Jujuy: de eso no se habla
El Teatro Mitre, teatro público estatal (y por tanto laico) de la capital jujeña ha censurado la presentación de «Réquiem Inducido», obra del colectivo teatral Circo Cromático, porque presenta el debate de distintas posiciones sobre el aborto y tiene a un cura también como personaje. Entrevista a Martín Mendoza, del Circo Cromático, sobre esta censura. Por El Foco Insurgente.
El Foco Insurgente: Estamos con Martín Mendoza, del Circo Cromático, que iban a presentar la obra Réquiem Inducido, en la sala Raúl Galán, sala pública del Mitre, obra que fue censurada ¿Como sucedió esto?.
Martín Mendoza: Nosotros habíamos pedido la sala, haciendo todo el recorrido administrativo que solicitan, presentamos la nota, nos dieron el “ok”, teníamos la sala para el día viernes 12 de abril. Y hoy nos llaman del teatro Mitre y no dicen que no íbamos a poder hacer la obra porque habían visto en la sinopsis que hay un personaje que es un cura y tenían miedo de que la propuesta resulte ofensiva para el clero, para la iglesia, para la gente que sigue a la iglesia, lo cual es terrible, es un acto de censura muy grande porque está haciendo uso del teatro como si fuese una propiedad privada, cuando en realidad su rol como funcionaria pública (se refiere a Silvia Inés Pieruzzi, administradora del teatro Mitre) es velar por las producciones artísticas, por la diversidad cultural, la pluralidad de voces… nosotros entendemos que es algo terrible lo que está haciendo.
EFI: La sala Raúl Galán es una sala de público acceso ¿No es así?
MM: Exacto, pertenece al Estado, a la provincia.
EFI: O sea que estamos hablando de una identificación, una identidad entre provincia e iglesia que va más allá de la postura laica que debe tener el Estado.
MM: Exactamente. Sí. Eso está pasando y lo que nos parece que le ha causado como cierto temor es que la propuesta de la obra de teatro consiste en un constante debate sobre la legalización del aborto en la República Argentina. Entonces hay personajes que representan a ciertos sectores, hay un personaje que representa al feminismo y hay un personaje que representa a la iglesia católica apostólica romana.Entonces calculamos que de ahí viene el miedo, de que es lo que se pueda llegar a decir, pero bueno, están haciendo un uso incorrecto del espacio porque no es ese su deber, su deber es otro.
EFI: ¿Que supone esta censura para el debate público de temas tan importantes como la cuestión del aborto?
MM: Se pueden hacer como muchas lecturas, quizás una de esas lecturas puede llegar a ser el miedo de lo que pueda llegar a decir un colectivo teatral independiente autogestivo que adhiere al movimiento feminista, al movimiento de la reivindicación y la visibilidad de las mujeres y de las identidades LGBT.Son un montón de cosas que a uno parece que empiezan a ver, a vernos, como una amenaza sobre un poder que en este momento tienen y no lo quieren perder.
EFI: Esta prohibición se presentó de manera oral ¿les ha llegado ahora oficiosamente algún papel respecto de ella?
MM: Todavía nada. Quedó simplemente allí. Pero lo bueno es la respuesta del público, de colegas artistas que se están acercando, se están comunicando a través de las redes sociales, no sólo ofreciendo el apoyo sino ofreciendo también ideas para nuevas intervenciones, ofreciendo espacios. La verdad que se ha generado una cuestión bastante grande. Lo bueno es el apoyo que estamos recibiendo del colectivo artístico independiente de Jujuy.