Docentes, padres y madres de Lomas de Zamora en lucha
Docentes, padres, madres y alumnos del Centro de Formación Laboral (CFL) N° 1 de Lomas de Zamora marcharon ayer por el centro lomense, pasaron por la municipalidad y finalizaron en el Consejo Escolar, acompañados por docentes del distrito. Reclaman un edificio digno para enseñar y aprender. Por Anred «“ Red Eco «“ Agencia ANCAP
Cerca de 300 docentes, padres y alumnos del CFL N°1 de Lomas de Zamora y docentes del distrito marcharon ayer por el centro de lomense para difundir y visibilizar la problemática del único centro de capacitación en oficios del distrito para jóvenes con capacidades diferentes: en diciembre se quedaran sin edificio.
«Lo increíble es que esta institución se encuentra a solo siete cuadras del Consejo Escolar de Lomas de Zamora, uno de los responsables de esta situación, al igual que el gobierno provincial. Desde el 2008-2009 que venimos reclamando esta situación” expresa Sergio, auxiliar de la escuela.
La movilización se detuvo en tres lugares: en la Secretaría de Inspección, en la municipalidad y en el Consejo escolar. Solo en la primer parada, la jefa distrital María Rosa Membrana salió y habló a los manifestantes. Membrana dijo que no le correspondía a ella solucionar ese problema, dio media vuelta y volvió a encerrarse en el edificio. Tanto en la Municipalidad como en el Consejo Escolar, ningún funcionario asomó la cara para dar alguna explicación a los padres y docentes que afuera, pese al sol del mediodía, esperaban. Durante la espera, frente al edificio municipal, un grupo de alumnos que integran la murga del CFL, junto a su profesora, bailaron y cantaron.
Va una semana de toma
La toma del edificio, que ya lleva una semana, no impide el dictado diario de las clases. Los padres se han organizado para visibilizar el conflicto: la escuela esta empapelada con carteles y banderas hechos por los chicos. «Donde está la inclusión”; «Basta de hacer campañas con la inclusión, ¡aplíquenla!”; «Basta de mentiras, ¡un lugar digno ya!”, denuncian muchos de los afiches pegados en las rejas de la escuela. Por otro lado, los padres reparten volantes en la puerta y hablan con los vecinos y transeúntes con la finalidad de denunciar la situación.
El edificio es una casona antigua, ubicada en Meeks 429, en pleno centro lomense. Pegado al CFL funciona una de las sedes del Colegio Barker, una de las instituciones privadas más elitistas del municipio. Hace dos años venció el contrato de alquiler de la casona y desde ese momento, la Dirección General de Educación y Cultura (DGEyC) dejó de pagar el alquiler y recibieron, este año, la orden de desalojo para diciembre próximo. Frente a quedarse sin edificio y sin otro espacio garantizado por las autoridades provinciales para el traslado del CFL, los padres tomaron la escuela desde el martes 14 de octubre pasado.
Los padres y docentes se quejan de las trabas burocráticas que ponen los funcionarios para retrasar y obstaculizar la búsqueda y alquiler de otro edificio. Hace más de un año que venimos denunciando esto, no solo que nos íbamos a quedar sin edificio sino, también, el estado en que está hoy el CFL: un aula clausurada en el primer piso por peligro de derrumbe, los pisos hundidos, la cocina sin puertas y sin agua, enumera la mamá de un alumno.
María Martínez, como tantos padres de la institución se ha puesto a la cabeza de la toma: «esta institución nunca tuvo edificio propio, siempre fue alquilado. Nosotros fuimos reiteradas veces al consejo escolar y nos ignoraron. Acá los baños se inundan, la mampostería se cae, los cables de luz están expuestos. Y tenemos chicos con todas las modalidades, motores, mentales, hipoacúsicos y todas las escuelas especiales los derivan acá, el único centro de formación laboral de Lomas de Zamora”.
Finalmente María denuncia el silencio de las autoridades municipales y del Consejo Escolar que «no nos da una respuesta concreta, solo nos dicen que hay que esperar, lo mismo dice el municipio y nosotros desde años venimos así, sin nada firme”.
«Tratamos de arreglar las cosas nosotros pero llega un punto que uno se desborda”, subraya una trabajadora de la institución. Por ejemplo, la institución no cuenta con baños para discapacitados en la planta baja del edificio sino, que están en el primer piso y muy deteriorados. «Hace un tiempo se rompió un mingitorio, vino el Consejo Escolar y en vez de repararlo lo sacaron y lo tiraron en la puerta” agrego Sergio.
Más de 200 alumnos y cerca de 50 docentes participan de lunes a viernes de los talleres de peluquería, economía doméstica, herrería, carpintería y armado. Asisten al CFP como continuidad de la escuela especial.
«El 2013 no hubo inicio de clases por 10 días, decidimos hacer paro por la situación edilicia. Corremos el riesgo que se accidente un niño por un desprendimiento de cielo raso o problema eléctrico”, señalaron los auxiliares.