Será ley
«La jornada de ayer fue histórica. Esta mañana fue histórica. Hoy se dio un paso más hacia la conquista de nuestros derechos, hoy se dio un paso más hacia la libertad. Una vez más, las mujeres afirmamos nuestra voluntad de decidir sobre nuestros cuerpos, nuestro deseo de que todas, con recursos o no, podamos hacerlo. Una vez más, decimos que no queremos más compañeras muertas. Esta lucha se ganó en las calles, se ganó con nuestros cuerpos y gracias al incansable trabajo de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Ahora, el Senado tendrá la posibilidad de volver realidad está ley. Esta ley que, antes o después, será». Por Lucía Alegría, para ANRed.
La jornada de ayer fue histórica. Esta mañana fue histórica. Hoy se dio un paso más hacia la conquista de nuestros derechos, hoy se dio un paso más hacia la libertad.
Ayer, una mitad de la plaza y las calles aledañas al Congreso se tiñeron de verde. Callao se pobló de pañuelos, se veían sonrisas por donde se mirara. Llenamos cada espacio por horas. El clima fue de fiesta, de emoción, por ser conscientes de lo que se está construyendo. Una vez más, las mujeres afirmamos nuestra voluntad de decidir sobre nuestros cuerpos, nuestro deseo de que todas, con recursos o no, podamos hacerlo. Una vez más, decimos que no queremos más compañeras muertas.
Ayer hubo carpas, mantas, fuegos improvisados y el calor inconfundible de las convicciones. Miles de personas esperaron en la calle la respuesta de los diputados sin importar las bajas temperaturas, guiadas por la voluntad de construir una sociedad más abierta.
Esta lucha se ganó en las calles, se ganó con nuestros cuerpos y gracias al incansable trabajo de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
Ahora, el Senado tendrá la posibilidad de volver realidad está ley. Esta ley que, antes o después, será. Porque, parafraseando al diputado Daniel Filmus, lo que se está decidiendo no es si el aborto se legaliza o no, sino cuándo. Esta ley va a suceder porque el ímpetu es irrefrenable, porque la conquista de derechos no puede evitarse. Será decisión de la Cámara de Senadores si es ahora, o si seguirán muriéndose mujeres, si seguirá reinando la hipocresía y el aborto continuará ocurriendo en el cuarto oscuro del país.
Sea lo que sea en esa sesión, hoy la emoción nos invade, se nos caen las lágrimas y se nos graba la sonrisa. Nos estalla el cuerpo de felicidad. Sea lo que sea, ganamos una pelea gritando a voces lo que sucede desde siempre y pretendía callarse. Hicimos historia y la seguiremos haciendo.
Por Lucía Alegría