Alemania: Berlin votó a favor de la expropiación de los especuladores inmobiliarios

Tras el constante aumento de los alquileres y la escasez de viviendas disponibles, la iniciativa «Expropiemos a Deutsche Wohnen y &» cristalizó el descontento popular con la recolección de más de 33.000 firmas y luego el exitoso referéndum que decidió expropiar 240.000 viviendas pertenecientes a corporaciones inmobiliarias para transferirlas a la propiedad pública. Por Ana Muro, corresponsales de ANRed en Alemania.

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Luego de años de trabajo, manifestaciones, charlas informativas, debates para concientizar a la gente, la iniciativa «Expropiar a Deutsche Wohnen & Co, ganó el referéndum con un 59 %  a favor y  39 % en contra.

El voto no es obligatorio, sin embargo tuvo una  participación del 75%. El pasado 29 de septiembre se celebraron las elecciones federales, paralelamente también se eligieron dos parlamentos estatales: en Berlín y en Mecklemburgo-Pomerania Occidental. Los berlineses no sólo votaron al Bundestag y a la Cámara de Representantes, también votaron en relación a la iniciativa «Expropiar Deutsche Wohnen & Co».

Como era de esperar las zonas más pudientes como Steglitz-Zehlendorf obtuvo el menor apoyo, con un 44,0%.  El mayor número de votos afirmativos se alcanzó en Friedrichshain-Kreuzberg (zonas alternativas), con un 72,4%, y en Mitte, con un 63,7%.

Ahora serán los políticos los que deberían poner en práctica el referéndum. Mucho depende quien gobernará Berlín. De cómo será formada la coalición. El Partido de la Izquierda, que no hizo una buena campaña, fue el único que apoyó realmente la causa de la iniciativa. Va a ser difícil contar con el apoyo ya que muches se pronunciaron definitivamente en contra de la propuesta como los partidos derecha, neoliberales y ultra derecha (CDU; FDP; AFD). Todos los demás partidos ya han expresado sus preocupaciones jurídicas y fácticas con respecto al referéndum.

Taheri, portavoz de la iniciativa declaró «Es un resultado claro y un voto claro del pueblo a favor de la expropiación». «Queremos expulsar a los especuladores y a los tiburones inmobiliarios de esta ciudad», dijo Taheri, y añadió: «Espero que la próxima coalición, sea como sea entonces, escriba en su acuerdo de coalición una hoja de ruta clara para elaborar una ley de socialización y empiece a prepararla inmediatamente.»

No se trata de una expropiación clásica, en la que, por ejemplo, hay que ceder un terreno privado para que se construya una calle pública. La propuesta tiene como objetivo la llamada socialización de la vivienda, es decir, lograr el bien común en lugar de los beneficios.

En principio, el artículo 15 de la Ley Fundamental (Constitución Nacional) lo hace posible.

«La tierra, los recursos naturales y los medios de producción pueden, a efectos de socialización, ser transferidos a la propiedad común o a otras formas de economía común mediante una ley que regule la naturaleza y el alcance de la compensación»

«Mediante la socialización, el sector público puede hacerse cargo de empresas enteras o incluso de sectores de la economía del sector privado. La idea detrás de esto: Garantizar que la atención no se centre en el lucro, sino en los intereses del bien común».

«La vivienda y los alquileres» fue uno de los temas más destacados de la campaña electoral en Berlín, y todos los partidos adoptan una posición al respecto. Es uno de los temas más candentes del país. El 80 % de los alemanes viven en casas alquiladas y han sufrido no solo los aumentos, desalojos, sino también la falta de casas. Principalmente en las grandes ciudades como Berlín, esta problemática es insostenible. Mucha gente está buscando casa desde hace ya años y no consiguen cambiar su suerte. Muches alquilan casas por tiempo determinado, por una semana o un mes, pero sufre no sólo lo engorroso que significa una mudanza, sino también que pagan mucho más por su urgente necesidad. No solo los grandes conocidos usureros se han beneficiado de la necesidad de la gente, también algunes propietarios que poseen algunas casas, han tomado también provecho de la situación.

La socialización de los pisos sería una novedad. Nunca ha habido una socialización de la vivienda en la historia de la República Federal de Alemania. Los juristas coinciden en que el objeto de la socialización no debe tener fin de lucro. Por lo tanto, las pequeñas empresas quedan descartadas., como también las Wohngemeinschaft(cooperativas) La iniciativa «Expropiar a Deutsche Wohnen & Co.» quiere la socialización de todas las empresas de alquiler propietarias de más de 3.000 pisos.

