01/11/2020

Luego de Guernica se profundiza la ola de desalojos y amenazas contra los sin techo

La imagen fue tomada por los periodistas de Dar La Nota, Adrián Almonacid y Daiana Larrat, quienes fueron detenidos y golpeados por la policía durante el desalojo en el Barrio La Esperanza en General Roca.

Tras el desalojo efectuado en Guernica por parte de 4 mil efectivos al mando de Sergio Berni, ayer, se produjo el desalojo de las 52 familias del Barrio La Esperanza en Fiske Menuco (General, Roca, Rio Negro). En el barrio Sin Fronteras, en Chubut, la policía ingresó sin orden de allanamiento en un asentamiento que hace dos meses decidieron ocupar 56 familias ante la falta de vivienda. En el conurbano bonaerense, en Rafael Castillo, barrio Las Flores, las vecinas y vecinos llamaban a la solidaridad ante un operativo policial que rodeaba el predio. Desde hace semanas las fuerzas policiales vienen hostigando y han quemado casillas. En Escobar, 60 familias, resisten a un desalojo que ya tiene fecha para el 3 de Noviembre. Por ANRed | imagen de tapa: Adrián Almonacid y Daiana Larrat (DarLaNota).


 

El pasado 28 , el Gobierno abandonó la mesa de diálogo que venía sosteniendo con los delegados y delegadas de Guernica y organizaciones que acompañaron la toma durante 100 días. Con el aval del gobierno de Alberto Fernández y de Axel Kicillof, 4 mil efectivos al mando de Sergio Berni, ordenados por el juez MIguel Martin Rizzo, y a pedido del fiscal de la selfie, Juan Cruz Condomí Alcorta, concretaron el desalojo de las 1440 familias, entre las cuales 3 mil niños. Apenas pasadas horas de la brutal represión, los desalojos y amenazas en distintas parte del país se profundizaron. Lo cierto es que antes y después de Guernica, la respuesta represiva al déficit habitacional, que se agrava en medio dela pandemia y la crisis económica, es la regla general. Así lo manifiesta Sergio Berni: » todas las noches impedimos la toma de terrenos, 2 o 3 veces por noche en promedio»

El día después de Guernica

«¿Empezar por los últimos»? Alrededor de las 6hs de ayer, en el barrio la Esperanza, en Fiske Menuco, Rio Negro, el Cuerpo de Operaciones Especiales y Rescate (COER) , más policía montada, avanzaron con topadoras y balas de goma, quemaron casillas y desalojaron a las 52 familias que habitaban el predio desde junio. El fiscal Ricardo Romero y el juez de garantías Gustavo Quelin, dieron lugar así al pedido de desalojo efectuado por la Asociación Patriótica Tiro Federal. Propiedad que le fue cedida a dicha entidad, de manera fraudulenta por el interventor Fernando Zarraga, durante la última dictadura. «Sacaron a las mamás con los bebés a balazos de goma, la intendenta María Emilia Soria ( FdT) y la gobernadora Arabela Carrera (Juntos somos Rio Negro) son responsables» Afirmaba un testigo en el lugar de los hechos. El saldo fue: decenas de heridos y alrededor de 12 detenidos, entre ellos el histórico dirigente docente y militante del Nuevo Más, Aurelio Vázquez; dos trabajadores de prensa del medio » Dar la Nota» golpeados por la policía y 52 familias sin techo nuevamente. En Chubut, en el barrio Sin Fronteras, desde Septiembre, 56 familias realizaron la toma de un predio, que afirman hace 25 años, está sin habitar y es afectado por la tala indiscriminada de cipreses centenarios. «Somos 56 familias nacidas y criadas en El Bolsón que nos vemos obligados a buscar un terreno para dar dignidad a nuestras familias ya que los precios del mercado son inalcanzables por la crisis social y económica que afecta a todo el mundo debido a la pandemia del covid-19.» Informaron a través de un comunicado. Las tierras son reclamadas por el Municipio como fiscales, sin embargo en la fiscalía del Hoyo, una denuncia por parte de Emilio Pedro Trionfetti y Patricia Celina Ainchil, con domicilio en Mar del Plata, lo reclaman como propiedad. Sin escapar a la regla, el secretario de gobierno del Bolsón, Agustín Guasco, ante el déficit de vivienda declaró sobre las tomas:» el Estado tiene que estar presente y este gobierno pondrá todas las herramientas a su alcance para evitarlas”. Desde la recuperación de tierras hoy denunciaban que la policía había ingresado a allanar y hostigar. En Escobar, en barrio Stone, 60 familias se manifestaron ayer, en un corte en la ruta Panamericana. Aseguran haber comprado terrenos, que hoy reclama la desarrolladora Nuevo Maschwitz para un emprendimiento inmobiliario privado. Su principal accionista es Carlos Cesar Costa, senador provincial de la Alianza Cambiemos. Las 300 familias reclaman la suspensión del desalojo que tiene fecha para el3 de noviembre, ordenada por el juez Luciano Marino. En Rafael Castillo, en el barrio Las Flores, también ayer, familias que recuperaron terrenos llamaban a la solidaridad ante la presencia de un operativo policial y amenazas de desalojos. Denuncian que hace semanas vienen sufriendo el hostigamiento de las fuerzas policiales de Berni que han ingresado al predio e incendiaron casillas. Mañana podría llegar el desalojo.

