A un año del incendio de Iron Mountain, siguen las dudas
El 5 de febrero del 2014 el galpón de la multinacional Iron Mountain se incendiaba cobrándose la vida de 9 bomberos y un rescatista. La sospecha es si el incendio fue provocado. La investigación todavía no arrojo resultados, recién en estos días la fiscalía comunicó la llegada de los mismos, basados en los análisis sobre los restos del incendio. Los familiares reclaman justicia y un inspector que había planteado la clausura del galpón en aquel momento, acusa al Gobierno de la ciudad de ocultar información. Por ANRed
Esta mañana, se realizaron dos actos en homenaje a las victimas del incendio en la empresa Iron Mountain, en uno de ellos los familiares reclamaron a la ministra «que se haga justicia”, criticaron la escasa profundidad en la investigación y la falta de resultados. El momento emotivo fue cuando a las 9:15hs comenzaron a sonar las sirenas en los 900 cuarteles, la solidaridad de los bomberos se hizo sentir recordando la hora exacta en que se producía el derrumbe que se llevaba la vida de 9 bomberos y un rescatista.
El hecho ocurrió el 5 de febrero del 2014, en la mañana cerca de las 8:00hs se disparó la alarma de incendio de dos sectores del depósito de la calle Azara 1245. Los empleados de seguridad y de limpieza intentaron combatir el incendio, pero al ver que ello no era posible llamaron al 911 que movilizó a distintas dotaciones de bomberos. Mientras trataban de extinguir el incendio, un grupo de bomberos intentaba ingresar al predio por una entrada de la puerta del galpón cuando una pared se desmoronó encima y les provocó la muerte.
En los próximos días recibirán los resultados de los análisis efectuados por la División Siniestros de la Policía Federal Argentina sobre los escombros. También esperan los informes del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). Esos informes permitirán echar luz sobre dónde comenzó el fuego, cuál fue la fuente, la temperatura del lugar. Así informo a través de un comunicado la fiscal Marcela Sánchez, interinamente a cargo de la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción N° 37.
Pero la pregunta que resuena es: ¿fue un accidente o fue intencional? Iron Mountain ha sido noticia por varios incendios en sus depósitos en otras sucursales en Canadá, Inglaterra, EE.UU. e Italia. La sospecha que los incendios son intencionales, se deben a la frecuencia en que estos suceden, teniendo en cuenta que la mencionada empresa se dedica a brindar seguridad, confidencialidad en archivos o destruir información. Pero como un bunker, supuestamente equipado con todos los elementos de seguridad contra incendios resulto tener los tanques proveedores de agua vacíos
Se reclama que aquellos depósitos nunca debieron estar habilitados y cuestionan al gobierno de Macri por corrupción. El Ing. Edgardo Castro que en ese momento era el inspector del trabajo de la Ciudad, denunció las irregularidades solicitando la clausura del galpón donde funcionaba Iron Mountain. «Queda claro el Gobierno de la Ciudad oculta información para proteger a la empresa ya que, mediante argucias y actos de mala fé, me impiden acceder a la copia de las actuaciones de la Subsecretaría de Trabajo sobre Iron Mountain tratando de evitar que se hagan públicas sus responsabilidades». Y agregó, «Parece que el ministro Francisco Cabrera y el subsecretario Ezequiel Sabor no tomaron nota de los derrumbes, muertes e incendios que sucedieron durante su gestión porque siguen mirando para otro lado, más preocupados por los negocios que por la seguridad pública».
Entre los clientes que tenía que proteger sus archivos o destruir su documentación confidencial se hallan desde todas las AFJP ya nacionalizadas hasta bancos extranjeros, como el HSBC. Asimismo el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires había contratado los servicios de la empresa y la había premiado en el 2008 por ser la primera a instalarse en el predio Tecnológico de Parque Patricios.
La multinacional tiene una sede de la zona rural de Pennsylvania, ubicada a 67 metros de profundidad, que mide 4,82 kilómetros de largo, 3,2 kilómetros de ancho, cuenta con caminos que suman 32 kilómetros, ocupa un área de 159.000 kilómetros cuadrados y cuenta con una «protección de capas múltiples” y un plantel propio de bomberos.
El Presidente de la multinacional, William Meaney, se desempeñó como oficial operativo de la Central Inteligency Agency (CIA) durante mediados de los años 80, luego se dedicó a la medicina, y fue Director General de South Africa Vaccines Producers, fabricante de vacunas y sueros, y mas tarde, antes de incorporarse a Iron Mountain, CEO durante varios años del Grupo Zuellig Pharma, con sede en Kuala Lumpur, Malasia, distribuidor de medicamentos y ensayos clínicos en el Lejano Oriente con capacidad de manejar todo tipo de medicamentos incluyendo narcóticos. Hasta el magnate norteamericano Paul Singer, titular del «fondo buitre” neoyorkino Elliot Found, y protagonista de oscuras especulaciones es uno de los accionistas de Iron Mountain.