Dos años de recuperación. Bauen, un hotel que alberga solidaridades
El Hotel hoy autogestionado por sus trabajadores cumplió, el 21 de marzo pasado, dos años desde su ocupación. Formados en cooperativa hoy lo administran 100 personas. Pese a que aún no tienen figura jurídica, celebraron el aniversario con el auditorio colmado. Nadie de los presentes quiso perderse de escuchar esas voces que relataron cómo recuperaron el hotel, que además es utilizado como espacio de encuentro para las organizaciones obreras.
Pasadas las seis de la tarde del 21 de marzo, esta vez en el auditorio del Hotel que tantas veces fue prestado para conferencias de organizaciones obreras, reuniones de trabajadores ocupados y desocupados como para presentaciones de eventos culturales, fue testigo de la emoción que se vivió en el acto por la celebración de los dos años de lucha de sus trabajadores.
La conmoción y alegría que causó festejar la puesta en marcha de ese hotel que aún hoy sigue destilando esfuerzo y dedicación cotidiana, impidió a muchos de sus trabajadores terminar sus frases de agradecimiento a la presencia de todos aquellos que no quisieron perderse el festejo.
Dos banderas que aludían a la autogestión recordaban la disputa de los trabajadores para evitar el cierre del hotel. Una de ellas reclamaba «Expropiación definitiva ya». Lo cierto es que el hotel no tiene una figura jurídica que permita su explotación. Pero ello, no fue obstáculo para que los trabajadores festejaran la osadía de reabrir ese predio ubicado en el corazón de Buenos Aires. «Tenemos la fortaleza para seguir peleando, ahora por la ocupación temporaria y una vez que logremos ese paragua legal vamos a ir a pelear por la expropiación definitiva», explicó Fabio Resino, representante del Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas (MNER), quien estuvo a la par de la lucha de los trabajadores. Para ello hicieron circular entre las organizaciones un petitorio para recolectar firmas a favor de la expropiación. «Quisiera pedirles a nuestros gobernantes que se acuerden de nosotros.», imploró Gladys Alegre y Eva Losada agregó «Esto es bastante duro para nosotros. No somos políticos, somos simples trabajadores que estamos peleando por nuestra fuente de trabajo».
Con la presencia de más de 200 personas, un proyector con diapositivas fotográficas retrajo a los presentes al inicio del conflicto, mientras Fernando Arana, trabajador del Bauen, relataba a la par el proceso de toma y puesta en marcha del hotel. «Después de un año de estar en contacto con nuestros compañeros, nos asesoramos para formar la cooperativa. Fuimos a una reunión que teníamos en Chilavert (imprenta recuperada) y el 21 de marzo de 2003 decidimos tomar las instalaciones del hotel.» Tras la toma lograron que el Juez a cargo de la causa, Javier Dubois, les otorgara la custodia del inmueble. «Teníamos que estar simplemente ocupando las instalaciones sin tener ni siquiera dinero para comer. Pedíamos plata en los semáforos con las alcancías» En junio de 2004, cansados de que la justicia no les diera una respuesta, conocieron lo que es remontar una empresa. Referido a ello, Marcelo Ruarte presidente de la cooperativa exclamó: «estos procesos nos dan una libertad que nunca nos dieron»
«Un día como hoy, hace dos años, ingresamos aquí con el Movimiento de Empresas Recuperadas y la colaboración de asambleas», Fabio Resino hizo una síntesis de cómo fue tornándose el proceso: «Había un puñado de trabajadores con muchos temores, con muchas dudas de poder hacer funcionar esto, pero también con mucha esperanza de poder volver a recuperar el trabajo que habían perdido hacia un año y medio antes. Hace hoy dos años de ese día y hace 10 meses que en conjunto tomamos la decisión política de abrir este hotel, más allá de las decisiones judiciales y el gobierno laboral.
La propiedad del Bauen había sido vendida en 1997 al grupo chileno Solari S.A en 16 millones de pesos. Desde ese año el hotel fue administrado por el grupo quien hasta 2001 había pagado solamente la primera cuota por el inmueble. Inusitadamente ese mismo año la empresa quiebra. A raíz de eso, los Iurcovich, familia dueña original del hotel, reclamó al juez de la causa la restitución del inmueble amparándose en que la venta no terminó de efectuarse. El magistrado aceptó la solicitud pero condicionó a la familia a devolver la primera cuota que el grupo Solari había pagado, hecho que hasta el momento nunca se concretó.
Tras la quiebra el magistrado dictaminó que la empresa, bajo supervisación de un síndico, siga funcionado en manos de sus trabajadores. Sin embargo debido a que el hotel comenzó a procurar pérdidas, el 28 de diciembre de 2001 el síndico decidió su cierre. Durante el 2002 estuvo cerrado y sus trabajadores desocupados. Para finales de ese año, un grupo de ellos se contactó con el Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas y el 21 de marzo de 2003 realizaron la ocupación. Sin resquemores los trabajadores ingresaron por una puerta trasera y se encontraron con el abandono del lugar, la entrada principal tapiada, las habitaciones clausuradas, gran parte de los bienes durables precintados y todo el interior lleno de polvareda.
(…)» Cuando tomamos esa decisión éramos 32 compañeros y hoy hay más de 100 compañeros en esta cooperativa.», continuó relatando Resino. «Se pasó de una remuneración de 100, 200 pesos o lo que podíamos, a un salario promedio de 700 pesos. Cuando decidimos abrir el Bauen no lo hicimos solo pensando en llevarnos una renta personal, sino que discutimos para que todos aquellos trabajadores que estuvieran peleando, como así las organizaciones de desocupados, tuvieran este espacio como lugar de coordinación. Por eso es común ver en este mismo salón muchas veces a los trabajadores de subte discutiendo como pelear contra su patrona; a los desocupados, a las organizaciones populares y eso nos pone orgullosos. Hace dos años los compañeros de esta cooperativa no tenían experiencia sindical y mucho menos política. La semana pasada hacían cola para subir a un colectivo, viajar 1.200 km y estar al lado de los compañeros de Zanon que estaban siendo amenazados por el gobierno de turno».
