26/03/2015

Especial RNMA: «contra la impunidad de ayer y de hoy» (Parte I)

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Encabezados por la bandera del Encuentro, Memoria, Verdad y Justicia (EMVyJ), que sostenían Madres de Plaza de Mayo, trabajadores y trabajadoras, referentes de pueblos originarios, organizaciones de derechos humanos, culturales, agrupaciones políticas, sociales y estudiantiles, con la consigna «Contra la impunidad de ayer y de hoy”, al conmemorarse 39 años del comienzo de la dictadura militar, dio comienzo alrededor de las 17 horas la marcha por el «Día de la Memoria por la Verdad y la Justicia”. También hubo actos en otros puntos del país. Cobertura especial de la RNMA.


La columna principal de la multitudinaria movilización que recuerda el inicio del golpe cívico, militar y religioso del 24 de marzo de 1976 que dio comienzo al genocidio más sangriento de la historia argentina, debió esperar una hora más de lo previsto para avanzar por las calles porteñas, ya que la marcha anterior promovida por, además de organismos como Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora e HI.J.O.S.; organizaciones cercanas relacionadas gobierno nacional, «tardó” en desconcentrarse.

Al llegar a la Avenida 9 de Julio, se sumaron columnas de las comunidades qom, wichi, pilagá, que se encuentran acampando en ese punto de la ciudad de Buenos Aires, en protesta por las violaciones sistemáticas a los derechos humanos que sufren diariamente en las provincias de Chaco, Formosa y Salta, conducidas todas por gobiernos del Frente Para la Victoria.

El recuerdo permanente en las canciones de los 30.000 compañeros detenidos- desaparecidos y las duras críticas al gobierno nacional que sostiene en su cargo al jefe del Ejército, César Milani, pese a las denuncias por delitos de lesa humanidad que pesan en su contra a raíz de su participación en las provincias de Tucumán, en el caso puntual de la desaparición del conscripto Alberto Ledo, y La Rioja durante la dictadura.

El secretario de Seguridad de la Nación, Sergio Berni, fue otro de los blancos en los cánticos, banderas y carteles, por su accionar represivo en las manifestaciones y cortes realizados por los trabajadores y trabajadoras, movimientos sociales, además de especialista en desalojo de familias sin techo, como fue el caso del barrio Papa Francisco de Villa Lugano en ciudad de Buenos Aires. Recordemos que Berni fue un militar simpatizante del movimiento carapintada liderado por Aldo Rico y Mohamed Alí Seineldín. También fue señalado por las Madres de Plaza de Mayo como infiltrado en la huelga de los mineros en Rio Turbio. Y hace pocos días se manifestó a favor del uso de las pistolas eléctricas Taser.

Durante la marcha, abundaron también los pedidos de aparición con vida de Jorge Julio López, casos de trata de mujeres a lo largo y ancho del país, el esclarecimiento del asesinato de Silvia Suppo, ocurrido el 29 de marzo de 2010 tras declarar en un juicio por delitos de lesa humanidad que incorporó entre las imputaciones los abusos sexuales cometidos por los represores en los centros clandestinos de detención, y en su caso específico durante la violación a la que fue sometida por los menos tres integrantes de la fuerzas militares, que le provocaron un embarazo que finalmente terminó en aborto.

Se sumaron a la movilización manifestantes de distintos países latinoamericanos, como uruguayos residentes en nuestro país, paraguayos pertenecientes al Movimiento 138, que defiende a sus compatriotas enjuiciados por la masacre de Caraguaty que finalizó con el golpe cívico el 30 de junio de 2008 al ex presidente Fernando Lugo, venezolanos en defensa del gobierno bolivariano ante los ataques permanentes de la oposición aliada a los Estados Unidos, y mexicanos que con máscaras blancas recordaron los seis meses de búsqueda de los 43 normalistas desaparecidos en la región de Guerrero.

Minutos antes de las 19 horas, la columna principal hizo su ingreso a la Plaza de Mayo, para dirigirse hasta el palco donde se procedió a la lectura del documento escrito por integrantes del EMVyJ.

Posteriormente como cierre se realizó la quema de un muñeco gigante que representaba al jefe del Ejército, Milani.

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Testimonios durante la marcha

Referentes de diversos espacios dieron los siguientes testimonios a la RNMA:

Adolfo Pérez Esquivel (Premio Nobel de la Paz): «Todo lo que le pasó al pueblo debe iluminar el presente de lo que está pasando en el país. No podemos ignorar esto ni acotar los derechos humanos a lo sucedido entre 1976 y 1983”.

