Mucho ruido y pocas nueces
La CGT y las dos CTA realizaron ésta tarde un multitudinario acto en Plaza de Mayo contra los despidos y las políticas de ajuste del gobierno nacional y, luego de tres horas de movilización en el centro porteño, Juan Carlos Schmid (único orador) anunció, en un breve discurso de 15 minutos, que la CGT realizará recién el próximo 25 de septiembre un Comité Central Confederal que evaluará anunciar un plan de lucha que incluiría un paro general. Sindicatos combativos clasistas, junto a organizaciones sociales cooperativistas, participaron de la convocatoria en columnas independientes con las consignas de exigencia a la CGT de «Paro general ya» y al gobierno de Mauricio Macri de «Aparición con vida de Santiago Maldonado», contra el ajuste, los despidos, las reformas laborales y previsionales, por aumento del salario mínimo vital y móvil, la implementación plena de la Ley de Emergencia Social y la sanción de la Emergencia Alimentaria. Por ANRed .
Tal como lo habían anunciado el viernes pasado Juan Carlos Schmid (integrante del triunvirato de la CGT), Pablo Micheli (CTA Autónoma) y Hugo Yasky (CTA de los Trabajadores), las tres organizaciones realizaron por la tarde una multitudinaria movilización y acto en Plaza de Mayo con el objetivo de «enfrentar las políticas de ajuste que el gobierno quiere imponerle a los Trabajadores y a nuestro Pueblo», tal como indicaron.
La convocatoria había salido a último momento tras las versiones de cancelación de la convocatoria que hubo toda la semana pasada en el marco de disputas internas que llevaron incluso a que se hablara de una ruptura de la CGT – que finalmente no se concretó – y que llevó a que el jueves se ratificara el acto del martes.
En la previa al inicio del acto central en Plaza de Mayo, hubo un enfrentamiento entre dos facciones del gremio moyanista de Camioneros. Con un compilado de cumbias que sonaba de fondo, en las imágenes aéres de la TV Pública se pudo ver cómo ambas facciones se revoleaban palos, botellazos, bolsas e incluso las cruces que hay en la histórica plaza en homenaje a los combatientes caídos en la guerra de Malvinas.
Tras movilizar a una mutitud desde el mediodía en las inmediaciones del centro porteño, sólo hubo un breve discurso de 15 minutos en la plaza de Juan Carlos Schmid, que fue el único orador. Fiel al estilo que caracteriza a la CGT, Schmid anunció que recién el próximo 25 de septiembre (dentro de un mes) la central realizará un Comité Central Confederal donde se evaluará anunciar un plan de lucha que incluiría un paro general..
Mientras el acto tenía lugar en la histórica plaza, el ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Jorge Triaca, se encontraba almorzando con las 62 Organizaciones Peronistas, cuyo principal referente fue hasta hace poco el ya fallecido dirigente de peones rurales Gerónimo «Momo» Venegas.
Además de los bombos y bombas de estruendo, el sonido ambiente de la plaza se caracterizó también, durante y después del escueto acto, por la constante exigencia a la CGT de llamar a un paro general nacional ya, de parte de los gremios combativos clasistas y de las organizaciones sociales cooperativas, que también se movilizaron, en columnas independientes que partieron desde la carpa de las/os trabajadoras/es despedidas/os de PepsiCo y el Obelisco porteño, respectivamente.
Las dos grandes consignas llevadas por esas columnas fueron la exigencia a la CGT de «Paro general ya» y al gobierno de Mauricio Macri la «Aparición con vida de Santiago Maldonado», que fueron acompañadas también por el repudio a las políticas gubernamentales de ajuste, los despidos, las reformas laborales y previsionales, el pedido de aumento del salario mínimo vital y móvil, la implementación plena de la Ley de Emergencia Social y la sanción de la Emergencia Alimentaria.
Por eso, mientras terminaba el acto encabezado por la CGT, la plaza se empezó a colmar con las consignas de «Â¡Paro, paro, paro, paro general!» y el ya clásico «Â¡Poné la fecha!», en referencia a una medida que recién se sabrá en un mes si será tomada finalmente por la CGT.
