El Perfil censurador de Fontevecchia
Perfil echó a trece trabajadores que se encontraban en defensa de otras siete fuentes de trabajo de personas despedidas una semana atrás. Este hecho fue repudiado desde varios sectores, muchos de los cuales conforman el Frente opositor «Multicolor” en el gremio de prensa. Por ANRed.
El pasado martes 7 de enero, trece trabajadores se enteraron de la noticia que les dejaron Melchor, Gaspar y Baltasar: corrían la misma suerte de sus siete compañeros previamente echados de Perfil. Su único delito fue defender a los mismos que fueron depuestos de su fuente laboral el mismo días que se realizaban las elecciones de Comisión Gremial Interna. A su vez, varios de los despedidos habían sido partícipes de de la Junta Electoral, lo que implica un claro atentado contra la libertad gremial. «El atropello que la empresa pretende justificar en una supuesta causa justa es lisa y llanamente un ataque contra la organización gremial y los mas elementales derechos humanos”, dice el comunicado de la Comisión Interna.
Esta actitud parece ser una moneda de dos caras: por un lado, facilitaría un recorte de presupuesto y, por otro, implicaría una ofensiva contra las corrientes combativas que ganan terreno en el gremio de prensa. Fontevecchia, gurú y defensor de la «libertad de expresión” en sus columnas de todas las semanas, muestra la hilacha y mata dos pájaros de un tiro: realiza un ajuste y ataca directamente a quienes actúan contra el mismo. De esta forma lo explica la Comisión Interna de Perfil: «Esta clara violación a la libertad de expresión de los trabajadores de Perfil se inscribe en el marco de un ataque a las condiciones de trabajo que pretende instrumentar la empresa: quiere reducir el personal drásticamente y que los compañeros que queden realicen el trabajo de ellos más el de los que ya no están, además de precarizar las condiciones y que un redactor se encargue de tareas que no le corresponden. Hay que mencionar también la intención de Perfil de debilitarnos para la pelea de paritarias que se avecina. Para conseguir esta finalidad, necesita golpear a sus trabajadores y «aleccionarlos” con el fin de que los compañeros desistan de la defensa de sus derechos.”
Ante esta situación, la Asamblea de Trabajadores de la Editorial Perfil convocó a un plenario que se realizó a las 13 horas del pasado viernes 10. «En la reunión se resolvió lanzar inmediatamente una campaña de afiches en la vía pública para denunciar la persecución sindical en Perfil y también convocar a personalidades de distintos ámbitos, en particular de los derechos humanos, la cultura y el espectáculo, el gremialismo y la política, para que a través de vídeos, fotos y textos, se pronuncien contra este ataque, y colaboren con la visibilización del conflicto”. En esta misma sintonía, se llamó a una movilización para el jueves 16 al Ministerio de Trabajo, para pedir la intervención de este ente en el conflicto (ya antes se había pedido la conciliación obligatoria). Pero se suspendió a último momento al abrirse una instancia de negociación que abrió el Ministerio de Trabajo entre la empresa y la comisión interna.
La libertad sindical y el ajuste económico van de la mano en un proceso que parece trascender a la empresa en cuestión: muchas de sus pares toman el mismo camino, como Clarín, que pocos días atrás también despojó de su fuente laboral a siete trabajadores. Se agudizan los conflictos y una cosa queda cada vez más clara, Fontevecchia solamente puede ganar un premio a la «Libertad de expresión”, si se lo da él mismo.