«Nosotros somos trabajadores artísticos»
Un nutrido grupo de trabajadores de la cultura de la Ciudad de Buenos Aires marchó hoy hasta el Ministerio de Cultura porteño en reclamo del mantenimiento de sus puestos de trabajo y en repudio a los despidos masivos dispuestos por Mauricio Macri. «Esto es una cachetada a los derechos de los trabajadores», denunciaron.
Un importante número de artistas plásticos, bailarines, talleristas, escenógrafos y músicos (enrolados en ATE) marchó hoy al mediodía frente a las puertas del Ministerio de Cultura en reclamo de sus puestos de trabajo, de los cuáles fueron despojados cuando el gobierno de Mauricio Macri dispuso el despido masivo de unos 2400 empelados bajo su órbita.
Con una radio abierta en las puertas del ministerio, los trabajadores denunciaron la incertidumbre que persiste en torno a sus puestos laborales, pese a los dos recientes fallos judiciales (de los jueces Elena Liberatori y Roberto Gallardo) que instan al gobierno porteño a reintegrarlos en sus funciones. «Sabemos que no están siendo cargados los datos de los compañeros despedidos, y no van a cobrar su sueldo. Eso sería, realmente, una cachetada a la justicia y a los derechos de los trabajadores», denunciaron.
La jornada de protesta fue un claro indicador de los efectos de los despidos masivos en las diferentes áreas de Cultura. Algunos de los mismos fueron ejecutados, inclusos, durante los últimos días de la gestión de Jorge Telerman, en una clara muestra del acuerdo político que hubo entre las gestiones saliente y entrante.
Tal es el caso de los bailarines del Ballet Contemporáneo del Complejo Teatral General San Martín. «Fui despedido junto a 6 compañeros más del ballet por haber salido el año pasado a la calle a bailar por nuestros derechos laborales», manifestó Ernesto Chacón Oribe, bailarín del Ballet Contemporáneo, además de ganador del «Premio Clarín Figura de la Danza 2008», y «Figura Revelación en Danza», por su trabajo en el San Martín.
«Lo que pedíamos, básicamente» – explicó el bailarín – «era una ART y una obra social, porque habíamos sufrido una gran cantidad de accidentes laborales y el teatro nunca se hizo cargo. Sale 1000 pesos cada operación. Un chico ni siquiera se pudo operar, porque no tenía recursos. Y otro fue obligado a bailar con la rodilla rota».
Además, el bailarín contó a ANRed la situación de precariedad legal en la cual se encuentra su actividad: «No hay ninguna legislación ni de Nación ni de la Ciudad que ampare a los bailarines. Nosotros tenemos una actividad bastante específica y deberíamos tener una jubilación especial, porque no podemos ser bailarines hasta los 65 años, como cualquier trabajador. Y realmente, los funcionarios no consideran que seamos trabajadores. Y en realidad, cuando a mi me echaron, me sacaron mi trabajo, no mi parte artística, que la conservo. Nosotros somos trabajadores artístico0s, y esto es lo que queremos hacerles entender a los funcionarios» .
En igual sentido se manifestó Aníbal Zorrilla, delegado de ATE por el Taller de Danzas del Centro Cultural San Martín, con respecto a la dificultad que tienen para ser considerados como trabajadores, como las que se desarrollan en cualquier área o rama laboral. «Existe un poco la idea de que el artista hace lo que quiere, porque es su vocación, y en realidad, es un trabajador.»
En cuanto a su actividad específica, Zorrilla señaló: «Estamos en una situación difícil. Existe un decreto de la anterior gestión que ordena la creación de una «planta transitoria», que todavía no fue creada, y seguimos trabajando con los contratos por locación de servicios, que se renuevan anualmente, y que nos deja afuera de todo el sistema de seguridad social del que goza cualquier trabajador. «
En diálogo con ANRed, la delegada de la Dirección de Música, Andrea López, cuyo trabajo específico es el de Coordinadora de Escenario, brindó un panorama general de sus reclamos y de la situación vivida en cada área de Cultura.
«Nos movilizamos para mostrarle al vecino que lo que dice Macri en los medios es mentira» – explicó – «Los compañeros por los que estamos luchando son, efectivamente, trabajadores que están desde hace 8 a 5 años en cada repartición. Gente altamente capacitada, que cobran sueldos que van de los 900 a los 1200 pesos.»
«A algunos trabajadores los dejaron entrar pero no les dan sus herramientas laborales ni trabajo, mientras que a otros, les sugirieron que busquen otro trabajo, porque cuando se revoquen los dos fallos judiciales, van a ser despedidos. Incluso, en algún lugar de educación se llegó a usar la fuerza pública, la gendarmería, para que los compañeros no ingreses a sus lugares de trabajo» , contó López.
Finalmente, mientras la convocatoria culminaba, se veía aún el cartel que señalaba: «Macri es el Gran Ñoqui. Ausente 277 veces en las sesiones de la cámara de diputados. No presentó ningún proyecto durante su mandato conmo diputado. Como Jefe de Gobierno se aumentó el sueldo de $9000 a $25000 pesos. Un verdadero ejemplo de lo que significa un ñoqui».
NOTA: Las fotos que ilustran la nota corresponden a la protesta que los bailarines realizaron el año pasado frente al San Martín. Fuente: www.bailarinesorganizados.blogspot.com
Fernando Ruffa