Puntos en controversia

Berlín es una ciudad autónoma, que se encuentra en la región de Brandenburgo. No está claro si la ley federal prevalece sobre la ley estatal. Algunos juristas ven un problema en el hecho de que la Constitución estatal de Berlín -a diferencia de la Ley Fundamental- no prevé la socialización. Por lo tanto, argumentan, que es inadmisible en Berlín.

Otros contraatacan con la regla de que «la ley federal rompe la ley estatal». Sostienen que la Constitución Federal, con su posibilidad de socialización, tiene prioridad sobre la constitución estatal de Berlín.

También se discute si, por razones de igualdad de trato, las empresas de alquiler organizadas de forma cooperativa (Baugenossenschaft) también deben ser socializadas. Los iniciadores del referéndum no quieren esto. Sostienen que los modelos cooperativos están orientados al bien común, por ello quedan descartados.

Las asociaciones empresariales de Berlín-Brandeburgo, por su parte, hablan de un acto de arbitrariedad que ahuyentaría a los inversores y arruinaría las finanzas del Estado. «La aprobación del referéndum no hace avanzar ni un milímetro el mercado inmobiliario de Berlín», también los que argumentan en contra dicen que  los Costes de las indemnizaciones será de más de 28.000 millones de euros. Y por último declaran que el referéndum no tiene poder legal

Al mismo tiempo, se alcanzó el quórum mínimo necesario para la aprobación de una cuarta parte de los votantes elegibles. Según el texto de la resolución, el Senado de Berlín debe ahora «iniciar todas las medidas» necesarias para transferir los bienes inmuebles a la propiedad común y elaborar una ley a tal efecto.

Sin embargo, el voto no es legalmente vinculante para los políticos. Esto se debe a que la votación no fue sobre un proyecto de ley concreto que fue aprobado directamente por un referéndum exitoso sería, sin embargo, el nuevo Senado y la recién elegida Cámara de Representantes, tendrán que ocuparse de la votación.

Según el texto del referéndum de Berlín, el futuro Senado está llamado a elaborar una ley para la socialización de unos 240.000 pisos en Berlín. La iniciativa se dirige actualmente a una docena de empresas inmobiliarias, entre ellas se encuentran Deutsche Wohnen, Vonovia, etc.

Según miembros de la iniciativa, se acompañará intensamente las próximas negociaciones de la coalición. «No aceptamos ni estrategias dilatorias ni intentos de interceptación. Desconocer el referéndum sería un escándalo político. No descansaremos hasta que se lleve a cabo la socialización de las empresas de vivienda», afirma Kalle Kunkel, portavoz de la iniciativa.

Además, la iniciativa podría imaginar otro referéndum, dijo su portavoz Rouzbeh Taheri en Berlín el lunes. En este caso, la población podría votar directamente un proyecto de ley. «La democracia directa también tiene la posibilidad de impulsar una ley por sí misma», dijo Taheri. «Esa no es nuestra intención por el momento, pero es una de las posibilidades que tenemos abiertas».

La Corte dictaminó que es inconstitucional el límite del precio del alquiler

Lamentablemente el Tribunal Constitucional Federal ha juzgado el 25 Marzo 2021 en contra del tope de los alquileres que ya se había estipulado por 5 años. Esto se traduzco a que millones de damnificados que estaban pagando el precio real de sus casas, tengan que devolver la diferencia nuevamente a los usureros de las corporaciones. Mucha gente pagaba hasta la mitad, que es su verdadero y justo precio.

La noticia sorprendió a todes. La ley para limitar los alquileres en el sector de la vivienda en Berlín es incompatible con la ley Fundamental y, por lo tanto, nula justificaron los jueces de Karlsruhe (Ref.2 BvF 1/20 y otros). Con esa Ley (MietenWohg Bln) del límite de alquileres único en todo el país el Senado rojo/verde (Linke/Grün) quería frenar el fuerte aumento de los alquileres en Berlín.

