Chau Canale, hola cooperativa de trabajadores metalúrgicos de Llavallol
El 9 de marzo los trabajadores de Canale Llavallol realizaron el acto de cierre del acampe y anunciaron la creación de la Coopertaiva de Trabajadores Metalúrgicos de Llavallol (COTRAMEL). Por corresponsal popular para ANRed
La jornada comenzó a las 18 hs en la puerta del predio de la ex Canale. Sonaba música y se podían escuchar los saludos y las demostraciones de solidaridad de numerosos referentes de luchas sociales y sindicales actuales, en una transmisión en vivo de la FM local. Organizaciones sociales, políticas y sindicales del más amplio espectro se reunieron en el acampe para acompañar a los trabajadores de Canale Llavallol en este nuevo paso en su lucha por los puestos de trabajo.
La planta de Llavallol es parte de un grupo de plantas repartidas en todo el país, que fueron cerrando o disminuyendo en sus operaciones desde hace cinco años aproximadamente. Los trabajadores de Canale Llavallol se fueron organizando para enfrentar una crisis empresaria que se profundizaba más y más con atrasos en el pago de los salarios, la no aplicación de aumentos paritarios y el deterioro generalizado de las condiciones de trabajo. Ellos mismos relatan el aprendizaje colectivo emprendido con sus delegados en la discusión de resoluciones y decisiones en asambleas, en solidaridad con otros conflictos, en conocer a organizaciones y recibir solidaridad, en reclamar – sin recibirlo – el apoyo de la Comisión Directiva de la UOM Avellaneda.
Cuando sobrevino el cierre definitivo de la empresa, el grupo de trabajadores estaba decidido a defender la fuente de trabajo, por lo que decidieron instalar un acampe para custodiar los bienes y organizaorn una parrilla para generar algún ingreso que les permitiera complementar el seguro de desempleo. Se planteó la perspectiva de formar una cooperativa y recuperar la empresa como unidad productiva. Después de 130 días de acampe los trabajadores de Canale constituyeron la Cooperativa de Trabajadores Metalúrgicos de Llavallol. El camino que se abre es el de la recuperación de la fábrica, camino plagado de desafíos y dificultades que los trabajadores de Canale seguramente sabrán superar como lo han hecho hasta ahora: colectiva, solidaria y democrácticamente.