03/06/2015

«Monte es Hermoso para algunas personas y no para otras”: ¡Falta Katherine Moscoso!

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A pocos días de la convocatoria «Ni Una Menos” que repudiará este 3 de Junio la escalada de femicidios, el sábado 23 de mayo encontraban en Monte Hermoso el cuerpo sin vida de Katherine Gabriela Moscoso, desaparecida desde el domingo 17 luego de salir de un boliche. Al confirmarse su muerte, se produjo una pueblada que incendió la comisaría, otros edificios públicos y la vivienda del Secretario de Seguridad local Ricardo Triches, mientras que un grupo de personas lincharon a Juan Carlos Canini Gonzáles, supuesto sospechoso del crimen. Los funcionarios locales huyeron «como ratas”, mientras la policía reprimía a la población. A pocas horas de estos hechos, arribaron a Monte Hermoso altos funcionarios políticos y de la policía bonaerense, y con ellos se produjo la militarización de la ciudad y una intensa ola de detenciones, entre las cuales se encuentra una amiga de Katherine. Con una clara política de infundir miedo, los medios masivos de comunicación y la intervención estatal-policial han cambiado el foco de la cuestión: poco se habla del femicidio y el eje está puesto en el linchamiento y las detenciones de los sospechosos que habrían participado en los «desmanes”. Sin embargo, a no olvidar: Monte ya no es tan Hermoso, falta Katherine. Por Nicolás Deambrosi para ANRed / Foto Tapa: Fabián Gastiarena


Desde la desaparición de Katherine hasta el día del hallazgo de su cuerpo, buena parte de la población de Monte Hermoso participó de movilizaciones y rastrillajes comunitarios. Los y las vecinas solidarias se acercaban a la comisaría exigiendo información y desde allí se organizaban los recorridos de búsqueda. Mientras tanto, se iniciaban rumores, acusaciones cruzadas, circulaban datos inciertos señalando supuestos implicados en la desaparición.

En todo ese tiempo ningún funcionario del Municipio gobernado por Marcos Fernández dio la cara, ninguno de ellos se dirigió a la comunidad: supuestamente «estaban ocupados en la búsqueda”. Sin embargo, en la página oficial municipal no aparecía ni siquiera un comunicado, una foto o mención alguna sobre la desaparición de la chica: sólo se promocionaba la tradicional fiesta del Sauce en conmemoración del 25 de mayo. Incluso el 18 de mayo, estando Katherine desaparecida, paradójicamente se anunciaba para el día siguiente una reunión del Foro de Seguridad de Monte Hermoso, «donde se abordarán temas inherentes a la seguridad, la creación de las Fiscalías Temáticas con competencia específica en Estupefacientes y en Delitos Rurales, entre otros temas”. Recién el jueves 21 ciertos funcionarios del ejecutivo local se mostraron unos pocos minutos frente a la comisaría. La fiesta del Sauce terminó suspendiéndose a último momento, más bien por iniciativa de la comisión organizadora que por una decisión política del Municipio.

Este marco de desidia acumulada por la inacción del Estado, sumado a las idas y venidas acerca de las versiones sobre el paradero de Katherine, generaron una situación de malestar y bronca crecientes que se fueron gestando durante la semana de búsqueda. Al hallarse sin vida el cuerpo de Katherine, emergió la pueblada. Afirmar que fueron punteros políticos de la interna del peronismo quienes incentivaron los «desmanes” es una forma más de encubrimiento, porque se simplifica la situación y se subestima al pueblo montermoseño. La gente se hartó y se expresó genuinamente en las calles, como pudo y como supo, desde el primer momento de la búsqueda, las movilizaciones y el estallido. Si algunos políticos de turno aprovecharon esa situación para jugar sus internas en las carreras electorales, ese es otro cantar…

Aquel Estado ausente días anteriores, incapaz de preservar y garantizar la vida de Katherine Moscoso y de Juan Carlos Canini González, esta vez sí intervino y de manera decidida: reprimiendo a la población con un saldo de varios heridos. A los pocos días, este mismo Estado declaró duelo municipal para el 26 de mayo, convocando a los empleados municipales a una «jornada de reflexión” y llamando a adherir a las instituciones intermedias, la banca y el comercio.

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Del «Nunca Más” al «Ni Una Menos”

El viernes 22 una vecina de Monte Hermoso que viajó fuera de la ciudad y volvió el martes siguiente contó, «Eran dos Montes distintos. Cuando volví había un clima de desolación, impotencia. Era caminar y respirar dolor. Todo era gris: gris el mar, gris el cielo. Poca gente en los negocios, no andaba nadie, había policías hasta en la biblioteca. Eran visibles los destrozos: eso fue contra el Estado”.

Al otro día de su regreso, esta vecina fue tomando conciencia de lo que había sucedido. Comenzó a involucraste participando de las marchas que encabezaba la familia de Katherine. Rápidamente los medios de comunicación hegemónicos, la ronda de rumores y los resortes del poder local, provincial e incluso nacional cambiaron el foco del asunto: ahora se hablaba más de los incendios y «desmanes” que del asesinato de Katherine.

