¿Dónde están los padrones?
La Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA) transita días difíciles, viéndose comprometido incluso su andar democrático. Es así que la elección de sus autoridades, que se había fijado para los días 26 y 27 de septiembre del presente año, debió ser suspendida por una intervención judicial. La jueza María Alejandra D´Agnillo, del Juzgado Nacional del Trabajo N° 63, tomó la decisión de reprogramar los comicios para los primeros meses de 2014. Por ANRed.
El fallo se tomó luego de la presentación que hizo la lista opositora Multicolor-Frente de Unidad ante el ocultamiento de los padrones electorales por parte de la conducción actual y en connivencia con la Junta Electoral. Ante esta situación, Patricio Klimezuk, candidato a Secretario Adjunto por la Lista Multicolor y delegado de la Agencia Télam, expresó su disconformidad: «existe un padrón desconocido para los afiliados en manos de la conducción. Como en cualquier elección, la junta electoral tiene que cumplir los requisitos con cierta anticipación”. Según establece el Decreto Reglamentario 467/88 de la Ley 23.551 (de Asociaciones Sindicales) en su Artículo 15, los padrones deben ser entregados a todas las listas con no menos de 30 días de anticipación a la fecha de los comicios, situación que en la UTPBA no ocurrió.
«Se tienen que presentar los padrones por establecimiento y por orden alfabético. En esta ocasión, la conducción del sindicato puso a disposición solamente una computadora donde se podía consultar si uno figura en el padrón pero no podías saber si otra gente figuraba” dijo Klimezuk. De este modo, al no tener el padrón en papel «era imposible saber cuántos afiliados tenía el sindicato porque la computadora no lo decía y era imposible saber quiénes estaban afiliados al sindicato”, añadió el candidato.
Por su parte, Tato Dondero, candidato a Secretario General por la misma lista y delegado de Página/12, relató también sobre ciertas maniobras que les impedían tener acceso a la información: «los padrones estuvieron disponibles muy pocos días y directamente se obstaculizaba a cualquier compañero que se acercara a mirarlos. O sea, ocupaban la computadora que estaban supuestamente mirando, y nosotros teníamos que hacer largas colas”.
En suma a lo anterior y a pesar del fallo judicial, la conducción de todos modos intentó llevar a cabo la elección de forma ilegítima. Ante esta situación, Dondero sostuvo: «hicieron una elección que no sirvió para nada porque no era legal y en muy pocas empresas llegaron las urnas”. Además, según testimonio de un periodista y militante del Colectivo de Trabajadores de Prensa (CTP), quien prefirió resguardar su identidad por temor a posibles represalias en el medio que trabaja, la propia conducción debió dar marcha atrás sobre su proceder: «intentaron hacer una elección pero tuvieron que salir a reconocer que fue una jornada democrática en apoyo a la UTPBA supuestamente”. Este proceso no tenía el aval de la justicia ni tampoco del Ministerio de Trabajo, según luego aclaró Dondero.
LAS MANIOBRAS CON EL PADRÓN
En este marco, la gran pregunta es ¿por qué no se tiene acceso libre a la información sobre los afiliados al gremio? Y la respuesta es que, según denuncian desde la oposición, los padrones «están inflados”. El candidato a Secretario General por la oposición fue contundente en este sentido: «la conducción tiene miedo de perder su hegemonía. En el 2010 nosotros sacamos el 54% en todas las empresas de Capital y Gran Buenos Aires y perdimos en la general, 79 a 21 puntos. ¿Por qué? Porque ellos ganan con el padrón de colaboradores, los jubilados y el de radios FM pequeñas que tienen más afiliados que la Agencia Télam o que Editorial Perfil, eso último es muy raro”, afirmó.
