¿Podemos hablar de genocidio en Gaza?

El uso del término “genocidio” sigue siendo muy limitado en Francia, a menudo entrecomillado por la prensa y presentado como excesivo. Sin embargo, volviendo al derecho internacional, la relevancia del término para describir la masacre que se está produciendo desde el 7 de octubre en Gaza es clara. La oficina internacional de la Federación Internacional de Derechos Humanos también ha adoptado una resolución reconociendo las acciones de Israel contra el pueblo palestino como «un genocidio en curso». Por Ziad Majed. 

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Desde el inicio de la guerra israelí más brutal contra los palestinos en la Franja de Gaza, que siguió al ataque de Hamás contra soldados y civiles israelíes el 7 de octubre de 2023.1, muchos medios y gobiernos han hecho del derecho internacional y del derecho humanitario un punto de vista o una opinión expresada en el set por no especialistas.

Así, términos y conceptos tienen cada uno un significado muy preciso, como “crimen de guerra”, “crimen contra la humanidad”, “limpieza étnica” o “genocidio” se utilizan de manera indiferenciada para calificar determinadas situaciones o, más a menudo, para negar, por el contrario, la relevancia de estos usos. Nos esforzamos aquí por recordar las definiciones de los crímenes en cuestión, con el fin de examinar la aplicabilidad de estos términos a la guerra israelí en la Franja de Gaza.

Movilización de organizaciones internacionales

El derecho internacional y el derecho humanitario definen los crímenes de guerra con gran detalle. Los dividen en tres categorías, enumerando todas las posibles violaciones de los Convenios de Ginebra firmadas en 1949 que pueden ocurrir durante operaciones militares, ya sean conflictos de naturaleza internacional o nacional.

Podemos decir, por lo tanto, que cualquier asesinato intencional y cualquier ataque contra civiles como tales, o cualquier destrucción intencional de sus propiedades y de sus establecimientos hospitalarios, educativos y religiosos, o el hecho de exponerlos a la hambruna y negarles asistencia humanitaria ayuda ; cualquier ataque a gran escala contra ciudades o pueblos sin justificación militar, o cualquier maltrato o tortura de prisioneros, detenidos, no combatientes o incluso combatientes si deponen las armas  ; cualquier traslado o desplazamiento sistemático y forzado de poblaciones, o cualquier ataque injustificado contra centros y representantes de organizaciones internacionales, organizaciones de mantenimiento de la paz, organizaciones humanitarias ; y cualquier uso de armas prohibidas internacionalmente.

Por tanto, y teniendo en cuenta el artículo 8 del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI)2, organizaciones de derechos humanos y organizaciones humanitarias internacionales como Amnistía Internacional, Human Rights Watch, la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH ), Médicos Sin Fronteras, Médicos del Mundo o agencias de la ONU como la Agencia de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Medio (UNRWA) y Así, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha denunciado directa o indirectamente posibles crímenes de guerra, incluso contra su personal.

El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), por su parte, expresó su preocupación por las acciones y medidas militares israelíes prohibidas por el Convenio de Ginebra. Convenios y dos protocolos adicionales3, que podría explicarse por la magnitud de las violaciones. CICR

Crímenes de lesa humanidad, incluido el apartheid

En cuanto a los crímenes contra la humanidad, pueden ocurrir durante operaciones militares o fuera de ellas, es decir fuera del contexto de guerra. Incluyen, según el artículo 7 del Estatuto de Roma:

a) asesinato ;

b) exterminio ;

c) esclavitud ;

d) deportación o traslado forzoso de población ;

e) prisión u otra forma de privación grave de la libertad física en violación de disposiciones fundamentales del derecho internacional ;

f) tortura ;

g) violación, esclavitud sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, esterilización forzada o cualquier otra forma de violencia sexual de gravedad comparable ;

h) persecución de cualquier grupo o colectividad identificable por motivos políticos, raciales, nacionales, étnicos, culturales, religiosos o sexistas en el sentido del párrafo 3, o sobre la base de otros criterios universalmente reconocidos como inadmisibles según el derecho internacional , en relación con cualquier acto mencionado en este párrafo o cualquier crimen dentro de la competencia de la Corte ;

i) desapariciones forzadas de personas ;

j) crimen de apartheid ;

k) otros actos inhumanos de carácter similar que causen intencionadamente grandes sufrimientos o graves daños a la integridad física o a la salud física o mental.

