Masivas movilizaciones en 31 ciudades de Colombia contra la reforma de la Ley 30
Los pasados miércoles 6 y jueves 7 de abril hubo masivas movilizaciones en 31 ciudades de Colombia contra la reforma de la Ley 30. La primera con presencia mayoritaria de educadores, la segunda con representes de otros sindicatos, delegaciones de estudiantes de otras regiones y estudiantes de las universidades públicas y la tercera, la más masiva, con estudiantes de las universidades más grandes de la ciudad (Pedagógica, Distrital y Nacional) acompañados, entre otros, por los de la Universidad del Colegio Mayor de Cundinamarca. Por Notiagen, de Colombia.
Las marchas estudiantiles cubrieron en buena parte la carrera Séptima desde la calle 72 y además de estudiantes universitarios, se hicieron presentes estudiantes del Sena -quienes madrugaron a tomarse la Primero de Mayo con 30- y diversos colegios de secundaria e Inem (Institución Nacional de Enseñanza Media).
En la tarima de la plaza dirigentes gremiales como el presidente del Sindicato de Trabajadores de Universidades Públicas (SINTRAUNAL) o el de la Asociación Distrital de Educadores (ADE) e improvisados oradores emocionados destacaban lo grandioso de la movilización y la señalaron como un símbolo del despertar de importantes sectores frente a las políticas del actual Gobierno. Asimismo señalaban que ése era el camino para lograr frenar políticas como la reforma a la Ley 30 que pretende abrir la puerta a la inversión privada en la educación pública y la castración de la autonomía universitaria, consagrada en la Constitución de 1991. Las oposición a las medidas del Plan Nacional de Desarrollo también fue fuerte en los discursos.
Al lado de estudiantes y docentes también se encontraban trabajadores de las universidades públicas agrupados en SINTRAUNAL, trabajadores de hospitales locales como el del Sur y Fontibón; y diversas organizaciones de personas y víctimas de la represión y la violencia en el país.
Los discursos que cerraron la movilización señalaron que éste era apenas el inicio de una gran lucha que no sólo pretendía alcanzar esas metas concretas frente a la reforma educativa y el Plan de Desarrollo, sino que se proyectaba ganar el protagonismo que la sociedad organizada está jugando en realidades como el norte de África. Grupos estudiantiles señalaron la propuesta de la realización de un paro nacional estudiantil para el semestre entrante en caso de que el Gobierno persista en llevar a cabo la reforma.
Una estudiante denunció que Pedro Contreras, estudiante de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Distrital perdió un ojo a causa de la golpiza recibida por parte del ESMAD tras las movilizaciones universitarias de esta semana.
Con el repicar ruidoso de las papas explosivas al fondo y ante el anuncio de una nueva lluvia, la concentración se empezó a diluir dejando a Bolívar encapuchado, abrigado por diversas banderas y sosteniendo un cuadro multicolor, símbolo de la educación emancipadora que sueña construir la comunidad estudiantil. La gente se despidió pensando en la próxima cita para llenar las calles de Bogotá y la plaza Bolívar el Primero de Mayo.
