Brasil: Paro en las Universidades Federales
Se cumplieron ya tres meses del paro nacional en las Universidades Federales de Brasil. Los docentes reivindican una mejora en los salarios y condiciones laborales así como la restructuración del plan de carrera docente. Por ANRed
La sorpresa que suscitó en el Ministerio de Educación brasilero la medida de fuerza, pasa por alto las negociaciones que viene teniendo dicho organismo con los docentes desde hace ya dos años respecto a la restructuración de la carrera.
La paralización se dio en 57 de las 59 Universidades Federales de la República de Brasil y 34 de los 38 Institutos Federales de Educación Tecnológica, y puso en movimiento la lucha por una educación de calidad y el diálogo con el conjunto de la sociedad acerca de los procesos educativos.
Si bien en cuanto al tiempo de duración ha tenido un gran peso, el impacto de la huelga sobre la estructura social brasilera no ha sido tan amplio y no se han incorporado muchos sectores sociales a la discusión. Es dable destacar que la prensa, en su mayoría, ha hecho poca referencia al conflicto y la escasa información brindada omite los orígenes del reclamo docente.
La posición del Andes (Sindicato Nacional de Docentes de las Instituciones de Enseñanza Superior) es que la discusión salarial tiene que hacerse en base a un proyecto de carrera y no a un simple ajuste salarial con el fin de corregir las divisiones que generan desigualdades entre los docentes.
Por su parte, el Ministerio de Educación afirma que no va a reabrir las negociaciones. El organismo propuso a principio de mes un reajuste entre el 25% y el 40% que se aceptó por parte del Proifes (Federación de Sindicatos de Profesores de Instituciones Federales de Enseñanza Superior) pero que fue rechazado por el Andes.
Si bien el aumento salarial es una conquista de importancia, fundamentalmente si se tiene en cuenta las señales de desaceleración que vive la economía brasilera, se prioriza por parte del sindicato la restructuración de la carrera docente. En consecuencia, el reclamo apunta a la apertura de una negociación seria sobre la carrera y la discusión en torno a las causas que llevan a la precarización del trabajo docente, las condiciones de trabajo y las instituciones universitarias.
Durante el gobierno de Lula hubo un enorme crecimiento en el número de Universidades Federales, lo que fue una conquista histórica realizada a través del Programa de Apoyo a Planes y Restructuración y Expansión de las Universidades Federales. Sin embargo, esta expansión no se vio acompañada de los recursos necesarios para su implementación, lo que derivó en aulas abarrotadas, aumento de la carga horaria de los docentes, problemas edilicios, ausencia de residencias estudiantiles, hospitales y restaurantes universitarios tercerizados.
El Estado cumple sus compromisos con el modelo económico gastando fortunas para albergar eventos deportivos y adquiriendo equipamientos para la defensa bélica, pero sin dirigir las inversiones necesarias para la educación.
Tal manejo revela un proyecto de gobierno donde prima la lógica del mercado que busca adaptar la universidad a los intereses del capital monopólico. Dentro de esta lógica, se incita a las universidades a buscar recursos a través de lo privado, rompiendo con la autonomía universitaria y creando grandes desigualdades entre las unidades de la universidad, donde algunas cuentan con grandes recursos mientras otras se mantienen con lo mínimo necesario. Estas desigualdades no sólo se reflejan en cuestiones edilicias sino también en la producción académica y científica.
La incompatibilidad de los sueldos frente a la dedicación exclusiva de los docentes lleva a la degradación de la carrera y a crear una fuerte competencia por los recursos que se ofrecen por parte de las instituciones de fomento o mismo por las oportunidades del mercado.
En tal sentido, la lucha desatada a partir del paro busca una movilización en conjunto contra tales políticas de desarrollo dependiente que se proyectan en el país, tratando de construir un ámbito académico más participativo, democrático y popular.