06/03/2007

Murió León «Toto» Zimerman, fundador de la Correpi

budge5-2.jpgHoy falleció León Toto Zimerman, abogado de Derechos Humanos, quien, dentro de su trayectoria política, fundó en 1992 la Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional, CORREPI. El Toto,» un luchador inclaudicable del movimiento antirrepresivo», popularizó la frase «gatillo fácil», al referirse a los asesinatos cometidos por efectivos policiales. A partir de las 23hs, en Lomas de Zamora, se realizará el velatorio.


Reproducimos el siguiente Comunicado de Prensa de Correpi Sur:

COMPAÑERO TOTO:

¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE!

Con profundo dolor, comunicamos a todos los compañeros y compañeras, que en el día de la fecha ha fallecido León «Toto» Zimerman.

Toto fue un luchador inclaudicable del movimiento antirrepresivo y de los derechos humanos, un verdadero ejemplo de la honestidad y el compromiso militante.

En los tiempos de la Masacre de Budge, creó y popularizó el término «gatillo fácil», con el que hoy en día se denomina a los asesinatos cometidos por la fuerzas represivas del Estado; también organizó la campaña popular por la búsqueda de los policías prófugos.

Dentro de su larga trayectoria política, cabe destacar que fue fundador en el año 1992 de la CORREPI (Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional), organización de la que se distanció -por diferencias políticas y metodológicas-, junto a un grupo de compañeros y compañeras en el año 2006, para fundar CORREPI SUR, entendiendo que había que apostar a la pluralidad dentro del marco del campo popular, para llevar adelante la tarea común de confrontar la represión estatal con unidad, organización y lucha.
Se fue el Toto.

Un compañero, un luchador, un REVOLUCIONARIO.

Nuestro mejor homenaje, será continuar la lucha antirrepresiva, enmarcada en la gran batalla del objetivo estratégico: la derrota del capitalismo.

¡¡¡¡¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE VIEJO LEÓN,
QUE AQUÍ ESTAMOS TUS CACHORROS !!!!!

CORREPI SUR

correpisur@yahoo.com.ar

El velatorio se realizará en Casa Lasalle, Av. Pavón Nº 8762, Lomas de Zamora (frente a la plaza de la Municipalidad), a partir de las 23 hs.

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El Toto y la Masacre de Budge

Víctimas: Oscar Aredes (19), Roberto Argañaraz (24) y Agustín Olivera (20).

Responsables: el Suboficial Mayor Juan Ramón BALMACEDA, el Cabo Primero Jorge Alberto MIÑO y el Cabo Isidro Rito ROMERO.

El caso ocurrió el 8 de mayo de 1987, cuando Argañaraz y Olivera estaban tomando cerveza en Guaminí y Figueredo. Alrededor de las 18.30 se sumó Aredes -compañero de trabajo de Argañaraz, que ese día se tomó franco- y a los pocos minutos apareció una camioneta con cuatro policías. Según se comprobó luego, tres de ellos -Balmaceda, Miño y Romero- comenzaron a dispararles.

Olivera recibió doce disparos y Aredes siete, mientras que Argañaraz, según testigos, fue subido a la camioneta, presentando un tiro en una pierna, pero luego lo llevaron al hospital donde apareció con un impacto en la cabeza.

Según se indicó, a los jóvenes les «plantaron» armas para simular un enfrentamiento, pero se comprobó que no servían.

Hubo dos juicios: el primero tuvo sentencia el 24 de mayo de 1990, cuando se condenó a Balmaceda y a Miño a 5 años de prisión por homicidio en riña y a Romero a 12 por homicidio simple. Pero el juicio fue anulado por la Suprema Corte de Justicia bonaerense por errores procesales.

En un nuevo juicio, el 24 de junio de 1994 los policías fueron condenados a 11 años de cárcel por homicidio simple, pero los acusados -quienes estaban en libertad- se fugaron tras el fallo.

Desde entonces, familiares y organizaciones de Derechos Humanos, sociales y políticas, no dejaron de buscar a los efectivos y cada año -en el mes del aniversario- se lanzaban campañas de afiches con las fotos de los asesinos para pedir la colaboración de la ciudadanía y encontrarlos.

La masacre de Ingeniero Budge no fue el primer caso de gatillo fácil, sino el primero en el que todo un barrio se organizó para pelear contra esta política represiva. De allí surgió la expresión «gatillo fácil» cuando León «Toto» Zimerman, quien fue uno de los abogados de las familias de las víctimas, tomó una expresión del periodista Rodolfo Walsh que hacía referencia al «gatillo alegre» y lo reformuló como «gatillo fácil».
Una frase que con los años se popularizó para identificar un asesinato cometido por personal de las fuerzas de seguridad en la Argentina.

En mayo pasado, «Toto», declaró a ANRed: «Seguiremos peleando e iniciamos una campaña con la idea de que llegaremos a ver presos a los culpables al cumplirse los 20 años de la Masacre, marcando que la responsabilidad mayor está en el gobernador de la provincia y en el ministro de Seguridad. Ellos tienen que responder ante nosotros por no hacer la captura. Tenemos derecho a exigir. No peticionamos nada, es una orden del pueblo de Budge para que salga a buscar a quienes debe. Sino lo hace es porque no quiere y, en última instancia, es cómplice de ellos».

Tras años de espera, en noviembre de 2006, cayó preso el último de los responsables materiales de la Masacre de Budge. La lucha de familiares y organizaciones de Derechos Humanos demostró que este logro fue el fruto de la lucha popular y de quienes, como Toto, nunca claudicaron.



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