03/10/2005

La política comunicacional del Gobierno acorde con los monopolios mediáticos

ciudadano-k.jpg Las licencias vitalicias a monopolios mediáticos, a través del decreto 527, garantiza la difusión de un discurso único, asegurado por el monopolio de la comunicación, que descontextualiza y fragmenta los conflictos sociales.


El Gobierno Nacional en línea de continuidad con el Decreto-ley 22.285, producto de la última dictadura militar, decide mediante el decreto 527 la política de radiodifusión para el país. La medida lejos de ser sorpresiva, acentúa y consolida una ley antidemocrática que garantiza a las sociedades comerciales la concentración económica y mediática de forma casi vitalicia.

El viernes 20 de mayo el Poder Ejecutivo Nacional sancionó el Decreto-ley de necesidad y urgencia 527/05 mediante el cual se suspenden «por el plazo de diez años los términos que estuvieren transcurriendo de las licencias de servicios de radiodifusión o sus prorrogas previstos en el artículo 41 de la Ley Nº 22.285 y sus modificaciones». La «necesidad y urgencia» (de las empresas comerciales) se manifiesta justo en el momento en que varios medios tenían que llamar a concurso porque las licencias vencían.

Esta disposición implica que a los 15 años (con posibilidad de prorroga por 10 años más) otorgados por ley 22.285/80, se agregan ahora 10 años más. Así, la política del gobierno pasa a beneficiar directamente a los actuales y perpetuos licenciatarios de televisión abierta, radio y TV por cable.

El gobierno consolida a través del decreto 527 los rasgos autoritarios y centralistas del decreto-ley 22.285, que 25 años después de ser impuesto por la última dictadura militar sigue aún vigente. El marco regulatorio en materia de radiodifusión que se aplica a diario en nuestro, está firmado por Videla, Harguindeguy y Martínez de Hoz.

La medida beneficia directamente a los monopolios de comunicación en desmedro de las asociaciones sin fines de lucro. Acuerda con quienes ganaron los concursos apoyados en leyes de gobiernos militares o por reformas neoliberales de la década del 90 que posibilitaron la concentración monopólica de los medios de comunicación.

El artículo 45 de la ley 22.285, establece que las licencias se adjudicarán a «a una sociedad comercial». De esta forma, las organizaciones sin fines de lucro, como las sociales, cooperativas, mutuales, sindicatos, no pueden acceder a una licencia.

Si bien el artículo 45 fue declarado inconstitucional por la Corte Suprema en el año 2003, sigue vigente porque el Congreso no aprueba su reforma. Pero más allá que se derogue ese artículo, eso no garantizará que las sociedades no comerciales puedan acceder al pago de los pliegos para obtener la licencia.

La justificación del Gobierno para extender las licencias fue fundamentada por la necesidad de otorgarle a los medios de comunicación «un horizonte de previsibilidad que involucre los plazos mínimamente necesarios para recomponer su situación económico financiera».

El gobierno caracteriza a los grupos comunicacionales monopólicos como uno de los sectores perjudicados por la crisis que atravesó el país en la década del 90. No los contempla como cómplices ni como beneficiarios, sino como actores «afectados por la intensa recesión sufrida»¦ que ha provocado situaciones de rentabilidad negativa en la mayoría de las empresas».

La política del gobierno en materia de comunicación, después de dos años de gestión, lejos de impulsar la derogación del decreto-ley 22.285, antidemocrático, lo afirma y consolida. Asegurando la concentración mediática y económica en manos de sectores empresarios nacionales, con incidencia de capitales extranjeros.

Además de la concentración mediática y económica, el decreto garantiza la difusión de un discurso único, asegurado por el monopolio de la comunicación, que decide qué es cuestión para la agenda impuesta día a día en los medios. Discurso que descontextualiza, mitifica y fragmenta los conflictos sociales despojándolos de sus componentes de lucha de clases.

Concentración económica y mediática a partir del decreto 527

 Telefé y Radio Continental de Telefónica conservarán su licencia hasta el 2025

 Canal 13 y Radio Mitre del Grupo Clarín extenderán las licencias hasta el 2025

 América de Manzano, Ávila y Vila tendrá licencia hasta el 2022

 Canal 9 queda en manos de Hadad y Moneta hasta el 2019

 El grupo Mexicano CIE mantendrá sus licencias hasta el 2018

 Radio 10 de Daniel Hadad extenderá la licencia hasta el 2025

 Cablevisión y Multicanal extienden su licencia hasta el 2016

 Pergolini y Guebel podrán acceder a una licencia por 35 años (15 años más 10 de prorroga contenidos en la ley 22.285 más 10 del decreto 527)

Por Anabela de Feudis



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