Katherine asistía a la Escuela Especial N° 501 y participaba de distintas estas instancias educativas, como ser talleres sobre sexualidad y vulneración de derechos. «Esto nos golpea como pueblo. Kathy tenía un leve retraso madurativo, pero era una adolescente que andaba en la calle como cualquier chica de su edad, escuchaba música, iba a la plaza del Fonavi”, cuenta otra vecina.

Detrás del crimen de Kathy se expresan relaciones de poder, se ocultan entramados oscuros. «Estoy segura que se están tapando cosas como prostitución, droga, fiestas, dónde está involucrada la policía, la política, incluso se está diciendo que el cuerpo fue encontrado días antes y que fue ocultado porque hay gente de poder vinculada al crimen”. Es por eso que rápidamente «el aparato represivo del Estado sale a meter en cana a todos los que arrojaron una piedra, metiendo miedo, como en la peor época de la Argentina”, sostiene una conocida.

Previo a la desaparición de Katherine, varias mujeres de la ciudad venían organizando una actividad en el marco de la convocatoria nacional del 3 de Junio «Ni Una Menos”. El día jueves 14, a través de una carta a la intendencia, habían pedido permiso para utilizar la Plaza de la Memoria para realizar allí una serie de actividades. «Habíamos pensado en la Plaza de la Memoria por el ‘Nunca Más’, por todos los hechos que no queremos que suceden más. Queríamos vincular la memoria sobre la dictadura con la cuestión de género. Teníamos la idea de revalorizar el rol de la mujer en la sociedad, que la violencia y los femicidios se visualicen como fenómenos, porque aparecen naturalizados como si fuesen parte del paisaje”. Sin embargo el pedido nunca tuvo respuesta. Tres días después desaparecía Katherine y una semana más tarde aparecía su cuerpo sin vida enterrado en un médano del barrio Kirchner.

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Basta de femicidios

A pocas horas del hallazgo del cuerpo sin vida de Katherine, autoridades de la policía bonaerense, políticos y funcionarios de la Provincia de Buenos Aires se hicieron presentes en el balneario. Pero no vinieron a buscar verdad y encontrar justicia, vinieron a continuar con el encubrimiento, la complicidad y el manejo de pruebas basadas en redes de poder. A pocos días el Ministro de Seguridad Ricardo Casal habló abiertamente a los medios masivos, dando su apoyo a las autoridades locales y al operativo policial, afirmando que «lo importante es que claramente quedó demostrado que este es un homicidio causado por relaciones interpersonales”. Sin embargo, la abogada de la familia de Katherine, María Raquel Hermida Leyenda, sostiene fuertemente que se trata de un femicidio.

El poder dominante siempre quiere hacernos creer que los femicidios y los actos de violencia son por cuestiones «interpersonales”, «pasionales”, de «celos” o «instintivas”, como si el asesinato y el maltrato hacia las mujeres se dieran en el vacío, fuera de todo contexto o lugar. Sin embargo, la violencia se da bajo determinadas relaciones sociales, y en este sistema -patriarcal y capitalista- los perjudicados siempre son los sectores más pobres y postergados: principalmente jóvenes y mujeres. Y Katherine era mujer, joven, pobre y vulnerable. «Monte es hermoso para algunas personas y no para otras”, concluye una conocida de ella.

«Mientras marchamos nos vamos organizando”

Luego del femicidio de Katherine, las convocantes a la actividad del 3 de junio en Monte Hermoso vieron necesario abrir la organización del evento. «Dijimos: mejor hagamos la actividad en la plaza del Fonavi, la plaza de Kathy, la plaza del barrio dónde vivía ella, ahí está la hamaca que ella usaba. Además desde que desapareció nos reunimos siempre ahí”.

En el contexto de creciente presencia policial en la ciudad, de internas políticas de los partidos dominantes y de posible vinculación de gente del poder en el femicidio, circula entre la población el temor a que la actividad «sea política”. «Nosotras nos queremos movilizar contra la violencia de genero, como se moviliza en todo el país. El 3 de junio en Monte Hermoso es Kathy. Vamos a hacer actividades culturales, para que la gente se acerque: talleres, música en vivo, teatro, coreografías, queremos pintar una bandera y plantar un árbol. Sublimar el dolor, la angustia y la injusticia. Cuando estoy en la marcha y organizo me siento mejor, mejor que cuando me quedo en mi casa, ahí me pongo mal y triste”.

Sin embargo hay otra paradoja más de este sistema que oprime y mata, que encubre y oculta, pero que también encuentra resistencias, organización, lucha. El miércoles 3 de junio, mientras masivamente el pueblo se expresará contra los femicidios en todo el país, en Monte Hermoso un pueblo se despedirá de los restos de la joven asesinada. La actividad local contra los femicidios convocada por la Comisión de Justicia por Katherine se llevará adelante el sábado a las 16 hs en el mismo lugar, la plaza del Fonavi, la plaza de Kathy.



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