dar respuesta o contención alguna a las víctimas.
El caso de Laura, en San Martín de los Andes, nuevamente pone el eje en la reacción de parte de las entidades de seguridad estatales.
La predisposición que mostraron con el gran despliegue de efectivos de la policía local, guardia civil, bomberos, médicos y enfermeros, y agentes de la prefectura naval, para encontrar los cuerpos, no fueron movilizados inmediatamente al ser advertidos del violento rapto de Laura en manos de Báez, y evitar el trágico final.