25/06/2015

A 13 años de la Masacre de Avellaneda

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Al cumplirse 13 años de la Masacre de Avellaneda, que se cobró la vida de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, teniendo como responsables al policía Alfredo Franchiotti y al gobierno nacional y provincial de la mano de Eduardo Duhalde y Felipe Solá, realizamos un recorrido fotográfico por la vida de los piqueteros asesinados aquél 26 de Junio de 2002. Por COB La Brecha


Dario empezó a militar de adolescente. Alrededor del año 2000 salió a militar en el barrio donde vivía, que era Claypole. En ese año, se integró al Movimiento de Trabajadores Desocupados (MTD) de Almirante Brown que recién nacía en medio de un contexto de profunda desocupación, pobreza y exclusión.

Cuando los vecinos lo vieron no entendían qué hacía ese ‘pendejo’ metido entre ellos. Un pibe con secundario completo, que entendía computación y algo de inglés. Era un bicho raro para ellos.

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Maxi era compañero, artista, trabajador desocupado y piquetero. Se había sumado al MTD de Guernica dos meses antes de aquél 26 de Junio.

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Dario Santillán en una de las tantas marchas del 2002.

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Darío trabajando en la bloquera del MTD Lanús. (Imagen Junio 2002)

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Piquete en Puente Pueyrredón. (Año 2001)

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El 26 de junio de 2002 la Policía en complicidad con el Gobierno Nacional, encabezado por Eduardo Duhalde en Nación y Felipe Solá en Provincia, estaba definido a ejecutar una feroz represión aleccionadora al Movimiento Piquetero que se ponía en pie de lucha ante una realidad de extrema pobreza, exclusión y desocupación.

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Además de los asesinatos de Dario y Maxi, hubo decenas de heridos, hospitalizados y detenidos.

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A Dario le disparan por la espalda a pocos metros de donde yacía Maxi.
Hoy, uno de los responsables materiales, Alfredo Fanchiotti condenado a prisión perpetua, goza de un régimen de prisión abierta.
Los responsables políticos e ideológicos siguen impunes.

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Darío toma con su mano a la de Maxi que yacía herido en el hall de la Estación Avellaneda, compañero al que, aunque no conoce, no quiere abandonar.
Segundos más tarde, levanta su otra mano a palma abierta intentando frenar la crueldad policial. Allí el tiempo se detiene.

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La complicidad no fue solo entre el poder político y las fuerzas represivas.
El multimedio publicó la noticia titulando «La Crisis causó 2 nuevas muertes».

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Movilizaciones a un mes de la Masacre de Avellaneda. Miles de personas pidiendo Justicia y Dignidad para la clase popular.

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El Puente Pueyrredón a un mes de la Masacre de Avellaneda. (Julio de 2002)

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Mural histórico en el Puente Pueyrredón. ¡Maxi y Darío, presentes!

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Maxi y Darío viven en la lucha de cada uno de nosotros. Cada nuevo Junio nos arde rojo.

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Maxi y Darío para nosotros no están en la tierra, ni en el cielo. Entonces, las flores las llevamos, cada día, en nuestra memoria.
¡Maxi y Dario, siempre presentes! , ¡No están solos, viven en nuestra lucha!



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