Domingo de protesta en Chubut: hace dos meses que no cobran los trabajadores estatales
Las protestas por la falta de salarios se multiplican en Chubut. Hoy por la mañana en Comodoro Rivadavia jubilados, docentes y trabajadores de la salud salieron a las calles a manifestar que no pueden sostener a sus familias, ni cumplir con alquileres y demás gastos. Dos meses sin salario determinan la situación de muchas personas que no pueden llevar alimentos a sus hogares, un riesgo más que impone el gobierno de Mariano Arcioni en esta pandemia. Por corresponsal popular para ANRed.
En Chubut, a la violencia económica que significa dos meses sin pagar sueldos, se suma el uso de la justicia del ministro Federico Massoni, quien busca el control social con detenciones y sanciones que responden al Artículo 205 del Código Penal, que establece que “será reprimido con prisión de seis meses a dos años, el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia”.
Este método disciplinador es visto por la mayoría de los trabajadores como un abuso de autoridad, dado que las demandas de la protesta son legítimas. Estas revelan al resto de la sociedad, cómo las familias están siendo víctimas de una política de estado que se aleja del Estado de Derecho.
La respuesta a esta política ha sido contundente y desde el viernes distintos sectores de Chubut, en Rawson y Trelew, iniciaron este proceso de lucha que busca restablecer el respeto a los derechos fundamentales que están siendo arrasados. “Arcioni pagá los salarios”, dicen los carteles, otros llaman a la unidad de los trabajadores, involucrando a los trabajadores de distintos sectores que hoy están en la misma situación. “Si no nos mata la pandemia, nos mata el hambre”, marca con determinación un docente, que trabaja en tres escuelas para mantener a su familia.
Por la tarde la protesta sigue en Madryn, en Esquel y Trevelin. En cada rincón de Chubut hay un trabajador que no puede más, que necesita salir a decir su verdad; “acá no se trata de buscar la confrontación o la rebeldía, al contrario, somos trabajadores de toda la vida que hoy nos someten al encierro sin sustento, esto vulnera la integridad de todas las familias”, dice indignado un manifestante.