Canal 4: Las imágenes de las mil palabras
Este sábado 26, en el marco de una fiesta, se instalará la antena del Canal 4 «Darío y Maxi» en el Centro Cultural Libres del Sur, de Avellaneda, con el fin de dotar a los sectores populares de una televisión propia.
El canal, cuyo nombre homenajea a los luchadores populares asesinados en 2002 en el gobierno de Duhalde, se propone como «un proyecto abierto, participativo y democrático de comunicación alternativa. Imagen y contenidos al servicio de las necesidades populares» según expresan sus realizadores. El colectivo que impulsa la TV está conformado por Kermarak, Cine Insurgente, La galponera TV, TV Piquetero y Mujeres encontradas, el Centro Cultural Libres del Sur entre otros. En la fiesta, además tocarán las bandas J.P.A., Imperio Diablo y Alfasíntesis.
Un camino de crecimiento
Desde el 2001 se desarrollaron en Buenos Aires distintas experiencias de transmisión por aire de Televisiones Comunitarias. Sus realizadores ven en estos emprendimientos la salida a una necesidad de hacer frente al monopolio de los medios audiovisuales en manos de grandes grupos multimedios. Durante los últimos años crecieron en número -y calidad- los proyectos de comunicación alternativa que tenían como soporte páginas web, períodicos y programas de radio. Sin embargo, la «pata audiovisual» se limitaba a videos de circulación restringida. En este sentido, la posiblidad de contar con un canal propio de aire es un paso importante para llegar a un mayor número de personas, que pueden recibir el canal desconectando el cable y sintonizando con la antena de aire el canal 4.
La última década estuvo marcada por un proceso de acumulación de experiencias comunicacionales desde el campo popular. Distintas organizaciones de base y medios alternativos han impulsado talleres de capacitación en comunicación y video. Esto ha dado como fruto, a lo largo de estos años, varios grupos que hacen transmisiones barriales. En Mendoza Capital y en Buenos Aires en las ciudades de Alejandro Korn, Claypole, Lugano, La Boca y ahora Avellaneda han sido los lugares donde se han llevado a cabo estas experiencias.
Repensar la comunicación
Para contrarrestar la tendencia en la que sólo unos pocos son emisores y la mayoría de nosotros somos receptores, estos espacios se plantean impulsar un tipo de comunicación donde los pobladores de los barrios y los trabajadores organizados a través de organizaciones de base recuperen la capacidad de comunicar su realidad.
Ante la concentración mediática y la falta de lugares de expresión, distintos técnicos e ingenieros se han dado a la tarea junto con las organizaciones comunitarias de impulsar talleres de socialización de la tecnología de la radiodifusión, tanto en radio como en TV.
El 26 de junio, a cinco años de la Masacre de Avellaneda, se inaugurará el canal y se dará inicio a su programación emitiendo esa jornada de lucha.