06/07/2021

Palestina: la historia de Juana Ruiz, otra presa de Israel

Foto: Europa Press

Juana Ruiz Sánchez es española, tiene 62 años y coordina la ONG palestina Health Work Committees (HWC), Comités de Trabajo para la Salud. Está detenida hace tres meses en una cárcel israelí de manera ilegal, acusada de desviar fondos de la organización humanitaria de la que participa, hacia el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), el cual es considerado por el Estado de Israel como una organización terrorista. En el mes de mayo un juez israelí decidió negar la libertad condicional a Juana. El juez dictaminó que estará presa hasta el final de su juicio, que se iniciará el próximo 7 de julio. Por ANCAP.


La detención fue llevada cabo en la madrugada del 13 de abril, irrumpieron en su casa de Beith Sahur (Cisjordania), cercana a la ciudad de Belén, el allanamiento a su hogar fue brutal, como lo acostumbra este ejército de ocupación, con más de 20 soldados armados hasta los dientes. Juana fue llevada al cuartel militar en Hebrón y más tarde a la cárcel de hombres de Hasharon, lo que la imposibilitó de poder salir al patio. Hasta el cierre de esta nota continúa sin la posibilidad que se le permita recibir algún familiar en la cárcel.

Foto: Alqudsandulucia.org

La activista de DDHH reside en Cisjordania hace 35 años con su compañero de vida  Elías Rishmawi, y tiene un fiel compromiso con el pueblo palestino que padece la represión y la ocupación de Israel en su territorio. En el inicio del mes de marzo el ejército de ocupación detuvo al Responsable del Departamento de Contabilidad de HWC, Tayseer Abu Sharbak, integrante de la ONG donde participa Juana y confiscaron varios dispositivos de almacenamiento del disco duro de las PC del lugar. El ejército la interrogó durante tres días durante 12 horas cada jornada, el maltrato hacia ella fue plasmado en cada día de interrogatorio, Juana no maneja al cien por cien el idioma árabe y hebreo, solo uno de los días estuvo presente una traductora.

Foto: Alqudsandulucia.org

La ONG llevó a cabo proyectos sanitarios en las aldeas de Cisjordania, con campañas de vacunación, y promoción de la salud prenatal y natal de las mujeres de esta ciudad, como así también prevención de las enfermedades mas regulares de esta zona de Palestina y la atención gratuita de al menos el 40% de los y las pacientes en el territorio que está bajo la Autoridad Palestina. El estado de Israel por su parte aduce que los fondos que llegan a esta organización humanitaria son para actividades ilegales y sugirió además que forman parte de la Junta Directiva de una organización ilegal.

Es muy importante tener en cuenta que no existen cargos o pruebas concretas que prueben lo que el ejército israelí busca demostrar de la activista española. Es una presa política y están violando, una vez más, los Derechos Humanos, esta muestra de violencia y cercenamiento de los derechos a una organización humanitaria denota el objetivo que tienen de frenar el avance de ayuda social al pueblo palestino.

Gabi Lasky es la abogada de Juana y pudo visitarla recién el día 1 de junio, las autoridades militares de Israel en ningún momento dieron aviso de la detención al Consulado español en Jerusalén, a pesar  de tener la obligación de hacerlo por ser ciudadana española. Durante las primeras 24 hs la activista estuvo presa sin ningún cargo que le hayan atribuido. Fue interrogada sin la posibilidad de un abogado/a presente, pasaron 17 días hasta que ella pudo recuperar sus pertenencias. Desde organizaciones de Derechos Humanos en España reclamaron al gobierno español un mayor compromiso para exigir la libertad de Juana.

SIN DERECHOS HUMANOS

Desde la organización Amnistía Internacional denunciaron en los últimos días: “La policía israelí ha cometido una serie de violaciones de los derechos de la población palestina en Israel y en la Jerusalén Oriental ocupada al llevar a cabo una campaña represiva discriminatoria que incluye detenciones generalizadas masivas, el uso de fuerza ilegítima contra manifestantes pacíficos y el sometimiento de las personas detenidas a tortura y otros malos tratos durante y después de las hostilidades armadas en Israel y Gaza. El equipo de investigación de Amnistía Internacional habló con 11 testigos y el Evidence Lab del Programa de Respuesta a las Crisis de la organización verificó 45 vídeos y otras formas de medios digitales para documentar más de 20 casos de violaciones de derechos cometidas por la policía israelí entre el 9 de mayo y el 12 de junio de 2021. Centenares de palestinos y palestinas han resultado heridos como consecuencia de la represión, y un adolescente de 17 años murió por disparos”. Según advierte el grupo de Derechos Humanos en Palestina Mossawa, hasta el 10 de junio la policía israelí detuvo a 2.150 personas, más del 90%  eran ciudadanas palestinas de Israel o habitantes de Jerusalén Oriental. Las causas de estas detenciones están vinculadas a “insultos hacia algún policía” o ser parte de una “reunión ilegal”. Desde Amnistía comprobaron en el lugar el uso excesivo de la fuerza del ejercito israelí a la hora de dispersar protestas del pueblo palestino que resiste los desalojos forzosos en Jerusalén Oriental y en Gaza con bombardeos hasta hace pocas semanas. Otro dato no menor que reveló la organización de DDHH es que “29 mensajes de texto y audio de canales abiertos de Telegram y WhatsApp revelan el uso de estas aplicaciones para reclutar a hombres armados y organizar ataques contra la población palestina en ciudades con población judía y árabe como Haifa, Acre, Nazaret y Lod entre el 10 y el 21 de mayo”.

En la historia de este conflicto, desde 1948 el estado israelí desalojó de su propia tierra a 750 mil personas de origen palestino, que pasaron a ser refugiados y refugiadas con el padecimiento que eso significa. A pesar del reclamo expuesto por la ONU, Israel continúa con la ocupación en territorio palestino, con un altísimo nivel de violencia y de opresión. Según advierte el Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO) en la actualidad son entre 6 y 10 millones los y las palestinas que tienen obturado su derecho a poder volver a sus hogares y su tierra natal. En abril de este año la  reconocida ONG de DDHH Human Rights Watch, afirmó que Israel es un Estado de apartheid, lo que significa que ejercen crímenes contra la humanidad. Por último para completar la violencia de los colonos israelíes, son responsables de la muerte de más de 2000 niños y niñas palestinas desde el año 2000 a esta parte. El negacionismo de gran parte del mundo por los hechos atroces que sufre el pueblo palestino y el apoyo desmedido de varios países y referentes mundiales con Israel hacen que este genocidio no tenga un freno.

Fuente: https://noticiasancap.org/2021/07/04/palestina-la-historia-de-juana-ruiz-otra-presa-de-israel/



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