Además se leyeron infinidad de adhesiones, entre ellas una de Venezuela, y contaron con el más variado espectro de militantes como así de diputados y personalidades que más allá de sus diferencias hicieron eco unánime en la defensa de ese hotel que alberga solidaridades.
Otras voces se hicieron oír
Las organizaciones presentes quisieron dejar sentado su compromiso y agradecieron fehacientemente la solidaridad que los trabajadores del hotel prestaron ante la necesidad de contar con un lugar para la organización obrera.
«Cuando llegábamos hoy, veíamos y pensábamos cuándo habíamos entrado la primera vez. Recordamos cuando estaba todo tapiado, que no había luz. Vemos lo que es el Bauen hoy y en lo que se transformado para los trabajadores argentinos y en especial para los de la capital federal, que lo ven como un punto de referencia, un punto de organización, un punto de solidaridad permanente y activ. Realmente nos sentimos muy orgullosos de poder participar junto con ellos y poder organizarnos acá adentro. Hace casi dos años que estamos reuniéndonos acá. En realidad nos sentimos parte de la casa.(…) Hace dos años cuando se plantearon reconstruir lo que la patronal había destruido, lo han logrado y con creces es lo opuesto ideológico a lo que había hecho la patronal del Bauen. Es una casa solidaria. Está nuestro compromiso de lucha.» (Beto Pianelli del Cuerpo de delegados de Subterráneo).
«Para nosotros también es un honor y algo muy especial. Los trabajadores del hotel siempre estuvieron con las puertas abiertas para distintas organizaciones. Cuando veníamos desde Neuquén a una movilización, a hacer un reclamo a Buenos Aires y no teníamos un lugar adonde parar, los compañeros del Bauen aún muchas veces sin luz, aún sin agua, como sea, nos albergaban. Para nosotros fue impresionante. Muchas veces cuando reclamamos, (en Buenos Aires), pasábamos por la fachada, los compañeros salían a la puerta y aplaudían también.(…) Recibimos con muchísima emoción la semana pasada cuando tuvimos amenazas de muerte, cuando habían secuestro a una compañera, ver bajar del colectivo una delegación de trabajadores y trabajadoras del Bauen. Fue importantísimo. No solo es la solidaridad de clase acá en el hotel, sino es salir del hotel y viajar 1200 km para llevar la solidaridad obrera. Para nosotros es la mejor fortaleza que tenemos. Es una fortaleza compartida. Hoy queríamos de alguna manera devolverle esta visita y renovar el compromiso». (Raúl Godoy, secretario del Sindicato Ceramista de Neuquén, trabajador de FaSinPat, ex Cerámica Zanon).
También hicieron uso de la palabra, Diego Kravetz, abogado del MNER, entre otras personalidades como así Jorge Euman de médicos identificados con el Bauen, cuya adhesión a los trabajadores se trasluce en brindarles apoyo terapéutico.
Para finalizar Eduardo Murúa, presidente del MNER, dio cuenta de la intención del movimiento en relación al resto de los sectores. «Un día en la argentina decidimos decirles que nunca más ibamos a soportar que nos estafen, que no ibamos a permitir que el destino que nos deparaba el sistema de ser desocupados estructurales para siempre, no lo íbamos a aceptar. Nosotros junto al Movimiento y a todos los trabajadores hemos recuperado casi 10 mil puestos de trabajo desde el 98 hasta hoy. Ahora nadie cuenta cuantos empleos hemos perdido. Acá hay 93 puestos de trabajo cuando no había nada, cuando se iba a derruir este edificio. Pero eso no alcanza y no va alcanzar mientras los trabajadores no nos organicemos para pelear por la destrucción de este sistema de mierda. No alcanza con el movimiento nacional de empresas recuperadas (…). No alcanza con un sindicato. (…)No podemos ser un movimiento que solo pelea por la recuperación de empresas. Vamos a tener que estar enfrentados a estos gobiernos (…) porque ellos están atados a ser gerentes del sistema, a ser gerentes del Fondo Monetario Internacional. No va a ser posible, sino nos unimos entre todos los trabajadores, desocupados y, organizaciones, crear las leyes necesarias para que no se pierda más un empleo en Argentina (…) No es casualidad que a pesar de lo que hicieron los trabajadores del Bauen y todas las empresas recuperadas no haya una sola política publica del Estado Nacional. Si ellos se creen que somos opositores por llevar las políticas que necesitamos para nuestro pueblo, bienvenido sea».
Al término del acto los presentes festejaron los dos años con un banquete al son de una banda de música.
Algunas de las organizaciones presentes fueron: integrantes del Movimiento de Empresas Recuperadas, MTR La Dignidad, UTP, Cuerpo de delegados de Subterráneos, Interbloque de izquierda, autoconvocados de escuelas técnicas, no docentes de la facultad de arquitectura, secretaría de extensión universitaria, Sasetru, trabajadores de Chilavert, trabajadores de Viniplast, trabajadores de Brukman, trabajadores de Adador, FaSinPat-ex Cerámica Zanon, trabajadores de Crometal, frigorífico La Foresta, Clínica IMECC, Democracia Obrera, PO, PTS y OSL, entre otras.
Para más información:
Hotel Bauen Cooperativa LTDA: 4372-1932
Av. Callao 360
Fabio Resino: 15-57590326