Desde Febrero de 2020, la ley, ahora declarada nula, había congelado los alquileres de 1,5 millones de departamentos, cuya construcción haya sido antes de 2014 al nivel de Junio de 2019. Si una casa se vuelve a alquilar. Si una casa se volvía a alquilar, el propietario tenía que respetar los límites máximos que se basan en la antigüedad del inmueble), el equipamiento que tenía y la ubicación, así como el último alquiler cobrado. Desde el 23 de noviembre de 2020, la ley también prohíbe los alquileres que superen en más de un 20% los límites máximos y que, por tanto, se consideren excesivos. El propietario tuvo que reducirlas bajo pena de fuertes multas.

¿Cómo actuará el nuevo gobierno?

La principal candidata del SPD de Berlín, Franziska Giffey, quiere respetar el éxito del referéndum. «Ahora hay que redactar también ese proyecto de ley», declaró a Inforadio de rbb. «Pero este proyecto también debe ser examinado constitucionalmente». El futuro Senado tendría que examinar con mucho cuidado lo que es constitucionalmente posible. Berlín no debe recibir otra sentencia negativa del Tribunal Constitucional Federal, advirtió Giffey. El más alto tribunal alemán ha anulado recientemente el límite de alquiler de Berlín.

Según la principal candidata del Partido Verde, Bettina Jarasch, el Senado debe tomarse en serio el resultado del referéndum. «Esto pertenece a las negociaciones de la coalición», dijo Jarasch a la Deutsche Presse-Agentur. Añadió que los políticos deben examinar ahora si es factible aplicar el voto ciudadano para la expropiación. «Sin embargo, aún quedan muchas cuestiones jurídicas y prácticas por aclarar para una ley de este tipo». Jarasch promovió su concepto de «paraguas de protección de los alquileres», es decir, un pacto voluntario entre políticos, propietarios y otras partes interesadas para la nueva construcción y los alquileres justos, como alternativa. «Las empresas inmobiliarias tienen esto en sus manos», dijo

El Partido de la Izquierda de Berlín considera que el voto positivo es un claro mandato para los políticos. «No se puede pasar de ahí», dijo el lunes la presidenta del Estado, Katina Schubert, a la Deutsche Presse-Agentur. «Ahora hay que poner a trabajar a los mejores abogados para redactar una ley que funcione con seguridad jurídica. Esa es la tarea del nuevo Senado».

Génesis del conflicto

Berlín siempre fue conocida a nivel mundial por ser la capital más alternativa y económica del mundo. Esa caracterización hace ya unos 11 años está en desuso lamentablemente. En los 90 seguía siendo una ciudad barata, con un mercado inmobiliario relajado y económico, fuertemente regulado y con  una cantidad suficiente de casas en oferta. Pero este panorama cambia en el 2010 con un denso mercado, aumento de precios y falta de regulación. Además se suman el aumento demográfico enorme (sobre todo refugiados) y las reacciones del mercado, todo eso conlleva a que se empiecen a comprar edificios enteros con dinero principalmente extranjero proveniente de dubioso origen.

Entonces Berlín pasó de ser la ciudad alternativa para convertirse en un centro  atractivo para la especulación inmobiliaria. De hecho el monopolio inmobiliario está en manos de 2 grandes corporaciones (Deutsche Wohnen, Vonovia).Una de ellas es el coloso Deutsche Wohnen que ha tenido ganancias desmesuradas, a pesar, de no cumplir con sus obligaciones. Sus inquilinos tienen grandes quejas del estado deplorable en que se encuentran las casas en alquiler, de nunca realizar las reparaciones necesarias a pesar de cobrar precios irrisorios. Desde 2010 figura en la bolsa MDAX y en 2020 ingresó a la DAX. Posee 155.400 departamentos, (114.200 se encuentran en Berlín) y 2900 inmobiliarias que a su vez posen más de 10.00 puestos sanitarios y  de cuidados.

El Senado de Berlín compró 14.750 departamentos para bajar el precio de los alquileres, pero los compró el doble de lo que los había vendido a Deutsche Wohnen.

Tope en todo el país

La última manifestación fue multitudinaria. A pesar de la lluvia, más de 30.000 manifestantes de todo el país colmaron la puerta de Brandemburgo hasta la Columna de la Victoria. El referéndum nunca hubiera sido posible sin la estratégica campana de la iniciativa, que recolectaban firmas hasta en los parques. Todo el sector de izquierda abrazó la iniciativa y apoyó la causa.

Esperemos que el nuevo gobierno ponga en práctica el referéndum y la nueva ley a redactar sea en beneficio a los inquilinos y que contagie a otras ciudades y países del mundo.