Elia Espen (Madre de Plaza de Mayo-Línea Fundadora): «Fuera Milani. Su nombramiento al frente del Ejército es un insulto para todos los desaparecidos, para las Madres y familiares”.

Mirta de Baravalle (Madre de Plaza de Mayo-Línea Fundadora): «Que el gobierno escuche el reclamo del pueblo y que se sepa qué pasó con mi hija, mi yerno y mi nieto”.

Enrique Fukman (Asociación Ex Detenidos Desaparecidos): «El fin de la impunidad de ayer y de hoy sintetiza nuestro reclamo”.

Patricia Walsh (hija del escritor y periodista desaparecido Rodolfo Walsh): «El 24 y 25 de marzo son fechas muy ligadas para mí porque mañana se cumplen 38 años de la desaparición de mi padre. («¦) Como integrante del EMVyJ comparto el pedido de renuncia del general Milani porque no queremos un genocida al frente del Ejército. Este hombre firmó el acta que decía que Alberto Agapito Ledo era un desertor cuando en realidad es un desaparecido. Esto es algo que nuestro pueblo no puede ignorar ni silenciar”.

Jujuy: fuerte reclamo contra la impunidad

El Colectivo Radio Pueblo realizó una crónica de las actividades que se desarrollaron este 24 de marzo en las localidades de Guerrero y Libertador General San Martín. Este aniversario no fue uno más en Jujuy. El reciente fallo de la justicia dictando la falta de mérito para el empresario y dueño del Ingenio Ledesma, Carlos Blaquier, y para su mano derecha, Alberto Lemos, fue un duro golpe para los organismos y sobrevivientes, pero renovó con más fuerza aún el reclamo contra la impunidad. Eso pudo verse este 24 en las calles jujeñas, y así lo reflejó Radio Pueblo.

24 de marzo, dignidad y resistencia de los ex presos de Ledesma frente al fallo por Blaquier

En Jujuy las distintas actividades realizadas frente a un nuevo aniversario del último golpe de Estado estuvieron signadas por la infame falta de mérito que la cámara dio a Pedro Blaquier, dueño de la empresa Ledesma.

En efecto, la noticia de este desprocesamiento encubierto de Blaquier cayó como un balde de agua fría sobre toda la población que lucha en la provincia por memoria, verdad y justicia, y aún más, impactó en las víctimas del Terrorismo de Estado en el departamento de Ledesma, quienes sufrieron en carne propia los secuestros dentro de la fábrica o en las largas noches de apagón en que fueran trasladados en camionetas de la misma empresa. Dato que para la (in)justicia no alcanza a probar la participación del dueño de esa fábrica y de esas mismas camionetas.

El oportuno cachetazo de impunidad golpeó de distintas formas en los testigos-víctimas, en algunos casos llevando la crispación al punto del paroxismo, en otros postrándolos en la impotencia y en otros, no pocos, llevándolos a temer porque la impunidad se extienda hacia algún atentado a su integridad.

Pero justamente la sobreposición a estas tensiones y el decidir plantar cara a Blaquier por parte de los ex presos políticos de Ledesma fue el dato más electrizante de la jornada.

Volviendo a Guerrero

Para los ex presos de Ledesma la jornada comenzó a las 10 de la mañana, marchando por Guerrero, donde 39 años atrás fueran llevados por los cancererberos del genocidio al Centro Clandestino de Detención que funcionó en aquella localidad casi para uso exclusivo de las personas secuestradas de aquel departamento de la provincia de Jujuy, estuvieran o no residiendo en el mismo.
Encabezando la columna de la tradicional marcha que la Asamblea de Trabajadores Desocupados (FOL Jujuy) realiza las mañanas de los 24 de marzo, los ex presos políticos de Ledesma marcharon con el acompañamiento de la Red por el Derecho a la Identidad y contaron con el apoyo de Teresita Asilvera, del colectivo de ex presos políticos del Paraguay «Carmen Soler”, quien viajó a la provincia en representación del Movimiento Nacional de Víctimas de la Dictadura Stronista para manifestar el apoyo de aquellos colectivos a sus compañeros jujeños. También estuvo presente, viniendo desde la vecina provincia de Salta, Casiano Bache, uno de los ex detenidos políticos testigos en la causa que se está llevando a cabo en la provincia y que por primera vez volvía a pisar la localidad de Guerrero luego de los años de plomo: «la segunda vez que lo visitás, pero esta vez es por voluntad propia” bromeó con él un ledesmense. Completaban la columna la organización NOA Diversa, ATD, Llanka Maji y el PCR.

