«Somos Indias, Putas y Lesbianas, Juntas, Revueltas y Hermanadas»
Quizás a muchos nos pasó lo mismo que al Colectivo Situaciones; nos preguntamos: ¿Qué nos interpela de Mujeres Creando? Y acudimos a la presentación de «La Virgen de los Deseos» para obtener una respuesta que, sospechamos, sería contundente, creativa y generosa. Las Mujeres Creando hilan una voz dueña de saberes aprendidos con el cuerpo y con la experiencia de la lucha y el disfrute. Esa voz plasmada, a través de graffitis, en las calles de Bolivia resonó en la tarde del viernes en Buenos Aires.
La presentación del libro comenzó con la intervención del Colectivo Situaciones que formuló la pregunta que algunxs de los asistentes traíamos en la cabeza: «¿Qué nos interpela de Mujeres Creando?» Entonces, a manera de respuesta, relataron el inicio de esta relación, que no solo originó el texto sino la visita y una multiplicidad de encuentros con otros movimientos sociales de nuestro país.
«En 1998 algunos de nosotros caminábamos por las calles de Bolivia y nos vimos convocados por ciertos graffitis que iban hilando una voz con un texto callejero, en los que las mujeres bolivianas releen su propias vidas, según dicen ellas mismas. Encontramos una radicalidad sin dureza ni dogmatismos, más bien, nutrida de una creatividad inspiradora. La palabra de Mujeres Creando, fue para nosotros, una liberación que conectó con una nueva politización. Al entender la autonomía como la soberanía de autonombrarse, su acción visibiliza problemas que hasta el momento, se escondían bajo la alfombra, con argumentos ideológicos y estrategistas. Lo que quisimos fue ligarnos con ellas».
El resultado de este encuentro está plasmado en el contenido de «La Virgen de los Deseos» editado por Tinta Limón y puede dividirse en tres segmentos. Una primera parte recoge la memoria fotográfica, es decir, las acciones que realizó Mujeres Creando en 2001, junto con la Organización de Pequeñas deudoras. Las imágenes también incluyen la experiencia de «Mamá no me lo dijo», el programa de televisión emitido durante el 2003. La segunda sección cuenta la historia, la gestación del movimiento, desde 1992 hasta 2005. En el ínterin, se añaden declaraciones de Mujeres Creando que analizan el contexto que las llevan a distintas prácticas. Como así también se encuentran los pronunciamientos, manifiestos, documentos y propuestas que las acompañaron en esta construcción. El libro se completa con una extensa entrevista realizada por el Colectivo Situaciones.
Julieta Ojeda, integrante del movimiento, se refirió a «La virgen de los Deseos»: «El libro combina los textos con la imagen, combinación indisoluble en nuestra lucha. Y también, refleja el desarrollo, la teoría, de nuestras prácticas respecto al uso del espacio público, la calle como espacio vital de acción política haciendo un repaso de la producción visual y la propuesta llevada a cabo por Mujeres Creando y fundamentalmente por María Galindo. Hemos sido testigas de la llegada de este libro a la Argentina. Lo consideramos muy importante porque recoge nuestra historia, nuestro pensamiento pero desde nuestro punto de vista. Y esa es una tarea difícil pero importante y necesaria: contar nuestra versión de los hechos. ¿Por qué no? Cuántos grupos, cuántas personas han sido reinterpretados, distorsionados, tipificados y recuperados como ejemplos de vida inocuos después de su desaparición. Instaurar un sujeto donde confluyen diferentes identidades y espacios es un reto cotidiano. Cada mujer nueva porta una carga de conocimientos, de saberes y cuestionamientos que nos enriquece como movimiento por eso retornamos nuestra historia. No para hacer un relato y un recuento de los hechos sino como una memoria suspicaz y necesaria».
La necedad de afectar el sistema en el que vivimos
La referente hizo una introducción analizando la situación en la que Mujeres Creando visita nuestro país. «Se habla de un contexto latinoamericano que confluye políticamente, sin embargo las posibilidades de intercambio resultan sumamente difíciles. Nosotras nos hemos visto en otros ámbitos de intercambio frustrantes porque fueron eminentemente discursivos y teóricos, que no han aterrizado en una práctica ni en una intercambio recíproco. Creemos que es importante mirarnos unas a las otras y unos a los otros y reconocernos en la experiencia y procesos que nos puedan ayudar a vislumbrar y replantearnos otros caminos de construcción. En este afán suyo y nuestro nos hemos encontrado con MTD de Solano, con AMMAR Capital, La Vaca y el Colectivo Situaciones. Le otorgamos gran importancia a relacionarnos de manera concreta y efectiva con estos grupos, movimientos, con los que los intercambios si son de mutua reciprocidad»¦ además se ha ido profundizando en un afán de intercambiar historias, voluntades y la necedad de afectar el sistema de injusticias en el que vivimos».
