Comunicado de organizaciones sociales en respuesta al discurso de la presidenta Cristina Fernández
Difundimos:
La movilización y la protesta son derechos del pueblo
La devaluación no la vamos a pagar los trabajadores
El discurso de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en el inicio de las sesiones ordinarias del Congreso Nacional no hizo referencia a las cuestiones centrales que preocupan a la población como la suba de precios, la imposibilidad de llegar a fin de mes, la falta de vivienda, la convivencia política, judicial y policial con el narcotráfico, entre otras cosas. En cambio, cuestionó varios aspectos actuales de las luchas populares: los recolamos
salariales de las y los docentes, los cortes de calle, la lucha por la absolución de los petroleros de Las Heras, las luchas por tierra y vivienda.
La propuesta de la presidenta fue contra los cortes de calle, con el objetivo de limitar y terminar con la protesta social, a través de leyes represivas e instigando a la confrontación directa hacia quienes están participando de una manifestación con cortes.
El planteo de la presidenta de que «un corte de calles o de ruta es una falta de respeto a la sociedad», poniendo ejemplos como que «en los Estados Unidos en la época de Bush, vi que las manifestaciones iban entre las vallas y por la vereda», es muy grave. El accionar del Secretario de seguridad Sergio Berni en las protestas de los primeros meses de este año marca la profundización en el uso de medidas represivas frente a la protesta social, haciendo cada vez mas evidente lo que este gobierno esta dispuesto a realizar para garantizar,
aunque sea a bala y garrote, la concertación social a la que llamo,
una concertación que solo favorece a los grupos concentrados,
empresarios y patrones.
En este contexto se sigue castigando y condenando a los luchadores y luchadoras sociales. En esa linea Cristina Fernández de Kirchner defendió la condena a cadena perpetua de cuatro trabajadores petroleros en Las Heras, dictado por un tribunal apañado por las grandes petroleras internacionales, que pretenden «ejemplificar» a sus trabajadores para que no salgan nunca más a pelear contra el impuesto a los salarios y la precarización laboral. La presidenta apoya un fallo infame, impuesto a través de pruebas y testimonios inventados o arrancados mediante torturas.
La presidenta también mencionó la toma en la Villa 20 que se produjo la semana pasada, así como el antecedente del Indoamericano. Pidió un desalojo más rápido. Hay que recordarle que en 2010 su policía, la PFA, junto con la Metropolitana, reprimió brutalmente a las familias sin techo y asesinaron a Bernardo Salguerio, Rosemary Churapuña y Emilio Canaviri Álvarez, y que también mintieron Aníbal Fernández y Horacio Rodríguez Larreta cuando prometieron un plan de viviendas. Nada se hizo. Lo único que sucedió fue el desembarco de la Gendarmería y Prefectura en los barrios del
sur porteño. Y el injusto procesamiento a nuestros compañeros Diosnel
Pérez y Luciano Nardulli, acusado de «instigar» la toma sólo por haber
concurrido a la Casa Rosada a una reunión. Macrismo y Kirchnerismo
comparten culpas en la crisis habitacional.
Después de la devaluación, de la mano de la política
inflacionaria, las grandes empresas y corporaciones que se llenaron
los bolsillos alevosamente buscaron nuevamente ganar más a costa de la
población. No hay «precios cuidados» que valgan para la especulación
de los grandes supermercadistas y monopolios, y no existe voluntad
alguna de revertir la creciente concentración, primarización y
extranjerización de la economía. Mientras se empiezan a sentir las
consecuencias de la devaluación en los bolsillos de los más humildes,
mientras el Gobierno retacea los aumentos salariales, pero paga 5 mil
millones de dólares a Repsol, mientras se analizan nuevas subas en las
tarifas del agua, la luz, y el gas, nosotros seguimos de pie.
Las organizaciones populares seguiremos saliendo a las calles. Porque estamos convencidas que un corte, una manifestación,
una protesta, ponen en evidencia los reclamos y exigencias del pueblo
trabajador, porque no nos resignamos a lo posible. Los cortes de
calle, las manifestaciones populares son parte de la tradición de
lucha de nuestro pueblo que van desde las grandes luchas de los
Pueblos Originarios, la Semana Trágica , Reforma Universitaria, las
luchas en la Patagonia Rebelde, el 17 de Octubre, el Cordobazo, el 19
y 20 de Diciembre del 2001, que precisamente irrumpieron en la vida
política de nuestro país por el protagonismo del pueblo en las calles.
Como pueblo trabajador se nos plantea un desafío importante: el de construir en el corto plazo una respuesta contundente a este intento de cercenar los derechos conquistados con muchos años de lucha y seguir en el camino de fortalecer nuestras organizaciones y de lograr al mismo tiempo, la unidad tan necesaria para desafíos mayores.
Reafirmamos el desafío de seguir construyendo Poder
Popular, dando batalla en cada territorio, en cada lugar de trabajo,
en cada escuela y cada universidad para construir un proyecto de país
y de sociedad que tenga como horizonte el Socialismo.
- SALARIO MÃNIMO IGUAL A LA CANASTA FAMILIAR (ESTIMADA EN 9.000 $)
- PARITARIAS LIBRES SIN TECHO
- PARITARIA SOCIAL YA
- ABSOLUCIÓN DE LOS TRABAJADORES PETROLEROS DE LAS HERAS
- CONGELAMIENTO DE PRECIOS Y TARIFAS
- VIVIENDAS DIGNAS PARA EL PUEBLO TRABAJADOR
- SALUD Y EDUCACIÓN PÚBLICAS PARA TODOS
- TODO EL APOYO A LA LUCHA DOCENTE EN LAS PARITARIAS
Primeras firmas:
COB La Brecha «“ Frente Popular Darío Santillán (FPDS) «“ Movimiento por la Unidad Latinoamericana y el Cambio Social (MULCS) «“ Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) «“ OP Fogoneros «“ Agrupación Domingo Menna
Córdoba se Mueve – Agrupación Montoneros Córdoba