Bajo una lluvia persistente, la marcha se detuvo en la entrada del CCD para pegar allí las fotografías de los desaparecidos que pasaron por ese centro de tortura y muerte, haciendo una pequeña historia de vida de ellos y gritando «presente” al mencionar sus nombres.

Tras ello, la columna se dirigió hacia un tinglado prestado para la ocasión por una familia de la zona donde el acto inició con una obra de teatro a cargo del grupo Alegre Rebeldía que emocionó a los presentes al punto de quedar la asistencia unos minutos en silencio tras la obra. Luego, los oradores se fueron sucediendo de a tres, intercalando los discursos con presentaciones tales como las canciones de Pablo Guerra, militante e hijo de un ex preso político, la obra del grupo de género Awkasisa, quienes actuaron con sus hijitas, o la murga los pájaros del B 5, entre otros artistas.

Los discursos de los oradores manifestaron no solamente la entereza de quien continúa en la lucha por memoria, verdad y justicia, sino también la reactualización de los más altos ideales por los que lucharon las compañeras y compañeros detenidos-desaparecidos: liberación, antiimperialismo… socialismo. Como si ante la avanzada de Blaquier la respuesta fuera ir a por más.

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La dignidad se pasea frente a Ledesma

Tras la intensa actividad, el contingente de ex presos políticos y una parte de la asistencia se trasladaron a Libertador Gral. San Martín, ciudad de origen de la mayoría de los detenidos políticos que pasaron por Guerrero y sede de la fábrica de Ledesma, donde a las 18 inició el punto fuerte de la respuesta a Blaquier. Bajo una lluvia fuerte y constante que no pudo sin embargo amainar ni un ápice la fuerza de la marcha, los ex presos y CAPOMA marcharon con un nutrido contingente de la CCC más el PTS y el AJI-20 en lo que, en palabras de los organizadores, fue sin duda uno de los 24 de marzo más nutridos de los últimos años en Libertador, donde el temor a la pérdida del puesto laboral, entre otras cosas, suele reducir la marcha del 24 a algunas decenas de personas, bien que convencidas y militantes como en pocos otros lugares, pues aquí no sólo se conservan las cicatrices, sino la misma vieja herida continúa abierta de par en par.

La marcha, o mejor dicho, la inflamada respuesta a una justicia cómplice y a Blaquier, se paseó por las calles de Libertador con una dignidad que sus antagonistas no podrían ni emular, con un fuego que la lluvia no podía apagar y con una entereza que mostraba que, como reza la canción «a pesar de los golpes y de nuestros caídos, no nos han vencido”.

Los oradores alzaron sus voces en cada intervención denunciando la complicidad de la justicia, la responsabilidad de Blaquier y los empresarios ideólogos del golpe, y parecían crecer en intensidad conforme lo hacía la tormenta. Incluso en un álgido momento del discurso de una ex presa un fuerte trueno inundó el ambiente, certeramente la oradora exclamó «así va a tronar el escarmiento”, despertando un vendaval de cánticos y aplausos cuyos decibeles se alzaron sobre la tormenta.
La lista de oradores continúo sin más molestias que las de la copiosa lluvia y la de la reciente injusticia, inflamada con las memorias de los oradores sobre la dura historia de este pueblo que vio crecer el ingenio a fuerza de la superexplotación de los pueblos originarios, presenció la firmeza de la resistencia, la combatividad clasista y la brutalidad de la represión, comandó los levantamientos de los «˜90, sufrió su propio proyecto X durante la marcha de 2005 y vio caer, tan cerca como en 2011, muertos a algunos de sus pobladores durante la toma de tierras para un derecho tan básico y tan negado aquí como la vivienda. Tras la sucesión de oradores el ambiente de lucha y resistencia hizo viajar de la memoria a los labios un conocido cántico de los «˜70 a un viejo militante que estaba en el palco: «que lindo, que lindo, que lindo que va a ser, una cooperativa en la empresa de Blaquier”.
El acto cerró con tal mística en el aire que cualquiera hubiese podido creer que el mismo Almafuerte inspiró sus más sentidos poemas en este preciso momento, en esta misma provincia, en esta pequeña gran ciudad obrera.

Por Colectivo Radio Pueblo



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