Ni dios, ni amo, ni partido, ni caudillo
Cuando María Galindo, otra de las referentes de la agrupación, tomó la palabra, salió del espacio prefijado donde panelistas y público juegan sus roles. Salió tanto en un sentido físico como discursivo; ya no era la presentación del libro sino esa voz callejera imparable que preguntaba retóricamente: «Qué somos nosotras las Mujeres Creando, en nuestra sociedad de cara a nuestro espacio, a nuestro tiempo y a nuestro contexto.
«Somos un movimiento social que se ha instalado en el centro de las sensibilidades de nuestra sociedad. No somos inquilinas de los partidos ni inquilinas de las pugnas patriarcales de poder, tampoco somos inquilinas de un neoliberalismo que nos ha ofrecido reivindicaciones de derechos o retórica de género. Nosotras somos un movimiento social, un referente de rebeldía, un referente convocante. Somos indias, putas y lesbianas juntas, revueltas y hermanadas. En el sentido de una práctica social que interpela un elemento que está en avance que es la posibilidad, el desafío, la irreverencia, la desobediencia de construir relaciones sociales insólitas, relaciones sociales prohibidas, relaciones sociales inéditas. Somos una alianza de mujeres que está prohibida de que estemos juntas. Y con esa alianza nosotras interpelamos cubículos desde donde el neoliberalismo ha dicho: campesinos entre campesinos, jóvenes entre jóvenes, maricones entre maricones y así sucesivamente para reclamar en la puerta de sus estados, de sus despachos y en la puerta de sus ONG’s migajas.
«Las Mujeres Creando somos una estrategia de lucha que tiene como núcleo la creatividad, en este sentido no somos artistas, somos agitadoras callejeras. No trabajamos desde el concepto ni desde la categoría de arte político, arte comprometido, ni del arte público porque impugnamos esas categorías como la institucionalidad del arte. Nosotras pensamos, trabajamos y construimos desde eso que llamamos el afuera. El afuera amando, el afuera creando y además nos planteamos una creatividad que es universal que no es privilegio de artistas, ni existe posibilidad de legitimación o deslegitimación de ninguna forma de institucionalidad. Las Mujeres Creando somos, también, política concreta, somos trabajo manual, trabajo intelectual y trabajo creativo al mismo tiempo, como tres formas que han sido separadas utilitariamente, maliciosamente, por el capitalismo patriarcal para jerarquizar las formas de trabajo. Nosotras somos una especie de taller donde se integran esos tres trabajos en uno, colectivamente.
«Con este puñado de ideas muy básicas y muy generales, estamos siendo nosotras mismas y estamos construyendo un referente social hace más de diez años en la sociedad boliviana. Con ese puñado de ideas ayer interpelamos al neoliberalismo, a la tecnocracia de género del discurso liberal de la igualdad y con ese mismo puñado de ideas interpelamos hoy a la izquierda indigenista.
«¿Hacia dónde avanzamos nosotras?¿Cuál es la concepción, la idea, el gesto, la intuición que tenemos de cambio social? Para nosotras el cambio social es un hecho creativo y la creatividad es un instrumento de cambio social. Es un elemento fundamental que nos permite entender que el Estado hoy se puede disfrazar con un indio, mañana con una mujer, pasado con un maricón y pasado con un discapacitado y permanecer siendo lo mismo. Donde no hay creatividad, no hay cambio social y si el cambio social no es capaz de desordenar simultáneamente todos los órdenes, las filas y las jerarquías, no es cambio social. Nosotras avanzamos hacia algo que es imposible. Y en ese sentido nuestro avance es un avance festivo, es un avance gozoso. Es un avance de cómplices, es un avance que no es lineal.
«Nosotras somos absolutamente concientes de las mujeres en todas las sociedades del mundo, pero hablemos de nuestro espacio, de nuestra sociedad que es Bolivia. No somos un sujeto. Somos un mero objeto de intercambio en las diferentes edades, colores de piel, en las diferentes clases sociales. No constituimos una identidad colectiva, no constituimos una interlocución, no desordenamos el orden patriarcal sino que lo acatamos, nos hacemos cómplices. Nosotras estamos en el avance y en la construcción de ese sujeto, entendiendo que es un avance difícil, complejo, casi imposible en medio de una sociedad patriarcal. Pero justamente es posible soñarlo en esta sociedad patriarcal como lo es la sociedad boliviana o cualquier otra sociedad patriarcal del mundo».
Mariana Collante
Las fotos de este artículo referidas a la presentación de libro son de salvoguille-fotos para ANRed. Para ver más imágenes: ir a la Sección Fotos, «Fotos de la presentación de La virgen de los deseos de Mujeres Creando»