Una vez más, se puede decir que hay pruebas que confirman la legitimidad de las acusaciones de que Israel está cometiendo y ha cometido crímenes contra la humanidad, ya sea en la actual guerra contra Gaza, especialmente “actuando como un ataque generalizado o sistemático”. «  lanzado contra la población civil y con conocimiento de este ataque »de carácter similar que causen intencionalmente grandes sufrimientos o daños graves a la integridad física o la salud física o mental [de civiles]“   y actos inhumanos o en Cisjordania y Jerusalén Este, bajo las cláusulas que se refieren al apartheid.

Politicidio, urbicidio y domicidio

Entre los crímenes de guerra, los crímenes contra la humanidad por un lado y el crimen de genocidio por el otro, la ciencia política por su parte ha desarrollado términos construidos a partir del sufijo de origen latino “  cidio ”4 que se refiere al asesinato, para designar un sistema criminal practicado por un Estado o un actor poderoso contra sus enemigos con el fin de “ ejecutar ” políticamente o “ borrar ” sus esferas públicas y privadas.

Así, el término “politicidio” apareció en los años 1970 para referirse a la destrucción de grupos de personas que compartían una identidad política común (y no necesariamente una identidad étnica o “ racial ”). Luego evolucionó para describir acciones destinadas a destruir los elementos materiales que permiten que exista una entidad política. El término se utilizó, por ejemplo, para describir la política israelí hacia los palestinos en el período previo y durante la Segunda Intifada en 2000, cuando el objetivo claro de Israel era destruir las condiciones para la existencia misma de los palestinos: un Estado palestino. Esta política, por supuesto, continúa hoy.

Hace años, el término “ urbicida ” se usaba ampliamente para referirse a atacar espacios urbanos con el fin de destruirlos o convertirlos en inhabitable durante largos períodos. Se sugirió describir los ataques rusos en Grozny en 2001 durante la Segunda Guerra Chechena, los ataques israelíes en uno de los suburbios del sur de Beirut en 2006 durante la guerra con Hezbollah, y los ataques del régimen de Bashar Al-Assad y luego de Rusia en Homs y el este de Alepo en Siria entre 2012 y 2017. Por supuesto, este término ahora se menciona nuevamente en la guerra israelí contra Gaza.

Más recientemente, algunos académicos han adoptado el término “ domicidio ” para designar una política israelí aún más dura hacia los palestinos, que apunta a sus relaciones íntimas. lugares de residencia (hogares), con el fin de impedirles tener una existencia estable en un espacio definido por sus características geográficas y emocionales y sus símbolos públicos y privados, y convertirlo temporalmente (al trasladarlos constantemente) a parte integral de su vidas.

Todo esto, por supuesto, nos lleva poco a poco a hablar de la cuestión más controvertida entre los políticos y evitada – por miedo a represalias – entre algunos juristas y académicos, a saber: ¿Cuál es la definición del delito de genocidio, con todas las sus significados cargados de historia y recuerdos, se aplica actualmente a la situación en la Franja de Gaza ?

demostrar intención

El genocidio se define en la primera convención internacional contra el genocidio, adoptada en 1948 por la Asamblea General de las Naciones Unidas y entró en vigor en 1951, luego en varios textos de la ONU y en el Estatuto de Roma (artículo 6) como tal:

Genocidio significa cualquiera de los siguientes actos cometidos con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como por ejemplo:

a) asesinato de miembros del grupo ;

b) daño grave a la integridad física o psíquica de los miembros del grupo ;

c) sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia destinadas a provocar su destrucción física total o parcial ;

d) medidas destinadas a prevenir los nacimientos dentro del grupo ;

e) traslado forzoso de niños del grupo a otro grupo.

Además, la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio (ratificada por 153 Estados) especifica que “ se puede cometer genocidio contra sólo una parte de un grupo, siempre que sea identificable (incluso dentro de un área geográficamente limitada)» 5.

Basándonos en lo que se ha documentado e informado, y mirando retrospectivamente el alcance de los bombardeos destructivos filmados y los ataques directos contra los palestinos en un área específica mediante asesinatos, asedios y torturas con efectos físicos, psicológicos y mentales colectivos, la aniquilación de las condiciones de vida por el corte total o parcial de agua, electricidad, combustible y comunicaciones ; por el asedio y la imposibilidad total o parcial de la entrada de ayuda humanitaria -alimentaria y médica- y por los ataques a hospitales y ambulancias y las muertes de pacientes y niños por la imposibilidad de tratarlos, es posible evocar varios elementos concluyendo con la implementación por parte de Israel de un genocidio en Gaza.

