Gobierno de Evo Morales afronta huelga general que bloquea el país
Quedó lejano el tiempo en que la Central Obrera Boliviana (COB) era la base de apoyo sindical del gobierno de Evo Morales. Desde hace diez días los trabajadores movilizan en las principales capitales del país y bloquean las carreteras interdepartamentales. Exigen una jubilación igual al 100% del salario, ante el 60% actual y en rechazo del 70% que ofrece el Ejecutivo. Dado que la Central ya tiene un Partido de los Trabajadores, el oficialismo denuncia que detrás de la demanda existen «tintes conspirativos”. Por Carolina Ricaldoni desde La Paz, para ANRed.
Si bien la Central Obrera Boliviana (COB) apenas representa a un cuarto de los trabajadores «“debido a que el 58 por ciento son precarios y los estatales no tienen representación»“, esta vez las medidas de presión lograron acaparar la mirada del oficialismo, que antes desestimaba los paros en los lugares de trabajo. Y es que ahora las protestas fueron orientadas, primero, a cortar las carreteras interdepartamentales y, desde esta semana, a ocupar el centro de las principales capitales departamentales del país.
En la huelga general más larga protagonizada por la Central durante la gestión del MAS, los sectores que movilizan son los mineros asalariados (que están a la cabeza de la COB), maestros urbanos y rurales, trabajadores de la salud, docentes universitarios y, desde el último día, los fabriles.
El momento más violento en esta contienda se dio el miércoles 8, cuando más de seis mil mineros bloquearon en Caihuasi, departamento de Oruro, dos rutas estratégicas que conectan a ese departamento con Cochabamba y a Cochabamba con La Paz. Además lograron el control de las colinas. Según el relato de los trabajadores, ante la arremetida de la policía para despejar los caminos, los mineros hicieron explotar un puente. La reacción fue rápida: un gran número de efectivos policiales llegaron a la zona, lanzaron gases lacrimógenos y detuvieron a 23 personas, entre ellas un bebé.
A las pocas horas del suceso, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, anunció que la policía halló en la zona una ambulancia con 15 bolsas de Anfo, un explosivo de alto orden, y 137 cartuchos de dinamita. Casi en simultáneo, el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, denunció que en la COB «hay dirigentes que están expresando el lenguaje del golpe de Estado”. Se refería a las expresiones de un manifestante cochabambino, quien habría dicho que así como hicieron «subir” a Evo, lo iban a «tumbar”. Las acusaciones de golpismo fueron retomadas este miércoles.
Las demandas
El paro comenzó el lunes 6 y se realiza en demanda de una renta de jubilación sobre el 100% del salario, tal como perciben los militares. Además, los trabajadores exigen que la renta llegue a 8.000 bolivianos (1.140 dólares) para los mineros y a 5.000 Bs para el resto de los sectores. Además, reclaman que la renta de jubilación se calcule en base al salario recibido en los últimos 24 meses y no en los 72, como se computa en la actualidad.
El Gobierno rechaza atender este reclamo porque, sostiene, pondría en riesgo el sistema de pensiones. En cambio, plantea que la jubilación sea del 70 %, y propone incrementar las rentas de jubilación de 3.700 a 4.000 bolivianos para el sector minero y de 2.600 a 3.200 bolivianos para otros sectores.
Actualmente, la jubilación es, al menos, sobre el 60% del salario para todos los trabajadores. La escala fija un monto mínimo de 476 bolivianos luego de 10 años de aportes y un monto máximo de 2.600 Bs después de 30 a 35 años de aportes. Sólo en el caso de los mineros el máximo asciende hasta 3.700 luego de 30 años de contribuciones.
Entre el electoralismo, el golpismo y el diálogo
Desde que la entidad matriz de los trabajadores anunció la huelga general, diferentes analistas comenzaron a señalar que esa dirigencia quiere disputar la base social del MAS, el partido de gobierno, y que el reclamo es político. Es que Jaime Solares, ex secretario Ejecutivo de la COB, lanzó este año -año preelectoral- el Partido de los Trabajadores (PT). Si bien es posible que no obtenga el triunfo de sus candidatos en las presidenciales de 2014, sí puede que logre una representación parlamentaria. Otra opción mencionada por articulistas es que los cobistas busquen la reconciliación con Morales y desde allí tengan mayor plataforma para negociar. Pero esta proyección es aún más lejana.
En la mañana del miércoles, la acusación de golpe de Estado por parte del Gobierno volvió con mayor fuerza. El ministro Carlos Romero enumeró una serie de hechos (como dos convocatorias que se hicieron en Beni, por la COB, y en Santa Cruz, por los cruceñistas, para la toma de aeropuertos) que sustentarían la teoría de la conspiración.
