Gabriel Roser está en libertad
El pasado viernes 2, Gabriel Roser, integrante del Movimiento de Unidad Popular (MUP), recuperó su libertad. Tras pasar más de un año y medio en prisión, acusado de robar un comercio a mano armada, y luego de cuatro audiencias desarrolladas durante el juicio oral, se demostró el armado de la causa y la inocencia del militante. En diálogo con ANRed, Rodrigo Pomares, abogado del Colectivo de Investigación y Acción Jurídica (CIAJ), afirmó que una de las cuestiones más importantes del juicio fue que «se blanquearon prácticas de la Policía Bonaerense: prácticas de por qué se detiene a una persona y la falta de instrucción en diversos aspectos».
Gabriel Roser, integrante del Movimiento de Unidad Popular (MUP), estuvo preso desde el 29 abril de 2004 en el Servicio Penitenciario de Magdalena por una causa armada por la Policía Bonaerense y convalidada por la Justicia. El pasado martes 29 de noviembre comenzó el juicio oral en el Tribunal Nº2 de La Plata. La defensa de Gabriel estuvo a cargo de Sofía Caravelos y Fabio Villaruel, del Colectivo de Investigación y Acción Jurídica (CIAJ). El viernes 2 de diciembre y luego de cuatro audiencias, el fiscal Jorge Bettini Sansone desistió de efectuar la acusación ya que no se pudo probar la autoría de Roser en el hecho que se le imputaba. Por lo cual, el militante recuperó su libertad.
Rodrigo Pomares, abogado del CIAJ, señaló que«prácticamente se demostró lo que planteábamos al inicio: el tema de los álbumes de fotos, lo relacionado al armado de la causa y las irregularidades en la misma. Se demostró que Gabriel no pudo estar en el momento del hecho, en el lugar. O sea que lo que se demostró es la inocencia, más allá de que el fiscal dijo que no se logró probar la autoría».
Cabe recordar que, para encarcelar a Roser, la policía lo involucró en un robo a mano armada. En ocasiones previas, Gabriel había sido detenido por averiguación de antecedentes y le habían sacado fotos en la comisaría. El 26 de abril de 2004, el ex funcionario policial, Marcelo Toni, denunció en la Comisaría 6° un asalto a su comercio en Ringuelet, en la periferia de la Ciudad de La Plata. Al realizar esta denuncia se limitó a describir físicamente a los asaltantes. Pero luego Toni declara en la fiscalía y se evidencia el armado de la causa: ya no habla de características físicas sino que da nombres y, a partir del uso de álbumes ilegales, «reconoce» al militante como uno de los responsables. De hecho, durante las audiencias, los testimonios de los policías no pudieron explicar cómo surgió el nombre de Gabriel Roser antes de que Toni lo señale en el álbum de fotos.
A su vez, Pomares agregó que «uno de los parámetros que surgió en el juicio fue la actuación irregular de la policía, la forma en que detienen. Logramos introducir en el juicio un pantallazo general del armado de causa, de los criterios de peligrosidad que usa la policía. Se blanquearon prácticas de la Policía Bonaerense: prácticas de por qué se detiene a una persona y la falta de instrucción en diversos aspectos». En este sentido, también resaltó declaraciones como la de «Santiago Poggi, quien era el subcomisario de la 6°, que dijo que detenía a las personas por la cara. Dijo: ‘no me gustaba la cara y la detenía’. Machuca, otro de la 6°, dijo que él detenía a la gente e integraba los álbumes de modus operandi por criterios peligrosistas» que, tal como asevera Pomares, «no son más que criterios subjetivos».
Por otra parte, el abogado expresó que «el juicio también se gana por la participación y el apoyo de los integrantes de las organizaciones de derechos humanos, de desocupados y organizaciones sociales en general. Es muy importante en el desarrollo del juicio la presencia ya de por sí de las organizaciones». Asimismo indicó que «hay un hecho que hay que destacar: los militantes que declararon en el juicio pudieron reflejar muy bien la defensa que ellos hacen de Gabriel en cuanto a que no se trata de que están apañando a un delincuente -que era algo que corría mucho en el Tribunal- sino que estaban reclamando por su compañero inocente».
El CIAJ iniciará acciones penales contra Toni y, luego de leer la resolución completa del Tribunal Oral, evaluarán otras posibilidades jurídicas contra quienes armaron y convalidaron la causa.
Por último, Rodrigo Pomares relató que cuando Gabriel recuperó su libertad «estuvo festejando con sus compañeros y con su familia. Agradeció todo el apoyo de sus compañeros y dijo que redobla su compromiso como militante».
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