Según un extenso informe que realizó el Colectivo de Trabajadores de Prensa, hay FM barriales que tienen bastantes más afiliados que los grandes medios. En Clarín, por ejemplo, hay 2200 empleados y tan sólo 110 afiliados. En tanto, Télam y La Nación no llegan a cincuenta, y editoriales como Perfil o Atlántida apenas superan la decena. En contraposición, en la FM Center de Hurlingham, lugar donde no se votó en 2010, sumaron raudamente en tres años 70 afiliados. O por ejemplo, Radio Ché, que funciona en un local de ropa de Castelar, posee 43 afiliados. La FM Oriente de Ituzaingó, en 2010 aportó 17 votos (con asistencia perfecta) y de cara a 2013, cuenta con 42 afiliados.
Además, entrando en el mundo virtual, según el informe, hay blogs que son de dudosa labor periodística pero que votan de igual forma. Por ejemplo, la Agencia 144 de Moreno, ha cargado tan sólo tres notas durante todo octubre de 2013 y cinco durante septiembre. A pesar de que noviembre ya ha culminado, durante ese lapso no hubo actualización alguna del sitio web. Esta agencia de noticias cuenta con 31 afiliados. «Una cooperativa ponía una radio, y la UTPBA afiliaba a todos los empleados de la cooperativa como parte de la radio y no necesariamente todos estaban involucrados con la radio, ni eran trabajadores de prensa”, reflexionó el entrevistado perteneciente al CTP.
Otro de los problemas, como hizo referencia Patricio Klimezuk, es que a ciertos periodistas se les dificulta afiliarse al gremio ya que la UTPBA tiene una oficina de afiliación que funciona dos veces por semana, sólo durante cuatro horas. «Es el único sindicato donde los delegados no podemos llevar fichas de afiliación a los medios”. En suma, el integrante del CTP de identidad reservada, contó que «es muy difícil para mucha gente que labura en los medios ir a afiliarse al sindicato porque te ponen trabas. En cambio, las afiliaciones para los de ellos salen automáticamente. Nos pasó con compañeros del Colectivo que activaron en algunos conflictos con diferencias con la UTPBA y que después no se podían afiliar”.
Por su parte, a través de un comunicado en la web oficial, la UTPBA necesitó aclarar que tanto periodistas como colaboradores son «reconocidos como trabajadores de prensa, condición que les otorga la totalidad de los derechos profesionales, gremiales, sociales y políticos”. En este sentido, en dicho aviso la conducción critica el fallo judicial: «recordamos que («¦) los periodistas-colaboradores tienen el derecho a elegir autoridades” y acusa de concepciones «nazi-fascistas” a quienes intentan instalar una «metódica mentira” sobre la UTPBA. Ante semejante acusación, Tato Dondero dijo: «nosotros estamos totalmente abiertos a que voten todos los trabajadores de prensa, pero que voten los trabajadores de prensa, no cualquier persona. Entonces por eso queremos ver los padrones”.
Los tres entrevistados reconocen distintas problemáticas en el sindicato, desde la pérdida de instalaciones y prestaciones en la obra social hasta la incógnita en el manejo de sus fondos, incluso con grandes deudas, pero coinciden en que el mayor problema que hoy tienen los trabajadores es que la UTPBA es un gremio «abandónico”. Klimezuk lo sintetizó: «lo más grave es la ausencia total de la conducción en la pelea por las condiciones de trabajo y en la pelea por los salarios o contra los despidos”.
Entendiendo al sindicato como una herramienta de organización y lucha por los intereses de los trabajadores suena un poco paradójico las anécdotas contadas por los entrevistados sobre distintas luchas en que la UTPBA no se hizo presente y no apoyó a los trabajadores en conflictos con las patronales: los históricos 117 despidos de Clarín en el 2003 por ejemplo, o la lucha en el Diario Crítica hace cuatro años, también los conflictos recientes en Radio del Plata, PubliExpress, Perfil y por las paritarias de prensa. «Â¡No pisan una empresa!” expresó con énfasis Tato Dondero.
La vida democrática de un gremio está en jaque por estos días, es totalmente necesario, más allá de quien gane, que se lleven adelante las elecciones de forma libre y transparente para el mejor funcionamiento de esta herramienta que tienen los periodistas para defender sus pésimas condiciones de trabajo en los grandes o pequeños medios de comunicación. Así, los que ganan son los trabajadores.