El secretario Ejecutivo de la COB, Juan Carlos Trujillo, desmintió las acusaciones, dijo que el reclamo es netamente sindical y que continúan abiertos al diálogo.
En La Paz, al menos 40 mujeres de policías instalaron en la tarde del miércoles piquetes de huelga de hambre en apoyo a pensiones del 100% del salario. Según anunciaron, en un plazo de 24 horas se instalará esa medida de presión en ocho capitales del país.
En la noche, finalmente las partes se sentaron a dialogar. El Gobierno reiteró que no puede mejorar la propuesta porque pondría en riesgo la jubilación de los más jóvenes. La COB se retiró para consultar los resultados del diálogo.
Para Evo Molares «son privilegiados”
El Presidente señaló en la mañana del miércoles que el reclamo de la COB es discriminatorio respecto a los sectores más empobrecidos y los llamó «grupo de privilegiados”, porque en la Empresa Minera Huanuni más de 450 trabajadores perciben sueldos «lujosos”, que sobrepasan incluso su salario. Dijo que algunos de los mineros cobran más de 46.000 bolivianos e informó que la estatizada pierde 500 mil dólares por cada día de paro, por lo que solicitó que se realice una auditoría y una reestructuración de la compañía.
De aplicarse la demanda de las jubilaciones, dijo Morales, Bolivia entraría en una crisis similar a la de Europa y tendría que optar por medidas de recorte de derechos.
El ministro de Minería, Mario Virreira, informó que los trabajadores y dirigentes de la COB, Juan Carlos Trujillo y Vladimir Rodríguez, perciben sueldos de 32.911 bolivianos y 24.866 bolivianos, respectivamente.
Salarios promedio e insalubridad
Mientras tanto, los mineros de Huanuni desmintieron en un comunicado que todos los trabajadores perciban sueldos altos. El salario básico promedio de los trabajadores de Huanuni, indicaron, es de 3.200 bolivianos. «Por trabajos a contrato, entre enero y marzo de 2013 el 69% de los obreros percibió entre 6.000 y 10.000 Bs, en tanto que sólo un 6% ganó más de 16.000 Bs y el 0,13%, más de 30.000 Bs”, detalla el comunicado.
También indican que al interior de la mina no existen las condiciones de ventilación para los 2.700 trabajadores, lo cual ocasiona continuas muertes de jóvenes trabajadores. Señalan que casi el 20% de los mineros padece silicosis y enfermedades asociadas con los pulmones. «En el trabajo diario, los mineros están ‘con el Jesús en la boca’ porque no se sabe si volverán al hogar sanos, accidentados o muertos”, expresan en la misiva, y ponen de ejemplo las estadísticas de la empresa: entre 2009 y 2012 se registraron 1.868 accidentes de trabajo como promedio anual. En marzo de 2013 se registraron 225 accidentes de trabajo, lo que equivale al 5% del total de trabajadores. Desde 2008 fallecieron 48 trabajadores, 17 por silicosis, tuberculosis o enfermedades pulmonares y respiratorias. El promedio de edad de los fallecidos es de 49 años.
Una ley que fue aprobada por la COB
Para llevar adelante el reclamo laboral, debería modificarse la Ley 065 del Sistema Integral de Pensiones, que fue aprobada en diciembre de 2010 con el visto bueno de la COB, cuando estaba bajo la dirección de Jaime Solares. Ahora, Trujillo reconoció que equivocaron al aceptarla en ese entonces.
Las pérdidas ante el bloqueo a la circulación de capitales
El presidente de la Cámara Nacional de Exportadores de Bolivia, Guillermo Pou Mount, informó que ese sector pierde seis millones de dólares por día, a causa de los bloqueos de la COB.
Gustavo Rivadeneira, presidente de la Cámara de Transporte Internacional, informó que las pérdidas de su sector llegaron al millón de dólares.
El gobernador del departamento de La Paz, César Cocarico, informó que la región pierde cerca de ocho millones de dólares por cada día de bloqueo, mientras que el presidente de la Federación de Empresarios de La Paz, Luis Urquizo, lamentó que los bloqueos hubieran provocado pérdidas estimadas por alrededor de 30 millones de dólares en los últimos días de protesta en el departamento.
Amenazan con enfrentamientos
Las 28 organizaciones sociales que conforman la Coordinadora Departamental para el Cambio (Codecam) de Cochabamba anunciaron el miércoles que se movilizarán si la COB no cesa en 48 horas las protestas. En respuesta, el secretario ejecutivo de la Central Obrera Departamental (COD) en Cochabamba, Luis Villarroel, dijo que los trabajadores no temen a las amenazas de la Codecam y sostuvo que «si quieren pelea tendrán pelea».
Fotos tomadas de los sitios de La Razón, El Día, Erbol, El Deber y El Montículo.