«LAN es el encanto para volar y el espanto para trabajar»
Alrededor de 50 aeronavegantes de la empresa LAN marcharon este martes frente a las oficinas de la empresa, ubicadas en Cerrito y Paraguay. La protesta es motivada por la suspensión arbitraria de trabajadores aeronavegantes, por la política de reducción de costos mediante el despido de personal y el manejo del «retiro voluntario» compulsivo.
«Queremos volar pero nos cortan las alas», enfatizaban los trabajadores de LAN Airlines en una protesta que realizaron este martes entre las calles Paraguay y Cerrito, sede de las oficinas de la empresa. El reclamo se centraba en la denuncia de los manejos empresariales fraudulentos que exigen a los aeronavegantes un «retiro voluntario» encubriendo una política de reducción de costos mediante el despido masivo de personal.
La empresa demanda a los trabajadores que renuncien de manera voluntaria, una estrategia para disimular el despido de los aeronavegantes así como de economizar los costos que significaría el pago de las debidas indemnizaciones. Los motivos que la empresa argumenta no son sólidos y suspende a trabajadores injustificadamente de las tareas que desempeñan cotidianamente. «Estamos cesantes por decisión de la empresa. La excusa que nos proporcionó es que no saben cuántos nos vamos a retirar y, por tal motivo, ellos no pueden planificar decisiones programáticas. La empresa especula con que nos vamos a ir como si fuera un barco que se hunde, cuando la realidad es que el negocio está creciendo.», relató a ANRed Dina Feller, delegada de los trabajadores.
La aeronavegante detalló el discurso que le brindó la empresa a sus empleados: «La empresa nos pidió el retiro voluntario de distintas maneras: desde conversaciones individuales, informales, de los más sutiles hasta directamente reuniones formales de la empresa dónde nos exigían explícitamente el retiro bajo las excusas de que no nos podrían asegurar la continuidad laboral pero que, finalmente, 15 de nosotros serían reabsorbidos y reacomodados en la empresa. Somos 52 personas, 37 tripulantes perderíamos nuestra fuente de ingresos. Es una selección encubierta y un proceso de reconversión laboral.»
La interpretación de los aeronavegantes de la medida que dispuso la empresa difiere de la esgrimida por la misma. Los trabajadores consideran que es una política empresarial fraudulenta para reducir costos y racionalizar el servicio haciéndolo más rentable y eficiente en detrimento de la preservación de los recursos humanos que cuentan con preparación, capacitación y experiencia. Dina sostiene que: «Esta estrategia de la empresa consiste en un dumping social, la empresa va buscando la mayor ganancia, de acuerdo a una operación global según la cual planifican la distribución de la fuerza de trabajo lo cual implica reducción de costos a través de los factores humanos.»
Dina, así como sus compañeros, sostiene que: «Hoy estamos todos cesantes y somos conscientes que lo que subyace a esta situación es una medida que toma la empresa para abaratar la mano de obra: al desprenderse de nosotros, que somos más caros ya que tenemos más antigüedad, ocupan esos puestos de trabajo con gente de la calle, más joven o inexperta pero que a ellos les abarata costos». Al mismo tiempo, los aeronavegantes denuncian una política de discriminación en cuanto a la toma de personal. En palabras de Dina: «En LAN Argentina se está produciendo un proceso de discriminación y de reconversión laboral. Por una parte, nos despiden a nosotros y toman a trabajadores chilenos no sé si por una cuestión xenófoba o por un motivo puramente económico así como el despido de trabajadores nuevos por gente nueva sin experiencia que a la empresa le resulta más barata.» En la misma empresa también sucede que trabajadores que desempeñan iguales tareas perciben salarios diferenciales: «No sólo nos discriminan frente a los compañeros chilenos sino también frente a los compañeros argentinos nuevos. Hoy en día hay trabajadores con el mismo uniforme, que responden a la misma empresa, quienes realizan el mismo trabajo pero cobran diferentes escalas salariales.», afirmó Dina.
«El planteo de la empresa es muy absurdo y por eso nosotros nos estamos organizando. No estamos haciendo paro, nuestra metodología es siempre en alianza para no perjudicar ni a pasajeros ni a usuarios», aclaró Dina. Ella recalca e insiste sobre el verdadero papel de los trabajadores en la expansión de la empresa: » la base de trabajadores que venimos trabajando desde hace 6 años somos la punta de lanza de la empresa, quienes nos desenvolvemos en el trato con el usuario brindándoles un excelente servicio con nuestro profesionalismo y experiencia adquirida. Hoy somos víctimas de una extorsión por parte de la empresa la cual nos obliga a un retiro voluntario. Ya no tenemos garantizado nuestro puesto de trabajo en LAN Argentina.»
El reclamo de los trabajadores radica en el pedido a que se cumplan sus derechos y que cuenten con seguridad de un puesto de trabajo duradero. Tal como afirma Dina: «Queremos que la empresa nos reconozca los derechos adquiridos y que nos aseguren la continuidad laboral en LAN Argentina. Somos 52 tripulantes de cabina en esta situación, quienes estamos siendo sujetos a los retiros voluntarios los cuales no deseamos. Nosotros amamos esta profesión, queremos volar pero nos cortan las alas. Nuestra intención es seguir trabajando en LAN pero que nos reconozcan nuestros legítimos derechos».
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SECRETARÃA DE PRENSA Asociación Argentina de Aeronavegantes
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