La criminalización del derecho a la vivienda digna y la defensa de la propiedad privada

Desde los comienzos de la pandemia, numerosos procesos de recuperaciones de tierra se han desarrollado en todo el país, por parte de las familias ante la caída de los ingresos, la desocupación, la imposibilidad de pagar un alquiler, y la incapacidad si quiera de cubrir las necesidades alimenticias básicas. La pandemia profundizó la crisis económica y con ello la habitacional. Se habla de un 3, 5millones de familias que no poseen vivienda digna. Ante esto, los distintos gobiernos no han mostrado grieta. La represión, los desalojos, la criminalización y penalización de las recuperaciones de tierra ha sido la respuesta al déficit habitacional. El » quédate en casa» no ha sido posible para aquellos que no tienen hoy donde habitar. En la mayoría de los tomas, se trata de terrenos que se encuentran desahabitados y abandonados. Cuando se producen las recuperaciones, son supuestos dueños, los que los reclaman, sin poder acreditar la propiedad y ahí aparece el Estado, no ya garantizando el derecho a la vivienda de miles de personas, sino accediendo a la protección de la propiedad privada reclamada en su mayoría por grupos económicos vinculados a la especulación inmobiliaria.

Lo que hay detrás de las tomas

Andrés el «Cuervo» Larroque, declaraba que detrás de las tomas “hay un sector que tiene una expectativa comercial y que está utilizando como fronting a las organizaciones políticas para justificar un esquema de negocios”. Pero no refería precisamente a Bellaco. En un intento de legitimar el desalojo, cargó las tintas sobre las organizaciones que acompañaron la toma de Guernica y que en todo momento se dispusieron al diálogo con el gobierno. Aquellas organizaciones son las que en los barrios se hacen presentes allí donde el Estado se ausenta a la hora de garantizar necesidades básicas, y son las mismas que también salen en defensa de los vecinos cuando ese Estado se hace presente para vulnerar derechos. Lo que hay detrás de las tomas, lo reconoce el mismo gobierno, a través del Indec. En el último semestre, la brecha de desigualdad se expresó en que un 10 por ciento de la población más rica concentra el 33,2 por ciento de toda la riqueza y el 10 por ciento más empobrecido ,apenas percibe un1,3. Los hogares más pobres, tienen ingresos que van de los 300 a los 15 mil pesos, mientras que la suma de los ingresos de los más ricos van de los 96 mil pesos a los 2.058.000. El acceso al techo propio, hipoteca o alquiler, sigue siendo un » sueño inalcanzable» para los y las trabajadoras.

El déficit habitacional, un problema histórico

Si bien la pandemia profundizó el acceso al habitat, se trata de un problema estructural. La concentración de las tierras en pocas manos en nuestro país y América Latina, estuvo vinculada, al desarrollo del capitalismo mundial. En los inicios del Estado Nación, la forma de latifundio como tenencia fue necesaria para incorporar la fertilidad de los suelos pampeanos, a la provisión de materias primas en la división del trabajo internacional. El proceso implicó el despojo de las comunidades. El modelo agroexportador, sostenido a lo largo de los años hasta hoy , tecnificado, industrializado, fue desplazando de manera constante trabajadores rurales hacia las zonas urbanas. Y allí en las ciudades a los obreros y obreras, los encontró el hacinamiento en procesos de urbanización sin control. La tierra estuvo así, supeditada a la valorización como motor de acumulación del modelo. En la década del 90, un nuevo proceso profundizó la ampliación de la frontera agrícola, la introducción de la soja transgénica. Es un ciclo de despojos el que inhibe el acceso a la tierra para vivir: la renta extraordinaria de los agronegocios y su especulación financiera se vuelca sobre los suelos urbanos. Los terrenos se tornan de un valor inalcanzable y recuperaciones de tierra son desalojadas al revalorizarse para ricos emprendimientos inmobiliarios.

¿La nueva conquista al » desierto»?

Las imágenes del desembarco de las fuerzas policiales comandadas por Berni, en Guernica, en Ciudad Evita, o las recientes en Barrio la Esperanza, podrían rememorar a las del ejército de Julio Argentino Roca, avanzando a sangre y fuego sobre las comunidades originarias. En el fondo, el objetivo sigue siendo el mismo, seguir incorporando tierras al modelo que se profundiza, sea para las actividades agroindustriales, o para los desarrollos inmobiliarios en base a la renta que se genere de las mismas. La concentración de las tierras en pocas manos y la desigualdad, continuarán en incremento. El pasado11 de octubre, en el boletín oficial se publicó la aprobación de la «Iniciativa 200 millones de toneladas de cereales, oleaginosas y legumbres» que busca impulsar el incremento del valor de las exportaciones agroindustriales en 20 mil millones de dólares hacia el 2030. El proyecto viene de la mano, entre otras cosas, del acuerdo porcino con China, y la incorporación del trigo transgénico. «Una recuperación de entre QUINIENTOS MIL (500.000) y UN MILLÓN de hectáreas agrícolas en zonas de exclusión/amortiguamiento con el uso de nuevas tecnologías seguras (Agtech)» es la potencialidad a alcanzar que anuncia el plan. Lo que podría explicar las quemas intencionales de millones de hectáreas de humedales, selvas, montes, sierras, cuyos responsables no han sido castigados como las familias de Guernica. El proyecto incluiría también más favores a los grupos concentrados, que podrían consistir en «beneficios fiscales, acceso a financiamiento, reducción del costo de producción y de las tasas de créditos bancarios, amortización acelerada de bienes de capital, entre otras”, según consta en el documento aprobado. Mientras tanto para los » últimos», la política del gobierno sigue siendo ajuste, represión y desalojos. La «Reactivación agropecuaria y agroindustrial para una Argentina de pie» será en provecho de unos pocos y las prendas de sacrificio serán los muchos.



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  1. Federación Anarquista Noticias anticapitalistas y informaciones libertarias · 2021-03-15 03:53:40
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