Según el Ministerio de Salud en Gaza, el número de víctimas de los ataques israelíes al 11 de diciembre de 2023 muestra 18.205 muertes, incluidos más de 7.000 niños y 5.000 mujeres, con más de 7.000 desaparecidos bajo los escombros o aislados o desplazados sin medios de contacto y más de 49.000 heridos. Según estimaciones del gobierno de Gaza, el 60 % de las casas de la franja están destruidas o dañadas, 262 mezquitas y 3 iglesias han sido atacadas. Finalmente, 27 hospitales y 55 centros de salud, así como 55 ambulancias, fueron bombardeados y en muchos casos quedaron fuera de servicio. Las Naciones Unidas y las organizaciones humanitarias han perdido más de 100 empleados, médicos y funcionarios públicos a causa de los bombardeos israelíes. También murieron ochenta y seis periodistas, a veces directamente atacados por fuego israelí.

Sin embargo, para que un genocidio sea reconocido como tal, debe demostrarse la intención de cometerlo. A menudo este elemento es el más difícil de establecer, porque será necesario demostrar que los autores de los actos en cuestión tenían la intención de destruir físicamente a un grupo o parte del grupo (nacional, étnico, racial o religioso). Por tanto, la jurisprudencia asocia esta intención a la existencia de un plan o política deseada por un Estado o entidad.

Algunos juristas consideran que las declaraciones oficiales israelíes y los llamamientos explícitos a la venganza y a los asesinatos contra los palestinos (como palestinos) son decisiones claras para fortalecer el asedio de Gaza al enumerar materiales cuya entrada está prohibida, como lo hizo el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, en octubre. El 9 de septiembre de 2023, sabiendo que no es posible la vida sin estos materiales (agua, electricidad, combustible, etc.), así como la implementación de todo esto por parte del ejército israelí, prueban el deseo de aniquilación y de pasar de la declaración a la ejecución. A esto se suma la presencia de una repetitiva “ tendencia genocida ” en los discursos oficiales del gobierno de Benjamín Netanyahu y de ciertos diputados de su mayoría – así Muchos discursos filmados y transcritos en la prensa. Por ejemplo: invocar una“ guerra contra las fuerzas del mal y la barbarie ”,  deshumanizar a los palestinos y llamarlos animales, afirmar que no hay civiles en la pandilla o afirmar que sólo hay “  », etc.”,gran campo de fútbol“ llama a utilizar armas nucleares contra los habitantes de Gaza si es necesario y deportar a los supervivientes a Egipto (y otros países), destruir Gaza y transformarla en partidarios de Hamás«   y »terroristas de Hamas  

Recordando la clara presencia de esta intención de cometer genocidio por parte de Israel y “ el paso a la acción» , El historiador israelí Raz Segev, especialista en el Holocausto, fue el primero en señalar que estábamos ante un caso de genocidio de libro de texto 6.

El director de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos en Nueva York, el abogado Craig Mokhiber, renunció a su cargo para protestar contra el silencio frente a «una amenaza genocida contra la población palestina“ En la misma línea, nueve Expertos de la ONU advirtieron que la violencia militar israelí y las intenciones de ciertos funcionarios en Tel Aviv constituyen.» un caso típico de genocidio en Gaza  7.

Por su parte, el exfiscal de la CPI, Luis Moreno Ocampo, confirmó que los crímenes cometidos por Israel podrían constituir un caso de genocidio 8.

Docenas de académicos palestinos y árabes, africanos, asiáticos, estadounidenses y europeos también han publicado artículos de opinión y comunicados de prensa en las últimas semanas evocando posiciones similares. Además de las solicitudes que algunos de ellos han dirigido al Fiscal de la CPI para que investigue estos crímenes, cinco Estados (Sudáfrica, Bangladesh, Bolivia, Comoras y Yibuti) recurrieron oficialmente a la Corte para“< /span>»exigir una investigación sobre posibles crímenes israelíes en Gaza y los territorios palestinos  9.

Cabe añadir que la mayoría de los Estados y dirigentes políticos prefieren evitar el uso del término “ genocidio ”, para no tener actuar, de conformidad con el Convenio que han firmado, para “ prevenirlo ” o para “ poner fin inmediatamente ”. Lo cual, por supuesto, no está en su agenda.

Finalmente, es posible decir que ningún conflicto anterior documentado ha concentrado tantos crímenes, violaciones y atrocidades en un área geográfica tan restringida, de aproximadamente 360 ​​km², y en un período tan corto. Esto revela aún más la “ naturaleza genocida ” de esta guerra, y en sí mismo merece una mayor reflexión. Esto puede verse como una señal de crecientes posibilidades de una escalada de la brutalidad y de violaciones a gran escala del derecho internacional humanitario en futuras guerras. Un riesgo que parece contradecir lo que cabría esperar debido a la evolución de la legislación, pero también a “ la abundancia ” de reportajes en vivo y documentación visual de los hechos.

Tomado de orientxxi.info

Traducción al castellano tomada de 1resisto.