Movilizaciones por justicia para Lucas Gargiulo: «nos tocan a une y nos tocan a todes»

Con esa consigna central, ayer por la tarde hubo movilizaciones en San Miguel de Tucumán y la Ciudad de Buenos Aires, en reclamo de justicia para Lucas Gargiulo, quien el 1 de mayo fue víctima de un asalto, golpes y una violación correctiva por parte de un grupo de hombres en Tucumán, por ser varón trans. En Tucumán hubo una movilización desde Plaza Urquiza a Plaza Independencia. «Todo el colectivo LGBT+ de la provincia está desprotegido», denunciaron. En tanto, en Capital Federal organizaciones se movilizaron hasta la Casa de la Provincia de Tucumán, donde también se hizo presente Eva Analía De Jesús («Higui»), quien se encuentra procesada por haberse defendido de una violación correctiva en el barrio en el que vivía. Por ANRed.

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En la ciudad capital tucumana las organizaciones se movilizaron bajo la lluvia desde la Plaza Urquiza a la Plaza Independencia, donde leyeron un documento consensuado. «Le puede pasar a une, nos puede pasar a todes – denunciaron – Esta vez le pasó a Lucas, nuestro compañero. El primero de mayo pasado fue brutalmente atacado a las 9:30 de la mañana, asaltado por tres hombres cis. Le robaron sus pertenencias, y no conformes con esto, comenzaron a golpearlo salvajemente suponiendo que era gay, le decían “puto, vení que te vamos a hacer machito” y procedieron a bajarle los pantalones mientras lo golpeaban, y al descubrir que era un chico trans la golpiza se convirtió en una violación correctiva. Fue abusado sexualmente con una rama», denunciaron.

Las organizaciones remarcaron que «estos atroces hechos ocurrieron en Italia y Paso de los Andes con cinco policías a una cuadra, que no hicieron nada, y a dos cuadras de la jefatura de policía. Cuando nuestro compañero fue a denunciar en la comisaría 6ta. sólo le tomaron la denuncia por asalto y agresión, argumentando que para tomarle la denuncia por violación tenía que estar presente la médica forense, y como no se encontraba en ese momento debía regresar al día siguiente, haciendo oídos sordos a su situación».

Unieron el ataque transfóbico con una serie de hechos que se vienen dando tanto en la provincia como en el resto de Argentina: «con esto rememoramos el caso de Ayelén Gómez, que fue asesinada en agosto de 2017, el asesinato de Cynthia Moreira, desaparecida y encontrada descuartizada y decapitada, el de Lourdes Reinoso, apuñalada hasta la muerte por su pareja. Hace sólo dos meses el caso de Juan, que fue golpeado y desfigurado por ser gay, a media cuadra de la comisaría. Y en estos momentos toda la comunidad LGBTI+ reclama absolución por Higui, que se defendió de sus violadores y fue procesada por la justicia. Estos son casos emblemáticos de tantos más de los que no tenemos conocimiento», sostuvieron.

Asimismo, consideraron: «las fuerzas de seguridad son nuestras enemigas, por acción o por omisión. No hay una efectiva capacitación a los agentes del orden para proteger nuestra integridad. El Estado sigue ignorando los reclamos de protección de nuestros derechos humanos: acceso a la salud, educación, a la justicia y a un trabajo digno. El poder legislativo votó por mayoría no tratar el proyecto de cupo laboral para personas trans, por considerar que la identidad de género disidente es solo una condición personal de la cual el estado no tiene que hacerse cargo. El proyecto duerme en algún cajón de la comisión de asuntos constitucionales de la legislatura más rica del país, mientras cada día son más las personas trans expulsadas de sus casas, de la escuela, trabajando en la calle, y que no pueden acceder al servicio de salud por ser discriminades», finalizaron.

«Tucumán: casa del aborto clandestino y la violación correctiva»

En tanto, en la Ciudad de Buenos Aires, organizaciones convocadas por la Red de Intersexuales, Transgéneros y Transexuales Argentinos (RITTA), se convocaron frente a la Casa de la Provincia de Tucumán, para replicar la movilización central que tuvo lugar en esa provincia. Allí señalaron a la provincia por ser una «casa del aborto clandestino y la violación correctiva».

Entre las personas que se movilizaron al lugar se encontraba también Eva Analía De Jesús, más conocida como «Higui», quien se encuentra procesada por haberse defendido de una violación correctiva en el barrio en el que vivía. Allí posó con un cartel reclamando por «Basta de transodio. Justicia para Lucas».

En su cuenta de Instagram el mismo Lucas Gargiulo se mostró contó por el apoyo brindado por Higui, un caso emblemático en toda la comunidad LGBT+.